Por qué España tiene un huso horario que no le corresponde y hay un debate para cambiarlo
28/10/2016 - 11:16:13
BBC.- Era s�bado 16 de marzo de 1940 y en Espa�a, las once de la noche pasaron a ser las doce por orden del gobierno de facto del general Franco.
Aunque en ese momento probablemente nadie lo esperaba, la decisi�n marc� el inicio de un cambio en la historia del pa�s que est� todav�a rodeado de pol�mica.
Cuando lo anunci�, el gobierno afirm� que "oportunamente" avisar�a del restablecimiento de la hora "normal".
Con ello se refer�a al huso horario del meridiano de Greenwich (GMT, en invierno), el que corresponde a Espa�a por su geograf�a, ya que la mayor parte de la pen�nsula queda dentro la zona determinada por esta l�nea imaginaria adoptada como referencia para los husos horarios de todo el mundo.
Pero esto nunca sucedi� y 76 a�os despu�s esa anomal�a sigue marcando el d�a a d�a de los 46 millones de espa�oles.
Toda Espa�a (salvo las Islas Canarias, donde hay una hora menos) tiene la Hora Europea Central (la de Berl�n) en lugar de la Occidental (la de Londres), lo que implica una hora de adelanto con respecto al sol en invierno y dos en verano, como promedio.
En las zonas occidentales (como la regi�n de Galicia), hay lugares en que el sol se pone a las 22.00 de la noche en verano y en invierno no sale hasta las 9 de la ma�ana.
�Qu� pasar�a si el mundo entero tuviera la misma hora?
"La discrepancia entre la hora solar y la oficial puede llegar a ser de casi tres horas", le explica a BBC Mundo Pere Planesas, astr�nomo del Observatorio Astron�mico Nacional.
Con la hora de Berl�n
La decisi�n del gobierno de facto de Franco se public� en una orden que cita "la conveniencia de que el horario nacional marche de acuerdo con los de otros pa�ses europeos".
Una raz�n que se cita a veces es que Franco lo hizo como gesto hacia Hitler.
Por qu� es tan precisa la hora actual
Pero Planesas cree que el cambio se trat� de un "t�pico adelanto de la hora de verano", como afirma en su art�culo "La hora oficial en Espa�a y sus cambios", publicado en el Anuario del Observatorio Astron�mico de Madrid, en 2013.
Pero lleg� el oto�o... y la hora no se acomod� al horario anterior de invierno.
Y as� permaneci� hasta 1942, seg�n Planesas, cuando Espa�a reanud� el horario de verano, volviendo a adelantar el reloj una hora en esos meses (GMT+2).
Un a�o antes, Inglaterra hab�a adoptado tambi�n la hora alemana.
As� que la hora de Espa�a, Alemania, la Francia ocupada por los nazis, Reino Unido y Portugal se acompas�.
Al terminar la Segunda Guerra Mundial, sin embargo, Inglaterra volvi� a la hora GMT, mientras que Francia y Espa�a no lo hicieron.
Y as�, Espa�a se qued� con la hora de Berl�n.
De forma que Vigo, en Galicia, tiene la misma hora que Varsovia (Polonia), que est� a 3.200 kil�metros de distancia, pero una hora m�s que Oporto, a solo 150 kil�metros.
La situaci�n no es �nica de Espa�a: tambi�n Francia, Holanda B�lgica y Luxemburgo tendr�an que estar en el tiempo de Greenwich.
Esto tampoco es �nico en el resto del mundo. Argentina, por ejemplo, deber�a estar cuatro horas por debajo de GMT o UTC. Tras cambiar m�ltiples veces entre UTC-3 y UTC-2, ahora est� en UTC-3.
Geopol�tica
"En �pocas de carest�a econ�mica, es normal que se adelante la hora para retrasar el amanecer y aprovechar m�s las horas de luz", le dice a BBC Mundo Jos� Mar�a Mart�n-Olalla, profesor de F�sica en la Universidad de Sevilla y autor de numerosos art�culos sobre el tema.
De hecho, el gobierno republicano espa�ol ya lo hab�a hecho en 1938.
"Es una casualidad que en el caso de Espa�a, adelantar el reloj coincida con el horario de Berl�n. Reino Unido tambi�n adelant� la hora durante la guerra", asegura Mart�n-Olalla.
En realidad, la hora no es solo una convenci�n, sino que se ha modificado hist�ricamente seg�n diversas circunstancias pol�ticas y econ�micas.
La hora de verano en Espa�a, por ejemplo, no se volvi� a recuperar hasta el a�o 1974, al igual que en otros pa�ses europeos, como consecuencia de la crisis energ�tica iniciada por el embargo que empezaron los pa�ses exportadores de petr�leo.
Espa�a la reinstaur� en 1974, Francia en 1976 y Portugal en 1977.
Conciliaci�n laboral y familiar
D�cadas despu�s del cambio de huso horario, el debate sobre su conveniencia est� m�s candente que nunca y acad�micos, asociaciones y algunos partidos pol�ticos quieren retrasar el reloj una hora.
Entre ellos est� el presidente del gobierno en funciones, Mariano Rajoy (Partido Popular) quien cit� esta medida como parte de un paquete para racionalizar los horarios de los espa�oles.
La C�mara Alta (Senado) aprob� una resoluci�n en abril para pedir el gobierno que cambie la hora a la brit�nica.
El argumento es que de esta forma los espa�oles saldr�an antes de trabajar y tendr�an m�s tiempo para conciliar su vida personal, familiar y laboral.
"Nuestro horario se rige por el sol y comemos a la una de la tarde (hora solar), cenando a las ocho (que son las 9 en invierno y las 10 en verano seg�n la hora oficial), por lo que madrugamos demasiado y dormimos casi una hora menos de lo recomendado por la OMS", le dice a BBC Mundo Joseph Collin, miembro de la Comisi�n para la racionalizaci�n de horarios espa�oles.
La idea es que cambiar el huso horario ayudar�a tambi�n a impulsar una racionalizaci�n de los horarios.
"Lo primero que hay que poner en orden es nuestra sincronizaci�n con el sol, que marca nuestro ritmo circadiano", le dice a BBC Mundo Nuria Chinchilla, profesora de la Escuela de Negocios IESE y asesora del gobierno de Catalu�a sobre reforma horaria.
"Y luego podremos cambiar los horarios y comer a la una, como hacen nuestros vecinos europeos".
Otros argumentan, sin embargo, que se puede racionalizar los horarios sin necesidad de cambiar la hora.
De hecho, Francia tiene la misma hora de Espa�a pero unos horarios m�s parecidos a los del resto del continente.
"En Europa central y occidental los husos son estables desde la Segunda Guerra Mundial", afirma Mart�n-Olalla.
"Cambiando la hora no se cambia la duraci�n del d�a".
"Se podr�a adelantar la hora de llegada a la oficina, pero claro, esto no ser�a una medida popular".