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Charles Suárez

Cuando rendimos nuestra voluntad


2015-05-19 - 09:53:21
Salmos 135:5-7
Muchas motivaciones tiene el hombre cuando conoce al Señor y quiere servirle. La Biblia, la palabra de Dios, nos dice que aunque sea por envidia o contienda, (Fil.1:15-18) igual, a nadie se le debe impedir anunciar a Cristo.

Pero, cuán delicioso, cuán hermoso y sobrenatural es hacer la obra de Dios cuando estamos en su perfecta voluntad. Cuando lo que hacemos tiene una correcta, honesta motivación y está en el propósito de Dios. Hace tres días llegamos de cumplir una MISIÓN que la llamamos:
"Nuestra mirada en Potosí" y en verdad no existen palabras para expresar nuestra gratitud a Dios por llevarnos a cumplir un misión tan bella, tan acertada, tan genuina y seguida de prodigios y maravillas.

PASOS PARA UNA MISIÓN EXITOSA
PRIMERO: Orar, ayunar y pedirle confirmación a Dios de este propósito (Jue. 18:5-6)
SEGUNDO: Compartir con nuestro pastor presidente la carga y el desafío que Dios nos había puesto y pedirle su cobertura (Heb. 13:17).
TERCERO: Elegir a la gente correcta con la motivación correcta para ir a la batalla (Lc. 6:12-13).
CUARTO: Hacer una campaña y recolectar un regalo para cada niño que podía traducirse en una cajita de zapatos con utensilios necesarios para los niños, y presentar el mensaje de salvación con ese hermoso regalo, pues la fe sin obras es muerta (Mt. 5:16).
QUINTO: Jamás invadir un territorio sin la cobertura local. Previamente, visitamos al presidente de ACE quien oró por nosotros y nos contactó, con un siervo de Dios lleno del Espíritu, y a la vez representante de todos los pastores locales.

Amados hermanos ha sido increíble ver que lo sobrenatural se hizo realidad en solo tres DIAS de visita. Conseguimos en solo tres semanas recolectar casi cuatrocientas cajitas felices. Algunos hermanos maravillosos, que creyeron en nosotros y la misión que Dios nos había encomendado, nos apoyaron con algunos recursos. Y muchos otros con sus fervientes oraciones.

SEMANA PREVIA: Ayunamos y tuvimos tiempos unidos todo el equipo de ORACIÓN (Ef.4:3).
DIA 0: (Sal. 37:5) Empacamos y seleccionamos cada una de las cajitas y las embarcamos en una flota. Dieciocho cajas grandes, y veintisiete colchas.

PRIMER MILAGRO. (Día 1) (Pr. 16:3) Con el apoyo incondicional de nuestra esposa, conseguimos la libre disponibilidad de dos boletos y una generosa rebaja del 30% de los cuatro boletos restantes en una línea aérea. Alzamos vuelo a las 19:00 pm. Del día lunes 29 de julio.

SEGUNDO MILAGRO: (Dt.1:30; Dt. 31:8) Sin saber qué nos deparaba en la ciudad más alta del mundo; cuatro mil trescientos metros de altitud, llegamos con un frío de menos de cuatro grados bajo cero. Ena esta legendaria e histórica ciudad, sin saberlo nos estaban esperando dos vagonetas Toyota con 3 ángeles que nos condujeron a una solidaria y acogedora iglesia. Ese primer día tuvimos un contratiempo que obró para bien. (Ro. 8:28) Sofía, la gestora inicial de este desafío se nos enfermó. Tuvo que quedarse en el hotel, pero ahí ella le dijó a Dios: "Esta bien señor si tu quieres que no esté con el equipo este primer día, te pido que me hables hoy mismo" El ESPIRITU de Dios la visitó aquella mañana y le dio una palabra (Jer. 34) propia para la ciudad, y su alcalde. Fue sobrenatural. Todos quedamos impactados por los extraños caminos que Dios tiene en ciertas coacciones. Ahora, yo digo, acaso ¿Dios no está en nuestros caminos? ¿No ve él mis caminos, Y cuenta todos mis pasos? Job. 31:4 Is.55:8 "Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas."PROVERBIOS 3:6 Muéstrame, oh Jehová, tus caminos; Enséñame tus sendas. SALMOS 25:4

Ese mismo DIA en la " Casa de Dios" como se llama la iglesia que nos acogió, Dios derramó un espíritu de oración muy especial sobre todo el equipo. Mostró un sentir y puso una palabra de exhortación en mi corazón para compartirla con los pastores de toda la ciudad y las autoridades municipales y de la GOBERNACIÓN.

Pero no todo quedó allí, a través del pastor Daniel mostró una palabra y una visión de por qué en la ciudad de Potosí había tanta idolatría, pobreza y saqueo, que de alguna manera afectaba en la realidad a toda nuestra nación. Ap. 2:13-17

TERCER MILAGRO: (Día 2) Dios preparó, la logística, y desplazamiento hasta las minas de manera sobrenatural. Sin costo, guiados por verdaderos ángeles, llegamos hasta la mina "Caracoles" en el cerro Rico de Potosí. Ahí tuvimos Otro inconveniente. Una de las movilidades se calentó el motor y se negaba a subir al cerro. Ese inconveniente se convirtió en BENDICIÓN al venir a nuestro encuentro la primera niñita hija de un minero que recibiría a Jesús y su primera cajita, entre lágrimas en los ojos. Luego de quedar anonadados de la crudeza de la vida de niños al pie de la mina, al lado del primer socavón, en la presencia de unos 20 niños, luego de enseñarle la canción "hombrecito chueco" una niña llamó a Marcela, una joven miembro del equipo, y agarrándola de la mano llorando desconsoladamente le dijo: "quiero que en este momento JESÚS entre para siempre en mi corazón aunque mi mami y mi papi no quieran que yo vaya a la iglesia"

Luego fuimos a "Robertito" una mina que incluye una guardería de cien niños hijos de mineros al otro lado del cerro, y un niño, hijo de mineros, se acercó a Sofy, le agarró de la mano, y le dijo: " hay que Bonita mi cajita que JESÚS me mandó"

CUARTO MILAGRO. Tercer DIA. Llegamos hasta un lugar, a un costado del cerro rico, donde viven muchos mineros y habíamos llevado cincuenta cajitas, que era el número que se estimaba que iban a estar. Unos hermanos ex-mineros y unas hermanas que trabajaban en una guardería, habían salido casa por casa a invitar a niños inconversos. Esa tarde tuve que compartir el mensaje de salvación tres veces, porque llegaban y llegaban más y más niños con sus mamas. Cuando acordamos teníamos a más de cien niños. Yo dije: "JESÚS y ahora qué vamos a hacer" Los niños estaban todos excitados y expectantes en recibir su regalo, y si alguno se quedaba sin el mismo cuan frustrante y doloroso podría ser. Nos miramos con Samuel, con una cara de pánico.

¿Y ahora qué hacemos? Y aunque habíamos guardado 18 cajitas para unos niños que nos esperaron temprano en la mañana, igual solo llegábamos a setenta y tres. Fue ahí que con mi cara de pánico pero confiado, dije entre mi:"¡Señor algo tienes que hacer¡...pero ningún niño se debe quedar sin su cajita. Hermanos llegamos a la última cajita, y la fila solo quedaba un solo niño con su mamá. Fue algo increíble. Fue asombroso. Fue sobrenatural. Con la última cajita, quedó el último niño. Samuel Nielsen me miro y me dijo pastor este es un milagro. Y yo con gozo inefable le exprese. ¡Si hermano igual como el milagro de la multiplicación de los panes y los peces! (Mt. 14:15-20).

¡Dios es el mismo de ayer, hermanos! Dios es real amados. Dios es fiel. El nos respalda cuando esta-mos haciendo la obra en su perfecta voluntad. El es el dueño de la obra.

QUINTO MILAGRO. Daniel, Sofy, David y Pablo, llegando a otras minas, encontraron un niño que trabajaba en una de las minas y fue muy fuerte todo lo que ocurrió y vivieron en interior mina, sobre el culto al diablo que en todas las minas existe.

Entrevistaron a un hombre que parecía de unos 38 años pero que resultaba que apenas tenía 18 años, expresando su reverencia hacia el diablo y de no querer que se hable de JESÚS adentro de la mina.
SEXTO MILAGRO. El ESPIRITU Santo convocó a ocho pastores de POTOSI, incluyendo al presidente de todos ellos y las puertas todas se abrieron para la implantación de la Universidad de la familia en Potosí y de participar con un stand en la Feria de la "Expo-vida" donde anhelan en este año implantar la Universidad en Potosí. Algunas bendiciones más, ocurrieron, que no las puedo contar hasta que se concreten en un 100 por ciento.

SÉPTIMO MILAGRO. Los recursos económicos eran limitados, pero luego de pagar el Hotel donde, por iniciativa de los hermanos del presidente de la Asociación querían pagar un 100% (no lo comprendo todavía, pues esta locura era nuestra) dejamos que solo participen del 50% pues, ellos, habían sido tan generosos, en la recepción, alimentación, traslado, logística de todo el equipo. Subimos al avión para retornar a Santa Cruz y verifiqué que solo en mi bolsillo quedaban 3 bolivianos. Fue increíble.

Dios hasta el último momento sustentó, y fue fiel con la Misión:"Nuestra mirada en Potosí" (Sal. 71:1; Sal.119:116; Pr. 16:3).
¡Alguien dijo una vez: "No creo en milagros...los espero cada día" ¿Y tú qué?

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