¿Qué significa hablar de ciudadanía digital? Este laboratorio busca respuestas
01/05/2017 - 11:13:06
EL ESPECTADOR.- La instituci�n busca fortalecer las comunidades y generar convivencia desde el aprendizaje y el uso de herramientas digitales con una variedad de disciplinas y perspectivas.
Taller de creaci�n en el distrito de Villaverde.Flickr - Medialab Prado
El Medialab-Prado naci� en 2000 en Madrid (Espa�a) como un punto de encuentro entre ciencia, tecnolog�a y arte: un lugar en el que se mezclan varias disciplinas para producir contenido y soluciones para una variedad de problemas. La instituci�n funciona bajo el paraguas del Ayuntamiento de Madrid.
Visto desde esta �ptica, el asunto suena algo utilitarista y, en justicia, el centro apunta a ser m�s que eso. Definirlo no resulta del todo sencillo, pues si bien es una instituci�n que se apoya fuertemente en la tecnolog�a, muchos de sus proyectos no son necesariamente digitales y algunos incluso son decididamente an�logos. Marcos Garc�a, director del laboratorio, lo pone de esta forma: �Nuestros proyectos buscan fortalecer la comunidad, crear convivencia desde lo colectivo�. Garc�a estuvo esta semana en Colombia.
Va un ejemplo: �En un distrito cerca de Madrid, los habitantes ten�an problemas para enterarse de qu� estaba pasando en sus barrios, cosas como actividades e informaci�n relevante. Un grupo pens� en la cosa m�s obvia y era tener una especie de tablero informativo. Suena tonto por lo evidente, pero esa idea dio paso a un sistema de pregoneros que, sin mayor tecnolog�a, resuelve una necesidad de la gente de forma eficiente�. Uno de los mensajes con mejor recordaci�n del proyecto es: �He aprobado las matem�ticas del trimestre�, de una ni�a de colegio. (Lea "Los peligros de pensar que la tecnolog�a hace milagros")
El Medialab es un laboratorio en el sentido m�s esencial de la palabra, pues all� se prueban desde proyectos de producci�n de composta local hasta sillas de ruedas que pueden desplegar su propia rampa para vencer los obst�culos de acceso para quien las usa. Intentar y experimentar son asuntos centrales en este lugar. �Lo que m�s nos interesa es juntar personas de diferentes campos, con distintos grados de especializaci�n, pero con ideas y proyectos que ayudamos a desarrollar ac� con la ayuda de expertos y mediadores. La idea, siempre, es darle un lugar central al usuario, al ciudadano�, dice Garc�a.
Esta visi�n inevitablemente ha derivado en que el laboratorio orbite alrededor del software y el hardware libres, pues en �ltimas son dos sectores de tecnolog�a estructurados alrededor de la colaboraci�n entre muchos actores. Garc�a cuenta que �en 2005 organizamos uno de los primeros talleres que existieron sobre Arduino. Tuvimos una gran respuesta. Luego, hicimos un evento que era algo como �trae tus cacharros viejos y hagamos algo con ellos�. Por estos d�as era el nacimiento de la web 2.0 y ten�amos la sensaci�n de que todo iba a ser en la red, pero acercarnos a este mundo del hardware, un poco lo que conocemos como cultura maker, nos pareci� importante y as� afianzamos la idea de incluir diferentes perspectivas y especialidades en nuestros proyectos�.
La inclusi�n del usuario tambi�n puede verse en proyectos como el Coder Dojo, una suerte de escuela de programaci�n para ni�os, pero que tambi�n requiere de la participaci�n de los padres. El formato es original de Irlanda, pero fue adaptado por el Medialab. Este hecho tiene un valor agregado, seg�n Garc�a: �Esta es una de las cosas que m�s nos interesan de los laboratorios ciudadanos: ofrecen la posibilidad de encontrar terrenos comunes, f�rmulas que puedan ser valiosas en muchos lugares�.
El mantra alrededor del usuario resulta particularmente interesante, pues puede solucionar varias problem�ticas transversales a cualquier uso o implementaci�n de tecnolog�a: educaci�n del p�blico en uso de herramientas, pero tambi�n una especie de apropiaci�n de los medios de producci�n. Se trata de responder a preguntas como �para qu� sirve la tecnolog�a?, �qu� hacemos con ella?, �qu� puedo hacer con una tableta, con un celular inteligente?
Si las respuestas de los Estados ante sus problemas involucran crecientemente el uso de tecnolog�a, la otra parte de la ecuaci�n es una especie de educaci�n popular sobre qu� son las herramientas y para qu� sirven. Garc�a no lo dice, pero los laboratorios ciudadanos pueden ayudar a solucionar el tema de la alfabetizaci�n digital.
