Gisele Bundchen vistió una Burka para no ser reconocida cuando ingresó a una clínica de cirugías estéticas en París.
La super modelo brasileña se escondió tras una vestimenta tradicional que usan la mujeres en los países musulmanes, con cara y cuerpo cubiertos, pero hubo detalles que delataron que era ella.
Lo primero sus sandalias, pues las musulmanas usan zapatos cerrados. También fue visto que su chofer, quien trabaja desde hace 5 años con ella, fue quien la llevó a la clínica.
Extraoficialmente se sabe que Gisele sólo se hizo un retoque en los ojos y modeló y reafirmó el busto, ya que lo tenía flácido después de tener a sus bebés.
LA BOTANA