Rubén ofrece producción, empleo y servicios básicos
01/06/2015 - 06:20:32
EL DEBER.- Rub�n Costas se puso la vara alta. Con la medalla Diego de Mendoza en el pecho, el bast�n de mando que incluye una astilla de hueso de Andr�s Ib��ez en las manos, el reelecto gobernador de Santa Cruz jur� que pronto el departamento ser� el primero en tener una cobertura total de servicios b�sicos (agua, electricidad y caminos estables) y que la ciudad podr� disfrutar de un sistema de salud de Primer Mundo. Adem�s apost� a la generaci�n de riqueza colectiva como f�rmula de bienestar.
Todo eso lo dijo en un sal�n de la Fexpo, en medio de un ambiente solemne, ante unas 800 personas, un clima lluvioso y una seguridad m�s quisquillosa que de costumbre. El acto de (re)posesi�n de Costas comenz� con 70 minutos de demora.
Al parecer los invitados lo intuyeron, porque llegaron atrasados. Cada uno fue acomod�ndose en las m�s de 1.200 sillas que se previeron y observaban una mesa larga, con una especie de trono de madera lustrada al centro y 14 asientos m�s modestos a cada costado.
Eran para Rub�n y los 28 asamble�stas departamentales. Las �ltimas seis sillas ubicadas a la siniestra del gobernador quedaron vac�as, porque los asamble�stas del MAS decidieron dejar plantado al hombre que gan� la Gobernaci�n con el 59% de los votos.
Pompa y circunstancia
Los que no faltaron a la cita fueron los empresarios privados y representantes de instituciones cruce�as y algunas autoridades religiosas. Luego del desfile y ubicaci�n de los 22 asamble�stas que asistieron, procedieron a invitar a la testera a Ruth Lozada, gobernadora saliente, que ingres� con los s�mbolos del poder departamental para entreg�rselos a la presidenta de la Asamblea Legislativa Departamental.
En su discurso de despedida, Lozada agradeci� a Costas por la oportunidad de dirigir la nave cruce�a por poco m�s de cinco meses y enumer� sus logros de la corta gesti�n: electrificaci�n, caminos y salud, casi un calco de las promesas que vendr�an luego.
Entre los funcionarios de la Gobernaci�n hab�a esmero por hacer las cosas bien, pero tambi�n cierta incertidumbre. Costas comenzar� a trabajar el lunes en las peores condiciones que le ha tocado en los �ltimos nueve a�os. El descenso de los ingresos por IDH tiene a varios trabajadores de la Gobernaci�n sin contrato y con dif�ciles perspectivas de renovaci�n. Si bien se espera que los secretarios -al menos los que hicieron m�rito partidario durante la campa�a- sean ratificados, tampoco es seguro que sigan todos. Habr� que dilucidar el futuro de Lozada. No se sabe si ir� a la Secretar�a de Gesti�n (la que ocupaba �scar Ortiz) o a otra cartera.
El turno de Costas
Luego del discurso de Lozada, Costas ingres� al sal�n acompa�ado de su esposa, Sonia Vincenti, enfundado en un traje negro y con una corbata verde pacay en el cuello. Salud�, abraz� y subi� a ocupar su lugar -el semitrono de madera bien pulida- en medio de los asamble�stas. Pronto jur�, hizo la se�al de la cruz, frente a Kathia Quiroga, y se puso la banda tejida por guaran�es, la medalla del gobernador espa�ol y �l tom� el cetro que lleva parte del m�rtir igualitario.
Ya empoderado, comenz� un discurso que dur� 35 minutos. Cinco ocup� para saludar a los presentes en un tono jovial y la media hora restante para establecer las bases filos�ficas para los cinco a�os que le quedan en la Gobernaci�n. Cuando entr� en materia, cambi� el tono, engros� la voz, calent� al le�n, que sin embargo no lleg� a rugir.
Primero habl� del pasado. De �el tiempo de las provincias�, de la �revoluci�n del patuj�� y de las inversiones en el campo que han llevado al departamento a ser el de mayor cobertura en electrificaci�n rural y agua potable. All� agradeci� a los citadinos, ya que pese a que el esfuerzo ha estado centrado en las provincias -donde habita la poblaci�n con mayor �ndice de pobreza-, la ciudad de Santa Cruz lo premi� con la mayor votaci�n de la historia democr�tica de la ciudad: 65% de los sufragios.
�Por eso somos un gran pueblo, porque somos capaces de mirar a los ojos de la gente y poner las necesidades del otro por delante de nuestras demandas. Y ah� reside nuestra grandeza, una grandeza que compartimos aunque seamos diferentes, aunque tengamos colores diversos o vengamos de lugares distintos para poblar esta Santa Cruz�, dijo Costas.
Ah�, luego de pasar por la globalizaci�n, la teor�a del caos (el aleteo de la mariposa), las protestas de los indignados y los derechos a la carta, habl� de pacto fiscal, de la autonom�a financiera, como la f�rmula para sacar a Bolivia de la pobreza, para no retroceder ni un cent�metro de lo avanzado y generar riqueza individual desde la prosperidad colectiva.
Fue ah� que Costas comenz� a delinear sus principales retos de gesti�n -despu�s del pacto fiscal- en una trilog�a: diversificaci�n de la producci�n, generaci�n de empleo y promoci�n y puesta en valor de los derechos.
En ese abanico entra la promesa de una salud de Primer Mundo en los hospitales de la Gobernaci�n (los de tercer nivel), generar oportunidades para que los universitarios graduados tengan trabajo, la lucha frontal contra el machismo o en entronque p�blico-privado reclamado por los empresarios en la Agenda 2025 del Gobierno central.
Al final, Costas cerr� su discurso agradeciendo, fue ovacionado, se tom� fotos y todos brindaron con chicha y majadito: la cruce�idad tuvo una ma�ana festiva
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