Antiguos jarros contienen pistas sobre la fluctuación del campo magnético de la Tierra
20/02/2017 - 10:33:31
EMOL.- El campo magn�tico de la Tierra �que desv�a la da�ina radiaci�n espacial de la superficie� se ha estado debilitando, perdiendo cerca de 10% de su fuerza durante los �ltimos dos siglos, y la degradaci�n podr�a estar aceler�ndose durante los �ltimos a�os.
Esa debilidad llev� a especulaci�n sobre si el campo magn�tico podr�a estar cerca de desaparecer durante un proceso de inversi�n, cuando los polos norte y sur del planeta se dan vuelta, lo que podr�a tener consecuencias para la civilizaci�n y la vida. Pero geocient�ficos tienen poco conocimiento sobre lo que ha ocurrido con el campo magn�tico durante los �ltimos milenios. As�, el actual descenso podr�a ser un efecto de fluctuaciones comunes. Por esto, se volcaron a la cer�mica y los m�todos de registro de los antiguos bur�cratas.
En un estudio publicado esta semana en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, un equipo internacional de cient�ficos examin� 67 asas de jarros encontrados en excavaciones en Judah, un reino de la Edad de Hierro que cubr�a la regi�n alrededor de Jerusal�n, entre los siglos VIII y II AC. En estas asas, indican los cient�ficos, est�n los registros sobre c�mo el campo magn�tico aument� y disminuy� durante esos siglos. Las jarras conten�an l�quidos como vino o aceite de oliva. Las asas ten�an las marcas reales, parte del sistema de recolecci�n de impuestos. Estas marcas no incluyen una fecha espec�fica, pero los arque�logos �que han estudiado los artefactos por m�s de un siglo� saben c�mo estas marcas cambiaron a trav�s del tiempo. Esto permiti� fechar las jarras, con un margen de error de hasta 15 a�os en el peor de los casos (la investigaci�n es similar a que si los arque�logos del futuro estudien la tipograf�a de los formularios de impuestos actuales).
"Podemos usarlos miles de a�os despu�s para seguir los cambios con el tiempo", indic� Erez Ben-Yosef, arque�logo de la Universidad Tel Aviv de Israel. "Y despu�s usar las muestras de los jarros para reconstruir la intensidad del campo magn�tico". Las rocas volc�nicas registran la fuerza y direcci�n del campo magn�tico a medida que se enfr�an y endurecen. Pero los m�todos para fechar rocas son imprecisos, involucrando m�rgenes de error de miles de a�os. Como las rocas volc�nicas, las jarras de cer�mica registraron el campo magn�tico de la Tierra cuando fueron encendidas en hornos y luego enfriadas. En la Instituci�n Scripps de Oceanograf�a en La Jolla, California, peque�os trozos de estos artefactos fueron calentados y enfriados en un campo magn�tico para determinar la fuerza del campo cuando fueron construidos. Para los objetos m�s antiguos, de finales del siglo VIII AC, el campo era muy fuerte, 2,5 veces el actual, corroborando observaciones anteriores. Pero ese aumento se disip�, cayendo cerca de un tercio en menos de 30 a�os. Para el doctor Ben-Yosef, esto indica que la disminuci�n actual probablemente no es el presagio de un cambio total.
"Esto no es �nico y no deber�a ser considerado como tal", declar�. Sin embargo, los geof�sicos no pueden explicar c�mo se produjeron aumentos tan pronunciados, incluso limitados a una regi�n, para luego desaparecer tan r�pido. No se ha observado nada similar recientemente, al menos desde que Carl Friedrich Gauss, matem�tico y cient�fico alem�n, realiz� las primeras mediciones en la d�cada de 1830.
En 2013, cient�ficos que inclu�an a Philip W. Livermore, profesor de tierra y ambiente de la Universidad de Leeds en Inglaterra, trataron de crear lo que llam� un modelo de "tormenta perfecta" del n�cleo de la Tierra que pudiera recrear un aumento significativo de la fuerza del campo magn�tico. Sus modelos no fueron suficientes.
"Es simplemente muy dif�cil de explicar", asegur� el doctor Livermore. "Por el otro lado, si estos aumentos realmente existen, entonces tienen implicancias importantes sobre c�mo entendemos el interior de la Tierra".
