Una mujer con una enfermedad terminal deseaba algo, su deseo fue concedido
15/10/2017 - 10:19:27
Infobae.- Desde su cama en Arlington (Virginia), Emily Pomeranz se�al� cu�les eran sus dos �ltimas voluntades: un sombrero de los Indios de Cleveland y un batido de moca de un restaurante de Ohio.
Pomeranz, de 50 a�os, se estaba muriendo de un c�ncer de p�ncreas y un viejo amigo, Sam Klein, quer�a hacer realidad sus deseos.
Klein escribi� en un post en su cuenta de Facebook diciendo que se hab�a puesto en contacto con el restaurante Tommy de Cleveland para preguntarles sobre la opci�n de env�o de batidos a larga distancia.
"S�, encontraremos la manera de hacer esto", coment� el amigo citando al propietario del restaurante, Tommy Fello.
Al cabo de unos d�as, seg�n �l, el batido de moca hab�a recorrido 600 kil�metros y cruzado varios estados hasta llegar a la cama de Pomeranz.
"Fue una gran sorpresa. Estaba emocionada, lo compart�a con su familia y estuvo hablando de ello durante muchos d�as", coment� el hombre en su post.
"Ella comparti� la historia con sus amigos de Cleveland y de DC, lo que provoc� la sonrisa de sus seres queridos. Quer�a un �ltimo batido de su restaurante favorito. �Y el deseo fue concedido!", record� �l.
Ambos se hab�an mudado a Washington, donde Pomeranz, abogada de profesi�n, trabajaba para el Departamento de Asuntos de Veteranos. Klein, por su parte, supervisaba los cursos de ESL en un distrito escolar de Virginia.
El amigo relat� que la fue a visitar a finales de junio y le pregunt� si necesitaba alguna cosa.
Cuando mencion� el batido de Tommy, ambos empezaron a recordar su local favorito.
Fello abri� su establecimiento hom�nimo en 1972, a la edad de 18 a�os. Cuando recibi� el correo electr�nico de Klein, sab�a que ten�a que encontrar una manera para hacer posible la entrega del batido.
Llam� a UPS para averiguar lo que necesitaba hacer, luego congel� la bebida, la envas� y la mand� en un cami�n de la compa��a de env�o.
"Incluso habr�a ido hasta all� si lo hubiese tenido que hacer", declar� el due�o al The Washington Post.
El amigo explic� que, para sorpresa y deleite de Pomeranz, la bebida lleg� durante una ma�ana de junio sobre la hora del desayuno.
"Ella me llam� y me dijo si yo estaba detr�s de eso", record�.
Klein solo hab�a hecho la petici�n. Fello hab�a hecho el resto.
"Esta historia realmente trata sobre como una persona de buen coraz�n est� haciendo algo positivo por un extra�o", remarc�.
Cont� que ambos estuvieron un buen rato ri�ndose sobre como "ese restaurante de la infancia, ese lugar tan nost�lgico, le hab�a mandado un batido".
Y esa risa es el recuerdo que Klein guardar� en su memoria.
"Emily ten�a esa risa marcada", declar�.
Pomeranz muri� aproximadamente un mes despu�s, el 28 de julio. Su obituario dec�a que ser� recordada por "su risa, su sentimiento de admiraci�n, su persistencia ante la adversidad y su capacidad para conectarse con todos a su alrededor".
Klein envi� a Tommy una fotograf�a donde Pomeranz aparec�a sentada en su cama sosteniendo un batido de moca derretido, pero conservando el fr�o.
Cuando Fello vio "una sonrisa gigantesca en su rostro" se emocion�.
"Mi coraz�n lat�a fuera de mi pecho, estaba muy feliz", expres� al tiempo que esperaba que esa bebida le "trasladara a un momento reconfortante" de su etapa en su ciudad natal.
"Estoy muy contento de haber formado parte de eso", manifest�.
