México: la historia secreta de cómo Los Zetas convirtieron a Coahuila en un infierno
08/11/2017 - 15:03:41
BBC.- Reclutamiento forzado de adolescentes para convertirlos en sicarios. Pueblos arrasados por completo. Cientos de personas incineradas.
Es el camino que, durante al menos seis a�os, el cartel de narcotr�fico de Los Zetas sigui� para controlar la vida de cientos de miles de personas en Coahuila, en el noroeste de M�xico.
En tres juicios realizados en tribunales de Texas, Estados Unidos, exintegrantes de la organizaci�n revelaron detalles de masacres, sobornos a polic�as, alcaldes y funcionarios de dos gobiernos estatales.
Los Zetas, se�alaron los testigos, controlaron varias c�rceles del estado e incluso en una de ellas, la de Piedras Negras, incineraron a por lo menos 150 adversarios.
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Entre 2007 y 2013, en Coahuila hubo asesinatos atroces. Cientos de personas fueron despojadas de sus propiedades. Un n�mero desconocido de adolescentes fueron forzados a convertirse en sicarios y m�s de 1.600 personas desaparecieron.
El resultado: una de las peores �pocas de violencia de su historia. Las consecuencias a�n siguen vivas.
"Fue un infierno pero todav�a lo padecemos d�a a d�a, noche a noche", le dice a BBC Mundo Mar�a Elena Salazar, de la organizaci�n Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en Coahuila (FUUNDEC).
Hace ocho a�os desapareci� su hijo Hugo Marcelino Gonz�lez en Torre�n, la ciudad m�s pr�spera de Coahuila. Desde entonces no hay noticias de su paradero. Fue una de las v�ctimas de la invasi�n que Los Zetas emprend�an en el estado. "Mi hijo desapareci� justo en ese tiempo, durante esa ola de violencia", recuerda.
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La construcci�n del infierno en ese estado mexicano que revelan los testimonios en los tribunales texanas, se re�ne en el informe "Control�. Sobre Todo el Estado de Coahuila" presentado este lunes en Ciudad de M�xico.
Fue realizado por la Cl�nica de Derechos Humanos de la Facultad de Derecho de la Universidad de Texas, en colaboraci�n con el Centro Diocesano para los Derechos Humanos Fray Juan de Larios de Coahuila.
El documento analiza los juicios contra exintegrantes de Los Zetas en las cortes de Austin, San Antonio y Del R�o, Texas. Los procesos se realizaron entre 2013 y 2016. A los detenidos se les acus� de asesinato, conspiraci�n para importar drogas y armas, as� como de lavado de dinero.
Todos los acusados recibieron sentencia. Pero lo m�s valioso, dice el informe, es que los interrogatorios permitieron conocer la forma c�mo el cartel, uno de los m�s violentos de Am�rica Latina, estableci� un control casi total en varias regiones del estado.
Y un dato poco conocido: en los juicios surgieron datos sobre personas desaparecidas, algunas incluso desde hace varios a�os.
Es informaci�n que puede ayudar a resolver muchos casos, le dice a BBC Mundo Ariel Dulitzky, director de la Cl�nica de Derechos Humanos.
"El gobierno de Estados Unidos tiene informaci�n que deber�a compartir al gobierno mexicano y a organismos independientes de la sociedad civil", subraya. "Permitir�an esclarecer violaciones a derechos humanos", especialmente casos de personas desaparecidas.
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Polic�as c�mplices
El mayor control de Los Zetas se realiz� en municipios vecinos a la frontera con Estados Unidos. Y para conseguirlo, refieren los testigos en los juicios, compraron el apoyo de las polic�as municipales, del gobierno estatal y algunas del orden federal.
Un ejemplo del control territorial que consiguieron fue la cacer�a de un excolaborador identificado como "El Tuc�n", a quien acusaron de colaborar con la Secretar�a de Marina.
A mediados de 2012, se�ala el testigo Sa�l Fern�ndez en el juicio realizado en San Antonio, el cartel estableci� retenes en cada calle de Piedras Negras, y revisaron a todas las personas que entraban o sal�an de la ciudad.
Y todo en presencia de la polic�a local. Cuando se pregunt� Fern�ndez que hicieron los agentes, Fern�ndez respondi�: "Bueno, actuaban como que no estaba pasando nada".
Tambi�n establecieron una red privada de comunicaciones, con cientos de antenas retransmisoras en edificios, locales comerciales o en los cerros cercanos.
A los �nicos a quienes tem�a el cartel era a los marinos, se�ala el testimonio. Y para evadirlos los jefes del grupo utilizaban helic�pteros oficiales, asegura el testigo Rodrigo Uribe Tapia en el juicio de San Antonio.
Adem�s de la colaboraci�n polic�aca el grupo consigui� el apoyo de pol�ticos locales, e incluso a algunos les financiaron sus campa�as electorales.
A cambio de este apoyo Los Zetas obten�an protecci�n polic�aca, pero tambi�n contratos para obras p�blicas, no s�lo en municipios o el estado sino con empresas federales como Pemex o la Comisi�n Federal de Electricidad.
Algunos se asignaron a la empresa ADT Petroservicios encabezada por Francisco Colorado Cesa, "Pancho", quien fue sentenciado en uno de los juicios de Texas. Pero tambi�n crearon decenas de negocios, e incluso los testimonios refieren que controlaron centros comerciales enteros en Piedras Negras.
Esos lugares se utilizaron como casas de seguridad o sitios para intercambiar dinero, drogas y armas. Otro refugio para los miembros del cartel fueron las prisiones que en algunos casos, como la c�rcel de Piedras Negras, se utilizaron s�lo como dormitorios.
Po ejemplo, el testigo Uribe cuenta que, durante el d�a, miembros de Los Zetas que eran reclusos pod�an salir y entrar de la c�rcel sin problemas.
Hachas para asesinar
Pero adem�s de la colaboraci�n de autoridades, la manera m�s efectiva de controlar parte de Coahuila fue el terror. El caso m�s conocido fue el asesinato de 300 personas en el pueblo de Allende, entre marzo y abril de 2011. Muchas de las v�ctimas fueron incineradas en el lugar.
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Fue una serie de ataques en venganza porque algunos exintegrantes del cartel empezaron a colaborar con el gobierno de Estados Unidos. De la masacre nada se supo durante varios a�os, y a�n ahora no se conoce por completo lo que sucedi�.
"Muchas muertes. (Los Zetas) incluso comenzaron a matar a familiares en Allende, y Piedras Negras, y M�squiz y Sabinas. Tambi�n me quer�an matar a m�", declar� el testigo H�ctor Moreno.
La forma como asesinaban a sus v�ctimas era atroz, se�alan los testigos. A varios los desmembraron vivos con un hacha, el primer golpe en una de las rodillas.
Muchas veces las personas asesinadas eran inocentes. Eran sentenciadas a muerte por la simple sospecha de que colaboraban con los rivales o las autoridades.
Eso ocurri� con cuatro ni�os que vend�an peri�dicos en Piedras Negras. El responsable de la masacre fue Marciano Mill�n V�zquez, conocido como �Chano� y uno de los principales jefes del cartel en la regi�n.
Los restos de las v�ctimas generalmente eran incinerados o deshechos en �cido. Los Zetas llaman a este m�todo "cocinar".
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"Es muy triste, muy triste"
Los Zetas ya no mantienen un control total de Coahuila como el que se document� en los juicios en Texas. El cartel es uno de los m�s afectados por el combate de las autoridades. Pr�cticamente todos sus fundadores, exmilitares de �lite, murieron o est�n detenidos.
La organizaci�n solo tiene presencia en una parte de Tamaulipas, Coahuila, Veracruz y Tabasco. Antes controlaban el tr�fico de drogas, secuestros de migrantes y extorsi�n a empresarios en diez de los 32 estados de M�xico.
Pero la huella que dejaron en su cuartel general, la zona norte de Coahuila, no se borra. Sobre todo para las familias de personas desaparecidas.
"Es muy triste, muy triste y doloroso para nosotros", dice Salazar, "no se valen las respuestas que tenemos, lo que nosotros pedimos y exigimos es que busquen vidas. No son cosas, no son objetos. Son miles de vidas".
