Martes 19 de marzo 2024 Contacto

¿Quién asesinó al sangriento dictador Josef Stalin?




05/03/2015 - 11:20:15
ABC.es.- La noche del 28 de febrero de 1953, Josef Stalin celebr� una reuni�n en K�ntsevo con su c�rculo de hombres de confianza. En dicho encuentro los invitados vieron una pel�cula y se retiraron a altas horas de la madrugada, cuando Stalin se fue a dormir. No obstante, seg�n una versi�n no oficial, el sangriento dictador se retir� luego de discutir gravemente con dos de sus seguidores, L�zar Kagan�vich y Vorosh�lov. Al d�a siguiente, Stalin no sali� de su cuarto y no llam� ni a los criados ni a los guardias. Nadie se atrevi� a entrar en su habitaci�n hasta que, sobre las diez de la noche, su mayordomo forz� la puerta y lo encontr� tendido en el suelo, vestido con la ropa que llevaba la noche anterior y sin apenas poder hablar. El dictador hab�a sufrido un ataque cerebrovascular que, tras unos d�as de agon�a, le caus� la muerte el 5 de marzo. Al menos as� reza la teor�a oficial, sobre la que rondan innumerables inc�gnitas y la sospecha del asesinato.

�El miedo y el odio contra el viejo tirano casi pod�an olerse en el aire�, escribi� el embajador americano sobre los �ltimos meses de vida del que fue durante m�s de 30 a�os Secretario General del Partido Comunista de la Uni�n Sovi�tica. El ascenso al poder de Josef Stalin se caracteriz� por los brutales m�todos empleados contra cualquier persona cr�tica con su figura. Poco tiempo antes de fallecer, el propio Lenin hizo un llamamiento para frenar al �brusco� Stalin, que termin� elevado, posiblemente, al genocida m�s sangriento de la historia.

La salud y la memoria de Stalin fallan
Con millones de muertos a su espalda y terminada la II Guerra Mundial, la salud de Stalin empez� a declinar a partir de 1950, cuando la Guerra Fr�a iba tomando su forma m�s caracter�stica. Durante su vida, Stalin hab�a padecido numerosos problemas m�dicos. Naci� con sindactilia (la fusi�n cong�nita de dos o m�s dedos entre s�) en su pie izquierdo. A los 7 a�os padeci� la viruela, que le dej� cicatrices en el rostro durante toda su vida. Con 12 a�os tuvo un accidente con un carro de caballos, sufriendo una rotura en el brazo, que le dej� secuelas permanentes. A todo ello hab�a que a�adir que su madre y �l fueron maltratados a manos de su padre. Siendo adulto, Stalin adem�s padeci� de psoriasis (una enfermedad de la piel que causa descamaci�n e inflamaci�n).

A los 70 a�os de edad, su memoria comenz� a fallar, se agotaba f�cilmente y su estado f�sico empez� a decaer. Vlad�mir Vinogr�dov, su m�dico personal, le diagnostic� una hipertensi�n aguda e inici� un tratamiento a base de pastillas e inyecciones. A su vez, recomend� al dirigente comunista que redujese sus funciones en el gobierno. Pero apreciando una conspiraci�n, Stalin se neg� a tomar medicinas y despidi� a Vinogr�dov. Su desconfianza, sobre todo contra los m�dicos, se increment� en los siguientes a�os. Una nueva purga pol�tica amenazaba con brotar del ya ensangrentado panorama ruso.

Sus problemas de salud, de hecho, coincidieron con uno de los pocos reveses pol�ticos que sufri� durante su r�gida direcci�n del Partido Comunista. Pocos meses antes de su muerte, en octubre de 1952, se celebr� el XIX Congreso del PCUS, donde Stalin dej� entrever sus deseos de no intervenir militarmente fuera de sus fronteras. Frente a esta opini�n, Gueorgui Malenkov �colaborador �ntimo del dictador y Presidente del Consejo de Ministros de la URSS a su muerte� hizo un discurso en el cual reafirm� que para la URSS era vital estar presente en todos los conflictos internacionales apoyando las revoluciones socialistas, lo que despu�s ser�a una constante de la Guerra Fr�a. Como un hecho in�dito tras d�cadas de un f�rreo marcaje, el Congreso apoy� las intenciones de Malenkov y no las de Stalin.

La doctora Lidia Timashuk le alert� de que los m�dicos trataban de envenenarle.

Fue entonces cuando Stalin se decidi� a reanudar sus purgas. Lo hizo motivado por el peque�o tropiezo pol�tico y alertado por una carta de la doctora Lidia Timashuk, una especialista del Policl�nico del Kremlin, que acusaba a su antiguo m�dico, Vinogr�dov, y a otros ocho m�dicos de origen jud�o de estar recetando tratamientos inadecuados a altos mandos del Partido y del Ej�rcito, a fin de acabar con sus vidas. Sin esperar a recibir ninguna otra prueba, Stalin orden� el arresto de los nueve m�dicos y aprob� que fuesen torturados hasta confesar en lo que fue bautizado como �el Complot de los m�dicos�. La persecuci�n afect� en total a 37 doctores de todo el pa�s, 17 de ellos jud�os, mientras que la paranoia anti-semita se extendi� entre el pueblo. A finales de enero de 1953 su secretario privado desapareci� sin dejar rastro. Y poco despu�s, el 15 de febrero, el jefe de sus guardaespaldas fue ejecutado bajo extra�as circunstancias.

Conocedores del r�gimen de extremo terror impuesto por Stalin en el pasado, entre los miembros m�s veteranos del Politbur� (el m�ximo �rgano ejecutivo) corri� el miedo a que una nueva purga estuviera en ciernes. Solo la muerte de Stalin en marzo pudo frenar la escalada de muertes que hab�a empezado tras el congreso de octubre. Precisamente por este clima de desconfianza, aunque la causa oficial de la muerte fue un ataque cerebrovascular, la sospecha del asesinato ha perseguido el suceso hasta la actualidad.

Lavrenti Beria, la posible mano ejecutora
Una vez descubierto al dictador tendido sobre el suelo de su habitaci�n, su hombre m�s fiel entre los fieles, Lavrenti Beria, fue el primero en asistirle, pero lo hizo con cierta parsimonia. No convoc� a los doctores hasta pasadas 24 horas del ataque. Ya fuera por la antipat�a de Stalin hacia los m�dicos (los del Kremlin estaban presos) o por el poco empe�o que ten�an sus hombres en que saliera vivo de aquella situaci�n, la agon�a de Stalin se alarg� varios d�as m�s sin que ninguno de los cirujanos se atreviera a intervenirle o a proponer alg�n tratamiento espec�fico. Seg�n el testimonio de su hija Svetlana Alliluyeva, en ocasiones el dictador abr�a los ojos y miraba furibundamente a quienes lo rodeaban, entre los que estaba Beria �jefe de la polic�a y el servicio secreto (NKVD)�, quien le cog�a de la mano y le suplicaba que se recuperase, pero cuando volv�a a desvanecerse lo insultaba y le deseaba una dolorosa muerte.

El d�a 4 de marzo pareci� por un momento que estaba recuper�ndose y una enfermera comenz� a darle de beber leche con una cuchara. En ese instante, sufri� un nuevo ataque y entr� en coma. Los m�dicos que atend�an a Stalin le practicaron reanimaci�n cardiopulmonar en las diversas ocasiones en que se le detuvo el coraz�n, hasta que finalmente a las 22:10 del d�a 5 de marzo no consiguieron reanimarlo. Los enfermeros siguieron esforz�ndose hasta que su sucesor, Jrushchov, dijo: �Basta, por favor... �No ves que est� muerto?�. No en vano, 90 minutos antes de su �ltimo aliento, a las 20:40, representantes del Comit� Central del PCUS, el gobierno y la presidencia del parlamento hab�an celebrado una reuni�n conjunta para decidir la sucesi�n del dirigente comunista. Hab�a demasiada prisa por enterrarlo y cerrar su sucesi�n como para esperar a que estuviera definitivamente muerte.

El primero en propagar la teor�a del envenenamiento fue su alcoholizado hijo Vasily, que desde el principio denunci� las negligencias m�dicas que rodearon la muerte de su padre. Sin embargo, el m�ximo sospechoso, m�s all� de los m�dicos a los que el propio Stalin acus� de conspiradores, siempre ha sido Beria. Seg�n las memorias de Nikita Jrushchov, que se alz� como el l�der principal del pa�s e inici� un proceso de desestalinizaci�n, Beria lleg� a confesar ante el Politbur�: �Yo lo mat�, lo mat� y os salv� a todos�. Ciertamente, si alguien pod�a frenar los planes de purga del dictador ese era el jefe de la polic�a y el NKVD. Un d�a despu�s de la muerte de Stalin, Beria puso fin a la investigaci�n del �Complot de M�dicos�, junto al reconocimiento de que las acusaciones hab�an sido inventadas.

http://www.abc.es/internacional/20150305/abci-joseph-stalin-misterio-muerte-201503041310.html

Estimados lectores: recuerden que estas noticias las pueden encontrar en nuestro Canal de Whastapp al momento de su publicación.

Sigue el canal de Hoybolivia.com en WhatsApp:
whatsapp.com/channel/0029Va8B7PQ3GJOyC41B2Q1a

Noticias Recientes de Virales

Copyright © Hoybolivia.com Reservados. 2000- 2024