Reunión entre el Banco Mundial y el FMI: donde los pobres importan poco
25/05/2017 - 16:43:31
Juan Notaro
Presidente ejecutivo de Fonplata
Si estamos o no ante el fin del libre comercio tal como lo conocemos o si se abre una �poca de nacionalismo proteccionista o si Estados Unidos dejar� el acuerdo de Par�s sobre cambio clim�tico poniendo en riesgo la sostenibilidad del planeta y d�ndole as� un claro puntapi� a un trabajoso acuerdo multilateral son cuestiones que est�n sobre la mesa.
De hecho, estos fueron en realidad los temas centrales que demandaron la atenci�n de los participantes en las llamadas reuniones de Primavera del Banco Mundial y del Fondo Monetario Internacional, FMI, celebradas en Washington DC.
Sin embargo, poco se abord� sobre la situaci�n de las poblaciones m�s vulnerables, a las que debemos nuestros esfuerzos como bancos de desarrollo.
Es cierto que vamos hacia una econom�a mundial donde cada vez m�s aumenta el n�mero de pa�ses caracterizado como emergentes o de desarrollo medio, algunos con un ingreso per c�pita que los aleja paulatinamente de recibir asistencia internacional.
En efecto, en 1994, el 56,1% de la poblaci�n mundial, o sea 3100 millones de personas viv�a en 64 pa�ses caracterizados por ingresos bajos. En cambio, en 2014, esta cifra se redujo al 8,5% por ciento lo que equivale a 613 millones de personas.
Empero, detr�s de esta clasificaci�n y del progreso alcanzado, se esconde el hecho de que los pa�ses de esta caracter�stica albergan enormes extensiones con poblaciones marginales, vulnerables y una buena parte por debajo de los �ndices de pobreza.
En nuestro entorno cercano, pa�ses grandes, miembros de FONPLATA, como Brasil y Argentina, son un claro ejemplo donde la pobreza se concentra en zonas rurales o periurbanas, donde la actuaci�n de la banca de desarrollo es clave para que junto a recursos p�blicos y privados se haga viable potenciar las oportunidades de progreso para poblaciones tradicionalmente relegadas de la ecuaci�n de prosperidad.
Esa es la �nica f�rmula para poder alejarse de la llamada "trampa de los pa�ses de ingreso medio", en la que decenas de pa�ses que han mejorado sustancialmente su ingreso bruto por habitante, van siendo gradualmente marginados del acceso a cooperaci�n y financiamiento internacional para el desarrollo.
Si bien para nuestra regi�n ha sido un logro enorme haber crecido fuerte y sostenidamente hasta el 2015, consolidando adem�s una amplia participaci�n de la clase media en su econom�a, nos seguimos manteniendo como la regi�n con mayor desigualdad en el mundo.
Am�rica Latina es una regi�n donde la amplia mayor�a de pa�ses son considerados de ingreso medio o emergentes, pero donde a�n se mantienen importantes �reas con bolsones duros de pobreza y una inequidad general que no ha sido resuelta.
Con una expectativa de crecimiento de 1,1 % en 2017 y del 2% en 2018, la cooperaci�n y el financiamiento internacional son herramientas fundamentales para colaborar en las agendas de nuestros pa�ses y apoyar un desarrollo con prosperidad para la mayor�a de su poblaci�n.
As� las cosas, FONPLATA, que trabaja justamente con las poblaciones m�s vulnerables de las zonas locales y de frontera com�n entre sus pa�ses miembros -Brasil, Bolivia, Argentina, Paraguay y Uruguay- ha suscrito varios convenios con la banca multilateral para acercar los beneficios del desarrollo a la gente que m�s lo necesita.
En efecto, a lo ya firmado con CAF en 2016, hemos avanzado con el NDB, el banco de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sud�frica) en una alianza para potenciar el co-financiamiento de nuestras instituciones, inicialmente en Brasil, con expectativas de extenderlo a otros pa�ses de FONPLATA.
Por otro lado, con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) estamos trabajando en un programa conjunto de financiamiento a la integraci�n regional, con �nfasis en el desarrollo geo-referenciado del �rea de fronteras.
Esta nueva modalidad complementaria de trabajo, asociando instituciones con intereses comunes para pa�ses emergentes, fortalece la coordinaci�n y focalizaci�n de recursos financieros, favorece a los pa�ses de la subregi�n y principalmente apunta a un mayor impacto en reducir la brecha de oportunidades entre la gente.
