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La salida de Tóásó y Tadic se planeó con un año de anticipación




03/05/2015 - 04:10:01
El Deber.- Fue una evacuaci�n. Ni huida ni fuga: evacuaci�n. As� define Luk�cs Csaba, periodista que particip� del operativo que el viernes de la semana pasada llev� a El�d T��s� y Mario Tadic de La Paz hasta Chile. Fue una operaci�n trabajada con un a�o de anticipaci�n, que se precipit� tras la liberaci�n de ambos el 20 de febrero. Se tomaron todas las previsiones, pero los hombres cruzaron la frontera por Chungar� sin ning�n inconveniente y llegaron como h�roes a Hungr�a.

Seg�n reporte del Ministerio de Gobierno, adem�s de Csaba, T��s� y Tadic estuvieron acompa�ados por Bela Szilagyi y Geza Marossy, todos miembros del cuerpo de voluntarios de la Iglesia Bautista de Hungr�a, que durante seis a�os sigui� la situaci�n del ciudadano h�ngaro en Bolivia y lo visit� varias veces en su celda de San Pedro.

Seg�n explic� Csaba, un a�o antes se hab�a analizado la posibilidad de salir por la frontera entre Bolivia y Per� en la zona de Desaguadero. Se hab�a notado que los jueves hay una feria all� y que ser�a muy f�cil confundirse con la gente y atravesar la frontera. Sin embargo, las buenas relaciones existentes entre Bolivia y Per� los desalent�. Adem�s, tem�an que Tadic y T��s� estuvieran siendo seguidos por la Polic�a boliviana.

Csaba cuenta que se inclinaron por el paso fronterizo de Chungar� debido a que es una ruta poco vigilada y de alta rotaci�n, lo que permitir�a mayor porcentaje de �xito al momento de la evacuaci�n. Fue as� que viajaron por cinco horas, cambiando de taxis cada tramo, antes de abandonar el territorio nacional.

Silencio en la radio
Nadie quiere contar nada. Tras seis a�os muy expuesto a los medios de comunicaci�n T��s� quiere un poco de silencio. Su hermana, Edit, que durante seis a�os luch� por la liberaci�n de El�d, ahora ha pedido a Csaba que ya no d� entrevistas, que no responda el cuestionario que le lleg� desde Bolivia. �Tengo malas noticias.

Hemos decidido no responder y tengo que respetar los intereses de El�d. Soy solo un periodista y miembro de la Oficina de Cooperaci�n de la Iglesia Bautista H�ngara. Soy un voluntario y tengo que respetar la decisi�n de las v�ctimas�, dice Csaba, pero ya hab�a contado lo suficiente en varias entrevistas y publicaciones en las redes sociales.

En una web rumana, por ejemplo, aclar� que se estaba preparando la evacuaci�n desde hac�a un a�o, que en ese tiempo se hab�a chequeado las fronteras y que hab�a la posibilidad de sacar a T��s� y a Tadic de Bolivia a trav�s del aeropuerto, pero no quer�an correr ese riesgo porque eran personas conocidas.

�Tuvimos un fuerte presentimiento de que las autoridades bolivianas no quer�an que El�d deje el pa�s. Esto se basa en el hecho de que no le devolv�an el pasaporte. Desde el 16 de abril de 2009, cuando tres personas fueron asesinadas en un hotel, hab�a muchos indicios de que un hombre libre podr�a observar la forma de actuar de las autoridades bolivianas�, explic� Csaba a Naszol.ro.

No solo los medios h�ngaros estuvieron atentos al regreso de El�d, sino tambi�n los de Rumania. T��s� tiene doble nacionalidad, ya que procede de una regi�n rumana de etnia h�ngara denominada Pa�s Sz�kely. Se encuentra en Transilvania e intenta obtener mayor autonom�a. Csaba ha realizado documentales sobre esta zona.

Ahora Csaba prepara un documental sobre la salida de T��s�. Pocos d�as despu�s del 20 de febrero, Csaba, junto a Szilagyi y Marossy obtuvieron un subsidio para filmar la salida de T��s� del pa�s. En el texto que escribieron para solicitar la ayuda econ�mica explicaron que tienen abundante material no publicado sobre la vida de El�d T��s� en la c�rcel de San Pedro de La Paz e incluso que algunos fragmentos de entrevista ya se han publicado en la televisi�n h�ngara.

Se�alan que estas im�genes fueron captadas con celulares introducidos al penal. El plan inicial era que tres personas viajaban a Bolivia para filmar el documental y volv�an cinco a Hungr�a. Entre esos cinco no se encontraba Mario Tadic, sino la esposa de El�d T��s�, la boliviana Mar�a Elena Fort�n.

Los planes cambiaron en Bolivia. Eso s�, Csaba aclara que los pasajes del grupo fueron pagados por la Cooperaci�n Bautista y que los 1,8 millones de forintos (poco m�s de $us 6.000) que consiguieron para la producci�n del documental no se utilizaron para el operativo de evacuaci�n. Tambi�n neg� de forma enf�tica que el servicio secreto h�ngaro hubiera colaborado, pese a que es una sospecha de la prensa magyar.

Tadic se esfum�
La �ltima aparici�n p�blica de Tadic fue el retrato que lo ve junto a El�d con los brazos levantados en la frontera con Chile. A partir de ah�, nada se supo del boliviano-croata. En realidad, Tadic solo naci� en Bolivia. Seg�n un medio croata, sucedi� por accidente, ya que su madre se encontraba visitando a su abuelo y no pudo regresar a tiempo. Tadic vivi� casi toda su vida en Chile y en 1991 parti� hacia Croacia para unirse a la Guerra de los Balcanes como voluntario. All� conoci� a Eduardo R�zsa y lleg� hasta Bolivia. All�, en Osijek, Eduardo era h�roe y Tadic un excombatiente con pensi�n vitalicia. All� dicen sus amigos que est� ahora y que no hablar� salvo que Edit T��s� lo convenza de lo contrario.

All� lo esperaba Karoline, su esposa de 50 a�os y Mariano, su peque�o hijo, el ni�o que ten�a siete meses cuando Mario parti� con R�zsa hacia Bolivia y que espera celebrar su primer cumplea�os con su padre. Karoline confes� al diario Vecernji que el peque�o Mariano no sabe que su padre estaba preso y que solo en los �ltimos meses, luego de que fuera liberado de la c�rcel, se acostumbr� a ver su imagen y hablar con �l por internet.

Por ese mismo medio, Karoline y Mario se conocieron y se enamoraron. Formaron una familia que qued� dividida cuando Tadic cay� preso en Bolivia. Karoline solo sab�a que hab�a venido con R�zsa a poner una agencia de turismo en Bolivia.

Nada m�s sabe, solo que todos estos a�os Mario neg� estar implicado en cualquier conspiraci�n para matar al presidente Morales. Ahora, dice que su marido quiere reponerse, que est� agotado mental y financieramente. �Los abogados son muy caros�, explica la mujer, rubia y gr�cil.

La salida

El plan era que tres ven�an de Hungr�a y que volv�an cinco: Csaba, Szilagyi, Marossy T��s� y Fort�n, pero algo cambi� a mitad de camino. Por seguridad, decidieron no decirle a la mujer de T��s� que la evacuaci�n ocurrir�a cuanto antes. Su lugar fue ocupado por Mario Tadic, que presumiblemente viaj� con la delegaci�n hasta Frankfurt con el grupo y luego sigui� a Croacia a reencontrarse con su familia.

Antes de emprender el viaje, Csaba, Szilagyi y Marossy pasaron unos d�as en La Paz. Luego de reponerse del sorojchi, se sacaron fotos en la plaza Murillo y analizaron las posibilidades. T��s� nunca visit� el hotel donde se encontraban alojados sus compatriotas y ni siquiera lo llamaron por tel�fono. Utilizaron mensajes de texto para comunicarse, confiando en que el Gobierno de Bolivia no era tan eficiente como para tener la capacidad de intervenir los tel�fonos de T��s� y Tadic hasta el punto de leer sus mensajes de texto. T��s� y Csaba han contado en Hungr�a que Mar�a Elena Fort�n no sab�a del operativo y que tambi�n fue tomada por sorpresa.

�Por qu� la prisa?

T��s� manten�a una negociaci�n con el Gobierno para retirar la demanda que, junto a Tadic, tienen ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos. �l quer�a una indemnizaci�n del Estado de Bolivia por haber estado tanto tiempo preso sin sentencia, pero tres semanas antes de la salida, las negociaciones se cortaron, seg�n cont� Csaba.
En un contacto desde Frankfurt, el periodista explic� que El�d tiene la esperanza de que el tribunal dependiente de la Organizaci�n de Estados Americanos anule el acuerdo que Tadic y T��s� hicieron con el fiscal para declararse culpables y que pueda concederles indemnizaciones.

�Los derechos humanos fueron groseramente violados. El problema es que el Tribunal est� trabajando m�s lentamente que el de Estrasburgo (el Tribunal Europeo de Derechos Humanos). En tres o cuatro a�os solo han producido un comunicado, pero la negociaci�n a�n est� por venir�, explic� Csaba a Mandiner.hu.

Ahora, poco a poco, T��s� tendr� que rehacer su vida en Hungr�a. Para ello contar� no solo con el respaldo de su familia, sino con los miembros de la Iglesia que vinieron a rescatarlo en una operaci�n de pel�cula. Csaba ya anunci� que si T��s� no encuentra trabajo en su pa�s, se convertir� en un funcionario m�s de la Primera Iglesia Bautista de Hungr�a. As�, el rescate estar� completo

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