México: 1.643 agresiones sexuales por día
22/10/2016 - 10:26:02
S�lo el 1 por ciento de los casos denunciados termina con los agresores en la c�rcel.
El mi�rcoles pasado, cientos de mujeres marcharon en distintas ciudades de M�xico bajo la convocatoria #Niunamenos, lanzada desde Argentina al resto de Am�rica Latina, en contra de la violencia feminicida. Pero horas antes de la protesta, en Tultitl�n, Estado de M�xico, contiguo a la capital, los bomberos encontraron en una casa en llamas el cuerpo de una mujer con golpes, desnudo, heridas de cuchillo o navaja en el est�mago, con huellas de abuso sexual y un palo incrustado en los genitales.
La v�ctima, de la que las autoridades no dieron a conocer el nombre, pas� a formar parte de las siete mujeres que todos los d�as son asesinadas en el pa�s, una naci�n en la que cada vez son m�s quienes toman las calles para exigir al gobierno que act�e y las proteja.
Una fr�a estad�stica convirti� al pa�s en la tierra que no ama a las mujeres: todos los d�as se registran 1.643 agresiones sexuales en contra de alguna integrante del sexo femenino. De las v�ctimas, cuatro de cada 10 son menores de 15 a�os.
Carmen Zamora, del municipio de Ecatepec, uno de los ocho m�s violentos del pa�s, ha sido parte de las marchas para defender sus derechos. La primera vez, fue en abril de este a�o, un mes despu�s de la detenci�n de su esposo, a quien desde 2007 hab�a denunciado por violaci�n. Hasta antes de que fuera encarcelado, una de las respuestas que obtuvo de un juez fue "�qu� le hiciste para que te tratara as�?".
Su agresor est� en prisi�n, pero vive con el miedo de que salga libre porque sabe que la represalia ser� bestial: "Si sale, me mata, y yo no quiero ser una estad�stica m�s", dice.
En el tema de la violencia de g�nero se unen dos elementos, el primero es un patr�n cultural que minimiza a la mujer, lo cual est� bien ilustrado por un dicho popular en Jalisco (Occidente), la tierra de los charros: "Un hombre siempre debe tener un caballo, una pistola, y una mujer; el caballo y la pistola, no se prestan".
El segundo es la guerra contra los c�rteles de la droga iniciada en 2006 por el entonces presidente, el derechista Felipe Calder�n Hinojosa y continuada por el actual mandatario, Enrique Pe�a Nieto, que marc�, a juicio de activistas, un antes y un despu�s en la historia de ataques contra las mujeres.
El narcotr�fico convirti� a las mujeres en una figura a la que cualquiera piensa que puede usar y desechar, torturar, matar, cortar en pedazos u obtener ganancias a cambio de prostituirlas en contra su voluntad.
Un problema que asusta
"Hemos encontrado expresiones de violencia mucho m�s graves, como los femicidios �asesinatos asociados a la violencia de g�nero-, pero la desaparici�n de ni�as y adolescentes y las redes de trata a las que est�n vinculados los c�rteles son los casos donde hemos detectado que se las llevan como regalo al jefe de plaza. Esos casos terminan en femicidios, como una muestra de desprecio por las mujeres, por su vida e integridad, al grado de desmembrarlas, ponerlas en botes de cemento e irlas a tirar a un basurero", explica Teresa Ulloa, directora regional de la Coalici�n contra el Tr�fico de Mujeres y Ni�as en Am�rica Latina y el Caribe (CATWLAC, por sus siglas en ingl�s).
Ulloa conoce todos los d�as nuevos casos de mujeres desaparecidas o abusadas en el continente, a�n as�, cuando se le consulta sobre lo que sucede en M�xico, responde: "Estoy muy impresionada".
Parte de esta responsabilidad la atribuye a los gobiernos de los estados que en la mayor�a de los casos se niegan a implementar la llamada "Alerta de G�nero", un mecanismo que obliga a implementar en un territorio determinado las acciones necesarias para garantizar el derecho de las mujeres a un vida libre de violencia, que para los gobernadores implica el tener que combatir la impunidad.
Un grave problema para la mujer, expresa, es que tiene que enfrentar la violencia tanto en el hogar como en la comunidad, lo cual qued� demostrado en mayo pasado, cuando ante el incremento de agresiones en el transporte p�blico y en las calles, el gobierno de la Ciudad de M�xico lanz� un programa para repartir silbatos para que las mujeres los usaran en caso de acoso sexual, campa�a que fue objeto de una serie de bromas de doble sentido y cr�tica.
10 de cada 1.000 reciben castigo
El "Diagn�stico Nacional de Atenci�n a V�ctimas de Violencia Sexual", presentado por la Comisi�n Ejecutiva de Atenci�n a V�ctimas (CEAV), el organismo gubernamental que atiende y apoya a quienes hayan sido v�ctimas de un delito federal o de una violaci�n a sus derechos humanos, report� que 60% de las agresiones suceden en el hogar de las v�ctimas, y de cada 1.000 delitos sexuales que se denuncian, s�lo se encarcela a 10 agresores (el 1 por ciento).
En la Ciudad de M�xico es donde fueron agredidas Yakiri Rubio, Andrea Noel y Gabriela Nava. La primera estuvo presa tres meses, acusada de asesinar a uno de sus agresores; la segunda fue v�ctima de un sujeto del que hasta ahora se desconoce su identidad, que en plena calle la someti� por la espalda, le baj� la ropa interior y la tiro al pavimento; y la tercera, fue abusada por un trabajador de la universidad en la que estudia, quien sin su consentimiento la grab� bajo su falda con un m�vil mientras viajaba parada en un bus y �l expon�a sus genitales.
Las tres lanzaron en abril la campa�a #NoTeCalles a trav�s de las redes sociales para invitar a denunciar casos de abuso, sin embargo, los casos contin�an.
La misma Gabriela, una estudiante de Comunicaci�n de 23 a�os, a�n enfrenta el miedo al transporte p�blico que aquel incidente le provoc�. Aunque ahora encuentra en la defensa de los derechos de la mujer una nueva pasi�n, no olvida los d�as oscuros en los que recibi� todo tipo de ataques en redes sociales por hacer viral el video en el que aparece su agresor.
"Recib� amenazas, mi vida cambio, a la fecha le huyo al transporte p�blico, los primeros meses fue un trauma irme en cami�n o sola; me daba p�nico lo que me pon�an en Facebook, porque eran cosas muy feas, sent�a como me ve�a la gente, sobre todo los hombres, como que me reconoc�an y me pon�an cara como de coraje", relata.
Entre el tipo de insultos que recibi� a trav�s de redes sociales eran recurrentes las palabras "puta", "zorra"� Otros mensajes le advert�an que ya la ten�an "identificada".
"Cambi� mi vida, era consciente porque el acoso no era nuevo para mi, y en general para todas porque todas recibimos los mal llamados piropos �palabras dulces que se dicen a las mujeres con un doble sentido-, miradas y palabras que incomodan, siempre hab�a padecido esto, pero a este grado no", recuerda.
Gabriela present� una denuncia por acoso ante las autoridades del Estado de M�xico, quienes en un inicio le dieron celeridad a su caso por la forma en la que se viraliz�. Se trataba de un empleado de intendencia de la escuela en la que estudia, la Facultad de Estudios Superiores (FES) Acatl�n, adscrita a la Universidad Nacional Aut�noma de M�xico (UNAM), una de las m�s importantes de Am�rica Latina.
Despu�s del incidente, el 28 de marzo, investig� al empleado y se enter� que hab�a hecho lo mismo a estudiantes de otras escuelas de la UNAM, donde sigui� trabajando por la menos 10 d�as m�s despu�s de los hechos hasta que renunci� y desapareci�.
La valent�a de Gabriela de exponerse en p�blico qued� truncada ante las autoridades judiciales, que, se�ala, el d�a que present� la denuncia la tuvieron declarando m�s de 10 horas, en citas posteriores m�s de cinco horas. Consigui� el domicilio de su agresor y lo entreg� a la Polic�a para que lo notificara, sin embargo, le dijeron que no lo hab�an localizado en esa direcci�n y el inter�s en su caso se fue perdiendo.
�Cu�ntas m�s?
A la convocatoria #NiUnaMenos se unieron mujeres de al menos cuatro de los 31 estados del pa�s (Jalisco, Guerrero, Michoac�n, Guanajuato) y la Ciudad de M�xico. Algunas marcharon y otras paralizaron labores a partir de las 13 horas del mi�rcoles, pero �ste es apenas un peque�o avance dentro de un pa�s donde todos los d�as asesinan o agreden a mujeres.
"Aqu� hay responsables y son quienes debieron tomar decisiones estrat�gicas, oportunas y contundentes, para garantizar el acceso de las mujeres a la seguridad, la salud y la justicia y como organizaciones de la sociedad civil lo hemos exigido, sin embargo, ha habido una respuesta insuficiente. La impunidad, los actos de corrupci�n el que hubiera vac�os en el marco jur�dico, que se han ido modificando a ra�z de los casos, ha facilitado que lleguemos hasta aqu�", expresa por su parte Aracely Gonz�lez, coordinadora de Equifon�a, una Asociaci�n Civil del estado de Veracruz (en la cuenca del Golfo de M�xico), que en 2009 ten�a el reporte de una mujer desaparecida, pero para septiembre de 2014 la cifra ya hab�a aumentado a 597.
En Veracruz apareci� hace dos semanas el cuerpo de G�nesis Deyanira Urrutia, una estudiante universitaria, partido en pedazos adentro de una bolsa, como una muestra de que en el pa�s ya no s�lo basta con asesinar o agredir a una mujer, una vez muerta, tampoco se respeta su cuerpo.
INFOBAE
http://www.infobae.com/america/america-latina/2016/10/22/mexico-el-pais-que-no-amaba-las-mujeres-1-643-agresiones-sexuales-por-dia/
