Norah Soruco de SalvatierraBurocracia tramposa
2016-10-31 - 12:45:05
Las ‘importantes ocupaciones’ de los altos ejecutivos de las instituciones públicas y algunas privadas, les impiden valorar las trabas y retardo burocrático que sufrimos cotidianamente. Por considerarlo insubstancial, no miran este casi generalizado problema en el sector público ya contagiado a varias privadas. Es seguro que esta omisión tendrán que lamentarla más temprano que tarde, porque en su acumulación, desprestigiará su probable buena gestión cuando se la califique de corrupta, acarreándoles altos costos políticos y legales.
Las trabas y demoras burocráticas, sólo tienen el fin de crear condiciones de urgencia y hasta desesperación del ciudadano para extorsionarlo, no se puede entender de otra forma que recibido el pago, esos trámites se expidan con una rapidez sorprendente. Le ponen precio al ‘paso’ de un escritorio a otro, de una sección a la siguiente o a la firma del jefe, a una ciudadanía indefensa condenada a largas colas, en ambientes caldeados, donde la tecnología no llegó y en tal contexto, es un estorbo para los aviesos fines de una burocracia tramposa.
Porqué los trámites deben durar semanas, meses y hasta años? No es válido el pretexto de ‘acumulación de trabajo’, si a nuestra vista y paciencia los funcionarios están leyendo el periódico, conversando entre sí o por celular, y menos, el ‘padrinazgo político’ que en vez de justificar la impunidad debiera ser mayor razón para exigirles un desempeño correcto.
Los supervisores, si existen, muestran un ‘amiguismo vergonzoso’ con sus supervisados, echando por tierra la onerosa propaganda de ‘beneficio al ciudadano’ o ‘atención orientada al cliente’, convertida en un insulto a la inteligencia si las máximas autoridades pretenden ignorar tanto atropello.
Debemos insistir, la automatización de los procesos y la simplificación de trámites se inscriben en el imperativo inexcusable de lucha contra la corrupción.
