Filipinas: La historia de la mujer que se gana la vida matando narcotraficantes
27/08/2016 - 10:46:35
ACTUALIDAD.- Una mujer que mata narcotraficantes para ganarse la vida, y un narco que no puede entregarse por miedo a que la Polic�a lo mate, son algunas de las caras de la "cruzada" filipina contra la droga.
Mar�a (nombre ficticio), una diminuta mujer filipina con un beb� en sus brazos, ha matado a seis personas en dos a�os.
Desde que el Gobierno de su pa�s lanz� su pol�mica guerra contra las drogas, se gana la vida con asesinatos por encargo bajo las �rdenes de su jefe, un oficial de Polic�a.
"Culpable y angustiada"
Ella y su marido, tambi�n asesino a sueldo, son de un barrio pobre de Manila y no ten�an ingresos hasta que se convirtieron en sicarios. Ahora pueden ganar hasta 430 d�lares por encargo entre tres o cuatro "compa�eros", una fortuna en Filipinas.
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte. El presidente filipino sobre la matanza masiva de narcos: "No me importan los derechos humanos"
Sin embargo, la mujer se arrepiente de haber tomado en su d�a esta decisi�n: se siente "culpable y angustiada"; tiene miedo a que las familias de sus v�ctimas "vengan a por ella", y est� preocupada de lo que pensar�n sus hijos, que ya empiezan a preguntar sobre la procedencia de tanto dinero.
"No quiero que nos recriminen que ellos pudieron vivir porque nosotros matamos por dinero", confes� Mar�a a la BBC. Asegura que quisiera dejar el equipo pero no puede porque su jefe ha amenazado con matar a quien lo haga.
"Soy un adicto, pero no mato. Soy un adicto, pero no robo"
Roger (nombre ficticio) est� al otro lado de la barricada. Se "enganch�" al shab� (la droga m�s usada del pa�s) cuando era joven, y luego se convirti� en narcotraficante, trabajando en muchas ocasiones con polic�as corruptos.
Ahora se encuentra fugado y tiene que vivir con constante miedo y moverse cada d�a para que no lo maten. "Cada d�a, cada hora, no logro sacar el miedo de mi pecho. Es agotador y aterrador tener que estar escondi�ndose todo el tiempo", relata el hombre, quien confiesa no poder dormir por las noches despert�ndose "con cada peque�o ruido".
Romeo RanocoReuters
Roger se siente culpable por hacer "cosas horribles" y haber "perjudicado a mucha gente" que se volvi� adicta, "porque soy uno de los muchos que les venden droga", admite.
Sin embargo, asegura que "no todos los que consumen drogas son capaces de cometer cr�menes como robar y matar". "Yo tambi�n soy un adicto, pero no mato. Soy un adicto, pero no robo", afirma.
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, junto a soldados durante una visita al campo militar Capinpin en Tanay, Filipinas, junto a soldados durante una visita al campo militar Capinpin en Tanay, Filipinas
El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, junto a soldados durante una visita al campo militar Capinpin en Tanay, Filipinas, junto a soldados durante una visita al campo militar Capinpin en Tanay,
Cuando el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, asegur� que matar�a a los narcotraficantes, Roger pens� que se refer�a "a los grandes sindicatos que fabrican las drogas, no a los peque�os traficantes como yo".
"Me gustar�a poder volver atr�s en el tiempo. Pero es demasiado tarde. No puedo entregarme, porque si lo hago, la Polic�a probablemente me matar�", confiesa.
El cuerpo de un hombre con una pistola bajo su mano, quien seg�n la polic�a muri� durante un operativo de incautaci�n de droga en Manila, Filipinas
El cuerpo de un hombre con una pistola bajo su mano, quien seg�n la polic�a muri� durante un operativo de incautaci�n de droga en Manila, FilipinasEzra AcayanReuters
Tras ganar las elecciones en mayo, el presidente filipino, Rodrigo Duterte, lanz� una macabra llamada a sus conciudadanos: "Si conocen a alg�n drogadicto, m�tenlo ustedes mismos, ya que ser�a demasiado doloroso pedir que lo hagan sus padres". Duterte asegura que las matanzas durar�n "hasta el �ltimo d�a de mi mandato si todav�a estoy vivo para entonces".
Desde la llegada de Duterte a la presidencia y el comienzo inmediato de su prometida campa�a para acabar con las drogas, m�s de 1.900 personas han muerto, en su gran mayor�a narcotraficantes y drogadictos, a manos de la Polic�a, fuerzas de seguridad y milicias ciudadanas de vigilantes que patrullan las calles.
Los m�todos del presidente filipino Rodrigo Duterte han sido criticados por la Organizaci�n de las Naciones Unidas y EE.UU., que acusan a Manila de violar los derechos humanos y han amenazado con sancionar al pa�s asi�tico e incluso expulsarlo de la ONU.
Duterte acus� a funcionarios gubernamentales de tener v�nculos con el narcotr�fico y tach� de "est�pida" a la ONU por criticar sus medidas en la lucha contra el narcotr�fico.
