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José Percy Paredes Coimbra

General de hombres libres!


2019-05-19 - 20:16:13
Nacido en Niquinohomo – Nicaragua, un 18 de mayo, Augusto Nicolás Calderón Sandino, pasó a la historia como Augusto César Sandino – General de Hombres Libres – nombrado así por el periodista argentino Gregorio Selser y reconocido como tal a lo largo y ancho del planeta.
Este patriota y revolucionario nicaragüense fue un hombre visionario y luchador inclaudicable contra la ocupación e intervención norteamericana. Su pensamiento no sólo se circunscribe a Nicaragua, en un determinado período de tiempo, sino que trasciende tiempo y espacio y puede ser guía a cuantos países de hombres libres sean atacados por el imperio del norte.

En Nicaragua es honrado como un héroe, mientras que los vende patria que lo gobernaron si son recordados, lo son por sus acciones cobardes y entreguistas, como una deshonra a la patria y a su pueblo. Como no pudo ser de otra manera, Sandino fue emboscado, luego de haber sido invitado a una reunión en palacio de gobierno, para tratar, supuestamente, de un desarme. Camino a la ficticia reunión, un 21 de febrero de 1934, fue asesinado por un cobarde de apellido Somoza, Jefe de la Guardia Nacional de ese entonces.

Sandino inició su vida laboral como minero, primero en Nicaragua, luego en Honduras y México, retornando en 1926 a su patria; indignado por la ocupación norteamericana a su país desde 1916 y por la falta de respeto y patriotismo de quienes gobernaban en ese entonces.

Un tratado y un convenio firmados entre los gobiernos de Nicaragua y de Estados Unidos, aseguraban los intereses norte americanos en territorio nicaragüense, por encima de los ciudadanos de este país y tenían a Nicaragua como un feudo del imperio del norte.

El Tratado Bryan – Chamorro, firmado el 5 de agosto de 1914, aseguraba concesiones políticas y territoriales a Estados Unidos en Nicaragua, a cambio de una fuerza militar estadounidense que garantizaría la ‘estabilidad interna’, dicho en otras palabras, aseguraría la continuidad del Partido Conservador de Nicaragua (y las familias que lo dominaban) en el gobierno y enajenaba territorio Nicaragüense a favor de Estados Unidos, por 99 años renovables a su fenecimiento, entre otras cosas, para la instalación de una base naval norteamericana en el Golfo de Fonseca, donde este país lo decidiera.

Entre 1910 y 1926, el Partido Conservador de Nicaragua, liderado por Adolfo Díaz Recinos, presidente en función, Emiliano Chamorro Vargas (presidente en las gestiones 1917 y 1926) y Diego Manuel Chamorro Bolaños (tío del anterior y presidente durante la gestión 1921), además de entregar territorio nacional a favor de Estados Unidos, con el fin de que el imperio del norte construya un Canal que uniera el Atlántico y el Pacífico, tal cual el Canal de Panamá; la enajenación del Golfo de Fonseca, que no le pertenecía únicamente a Nicaragua, sino a los cinco países que nacieron a la vida republicana a orillas de este Golfo generó un conflicto internacional, entre hermanos centroamericanos.

El Convenio Stimson – Moncada fue firmado el 4 de mayo de 1927; es también conocido como ‘Pacto del Espino Negro’, y se refiere a la firma de un convenio entre el gobierno estadounidense y José María Moncada, líder del grupo liberal, que encabezaba la ‘Revolución Constitucionalista’, que prácticamente triunfaba sobre los conservadores y contaba con el apoyo político y militar de México.

Este Convenio fue planteado por el país de norte porque así le convenía a sus intereses y colocaba fin a la guerra fratricida, dando una imagen de control y fuerza norteamericana en la región y, además, mantenía al presidente Adolfo Díaz Recinos, quién estaba prácticamente fuera del gobierno, derrotado por los liberales liderados por José María Moncada. Este convenio fue un éxito diplomático del imperio del norte.

Los generales sub alternos de Moncada, aceptaron este pacto, menos uno, Augusto César Sandino, quién le escribió una nota clarísima a Moncada en rechazo a la posibilidad de aceptar la imposición norteamericana, un día antes de que éste firmara el Convenio.

Sandino lucha intensamente contra estos absurdos tratados; por la firmeza de sus convicciones, a lo largo de su lucha, logra reunir un grupo de 3.000 guerrilleros. Durante seis años combatió contra las tropas de diferentes gobiernos apoyados por Estados Unidos, al término de los cuales se había ganado la admiración popular.

Logró que, en 1933, Estados Unidos retire sus tropas de territorio nicaragüense; el tratado se mantuvo vigente hasta el 14 de julio de 1970, aunque los proyectos planteados por Estados Unidos y que, en teoría, “beneficiarían” a Nicaragua, nunca se concretaron.

El pensamiento y accionar de Sandino, años después dio nacimiento al Frente Sandinista de Liberación Nacional.

Este resumen, bastante escueto del accionar de Sandino, nos muestra el accionar de Estados Unidos, involucrándose e interfiriendo en la vida política de los países donde tuviera intereses. También nos muestra la actualidad y fortaleza del pensamiento de Sandino, que consideraba que las ‘guerras internas’ en Latino América eran instigadas, fomentadas, mantenidas por Estados Unidos, para interferir en la gobernabilidad de los mismos y apoderarse de sus recursos.

¿Todos estos convenios firmados al principio del siglo pasado y los supuestos beneficios que obtendrían sus seguidores, no les parece muy similar a lo que vivimos hoy? ¿No se parece al reconocimiento veloz de Guaidó como ‘presidente’ de Venezuela, por encima del presidente elegido democráticamente? ¿No se parece a la avalancha de mentiras y cuentos que lleva a unos pocos nicaragüenses, en estos días, contra el gobierno legitimamente establecido?.
Patria o muerte…venceremos

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