Alejandro A. TagliaviniMorir en Venezuela, entre izquierda y derecha
2014-05-15 - 15:56:33
¿Existe una solución armónica para los problemas sociales, humanos, o estamos condenados a la lucha permanente? Lo cierto es que estamos condenados a la confrontación sin tregua… pero solo debido a nuestra ignorancia, porque desde el punto de vista puramente teórico sí existe solución a las cuestiones sociales de modo que todas y cada una de las personas puedan beneficiarse y realizarse. De hecho, cuando le presenten una salida que implique un “costo” para algún sector, no dude de que es falsa.
Durante años los conservadores de derechas dijeron que, por el bien del país, había que “ajustarse los cinturones” y, por cierto, este ajuste solía caer sobre los más pobres. Por el contrario, Joaquín Villalobos, ex guerrillero salvadoreño, en una columna –“Inteligencia, paciencia y mucho diálogo”- publicada en El País de España, escribió que “en política podemos decir que ‘no hay inclusión que no pase factura’”. Erradas ambas soluciones, porque en la naturaleza las cosas se desarrollan armónicamente en beneficio de todos.
Mientras que El Universal de Caracas, luego de 105 años, corre riesgo inminente de dejar de imprimirse debido a que el monopolio estatal de la violencia –el “gobierno”- impide el ingreso de papel, la gente muere por causas tan torpes como que este mismo gobierno reprime la entrada de medicinas. El 24 de abril, por caso, el padre del joven Juan Andrés tuvo un infarto. El médico le había recetado Asaprol 1 mg e Isordil 15 mg que no se consigue en Caracas. Unas primas cruzaron el Arauca y consiguieron, en Colombia, quince frascos de Isordil. Pero la remesa se perdió en camino. Ese mismo día el Ministerio del “Poder Popular para la Salud” no tuvo el formato EV-14 para el certificado de defunción.
Los grupos de autodefensa de Michoacán, formados hace poco más de un año para, como siempre han sostenido, hacer uso de su derecho legal a la defensa propia contra el crimen y los abusos de Los Caballeros Templarios, comenzarán a operar de manera “regular” –esto es, aprobados por el monopolio de la violencia, el gobierno- dentro de unas semanas en todos los municipios de la entidad, a través de la nueva Fuerza Rural Estatal (FRE), que en palabras del comisionado para la Seguridad de la región, Alfredo Castillo, vendrá a cumplir con las labores que la Policía Municipal a la que ha acusado de ponerse “al servicio del crimen organizado”.
Y a no dudarlo, es solo cuestión de tiempo para que la FRE siga el camino de la Policía Municipal, cuando la enorme cantidad de dinero que obtienen los narcos gracias al monopolio en el tráfico de drogas dañinas que le garantiza, de hecho, la “prohibición” legal estatal, consiga corromperlos.
Derecha e izquierda creen que los problemas sociales se resuelven con violencia cuando ya los griegos sabían que esta es contraria al desarrollo natural de los acontecimientos y, por tanto, mal puede resolver nada. Una “autoridad” coactiva, basada en la violencia, solo será destructiva. “Toda transición necesita un Estado fuerte… Guatemala redujo dramáticamente su poder coercitivo… El resultado fue un vacío de poder que llenaron grupos criminales y lo mismo ha ocurrido en Honduras y El Salvador… La crisis de seguridad en casi todo el continente tiene más relación con debilidad del Estado…” pudo haber escrito cualquier derechista pero en este caso lo firmó Joaquín Villalobos.
*Miembro del Consejo Asesor del Center on Global Prosperity, de Oakland, California
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