Dos vicarios de Cristo en Bolivia: dichos y hechos
06/07/2015 - 14:46:40
"Puedo decirles con toda sinceridad que visitar Bolivia era un deseo largamente acariciado por m�", dijo Juan Pablo II, el polaco Karol Wojtila, denominado "Papa viajero", al pisar territorio boliviano e iniciar su visita de cinco d�as al pa�s el 9 de mayo de 1988, m�s de 26 a�os antes de la llegada del sucesor de su sucesor Francisco, el "Papa del pueblo", quien permanecer� tres d�as entre las ciudades de El Alto, La Paz y Santa Cruz.
A su llegada a la ciudad altipl�nica de El Alto, desde Montevideo, Uruguay, Juan Pablo II fue recibido por miles de personas que enarbolaban la bandera amarillo y blanco del Vaticano y se regocijaban con la presencia del m�ximo representante de la Iglesia Cat�lica, quien bes� suelo boliviano en s�mbolo de su deseo de visitar la tierra protegida por "la Sant�sima Virgen de Copacabana".
"Van a ser cinco d�as entre vosotros compartiendo nuestras aspiraciones y viendo de cerca este querido pa�s golpeado por la pobreza, la falta de desarrollo, recursos y la injusticia", manifest� el beatificado pont�fice al describir un pa�s presidido por el extinto V�ctor Paz Estenssoro en su cuarta administraci�n (1985-89), sumido en inestabilidad pol�tica, econ�mica y social.
Diferente de la Bolivia de hoy que recibir� a Francisco en el marco de un liderazgo internacional y crecimiento econ�mico, factores impulsados por el Gobierno del presidente Evo Morales.
Una cadena humana escolt� con c�nticos, saludos y sollozos el recorrido de 17 km de Wojtyla, el Papa polaco, desde el aeropuerto de El Alto hasta el Episcopado, antes situado en la avenida Arce, centro de la ciudad de La Paz, pasando por la autopista que une ambas urbes; la misma que recorrer� Jorge Mario Bergoglio, el primer Papa latinoamericano quien se detendr� por unos minutos para bendecir la curva donde se presume asesinaron al padre jesuita espa�ol Luis Espinal, m�rtir por la defensa de los derechos humanos, en marzo de 1980.
El 10 de mayo de 1987 cientos de ni�os hu�rfanos vestidos de blanco corearon, al pie de la ventana del aposento de Juan Pablo II, la canci�n "Amigo" del cantante y compositor brasile�o, Roberto Carlos, que a la letra dice: "T� eres mi hermano del alma, realmente mi amigo...", acci�n que fue replicada por el pont�fice con la frase "el Papa tambi�n quiere a los ni�os".
Posteriormente el papam�vil, prestado de Argentina, traslad� al Sumo Pont�fice a El Alto, situada a 4.050 m sobre el nivel del mar, donde ofici� la primera de sus cinco homil�as, que prosiguieron en las ciudades de La Paz, Cochabamba, Sucre, Trinidad y Santa Cruz, a diferencia de Francisco que celebrar� una sola Santa Misa en la capital oriental.
Al iniciar su pr�dica, Juan Pablo II salud� a los fieles en aymara, idioma originario de Los Andes, con la frase "munata jilanakaj, Jumanakax. Chuymajantawa" que, de acuerdo con la traducci�n en castellano significa "queridos hermanos, est�n en mi coraz�n".
En la tarde de su segundo d�a de estad�a en Bolivia, el Santo Padre visit� a Paz Estenssoro en Palacio de Gobierno para agradecerle la invitaci�n al pa�s y tras una reuni�n una protocolar se dirigi� a la Catedral Metropolitana, al igual que lo har� Francisco con una visita de cortes�a al primer Presidente ind�gena de Bolivia y con el encuentro con las autoridades civiles en kil�metro cero del centro del poder pol�tico del pa�s.
"Todas vosotras aportando cada cual lo peculiar de su propio carisma hab�is de ser servidoras de los pobres", recomend� Juan Pablo II a un grupo de religiosas con las que se congreg� en la Catedral, antes de despedirse de la ciudad de La Paz y dirigirse al departamento altipl�nico de Oruro, situado a 3.700 metros de altura sobre el nivel del mar.
La ma�ana del 11 de mayo el Sumo Pont�fice inici� su jornada m�s intensa en el pa�s con una muchedumbre de obreros y campesinos que lo esperaban al ritmo de La Diablada, danza propia de esa regi�n, donde rompi� el protocolo al usar un caso minero y para acercarse a los pobres a quienes invit� a "vivir en la esperanza puesta en un ma�ana mejor", enmarcado en la lucha contra la injusticia, precepto que en la actualidad abandera el apostolado de Francisco.
En su cuarto d�a en Bolivia, m�s de 600.000 personas asistieron a la misa eucar�stica en Cochabamba, departamento intermedio entre el altiplano pace�o y la oriental Santa Cruz, donde Francisco permanecer� dos d�as, entre el 9 y 10 de julio para celebrar una misa, visitar la c�rcel de Palmasola y participar de una Cumbre Internacional de Movimientos Sociales y Populares.
Juan Pablo II visit� posteriormente la ciudad de Sucre, en el departamento de Chuquisaca, capital de Bolivia, donde una joven campesina proclam� en quechua la Carta del Ap�stol San Pablo a los cristianos de Roma y el Santo Padre convoc� a Bolivia a una nueva evangelizaci�n al destacar las costumbres y tradiciones bolivianas en las que -a su juicio- "se manifiestan la presencia de Dios".
El Sumo Pont�fice visit� tambi�n las regiones de Tarija, Santa Cruz y Trinidad y cerr� su recorrido por Bolivia el 14 de mayo tras manifestar que su "esp�ritu ha estado muy cercano a todos y cada uno de los bolivianos y bolivianas, familias, j�venes, ni�os, campesinos, obreros, intelectuales y dirigentes, pobres y enfermos, a todos los llevo en mi coraz�n y de todos guardar� un imborrable recuerdo".
Wojtila muri� el 2 de abril de 2005. El c�nclave cardenalicio de ese a�o ungi� al sacerdote alem�n Joseph Ratzinger, quien asumi� el Pontificado como Benedicto XVI, hasta 2013 cuando abdic� ante el Colegio Cardenalicio, que eligi� al argentino Jorge Mario Bergoglio, que llegar� a Bolivia procedente de Ecuador el mi�rcoles y dejar� el pa�s rumbo a Paraguay el viernes. (ABI
