Feminicidios en la Llajta, cifras, la realidad legal y la impunidad
23/11/2017 - 13:24:19
Opini�n.- Cochabamba sigue siendo el segundo departamento m�s violento hacia las mujeres en Bolivia. Han pasado cuatro a�os desde la puesta en vigencia de la Ley 348 �que garantiza una vida libre de violencia a las mujeres�, pero el esp�ritu de esta normativa no ha logrado plasmarse en pol�ticas de Estado, departamentales y municipales que frenen realmente los casos de maltrato y muertes que destruyen a familias y generaciones enteras.
En lo que va del a�o 2017, de acuerdo al registro hemerogr�fico de OPINI�N y a datos de la Fiscal�a Departamental, han ocurrido 22 feminicidios.
Otras dos muertes a�n son investigadas para detectar si se tratan de feminicidios. Uno de ellos es el de Martina Mamani, que fue hallada sin vida en Huay�a Coto el 1 de noviembre. Su pareja dijo que ella hab�a convulsionado mientras ten�an intimidad en el campo. La autopsia revel� que falleci� por una hemorragia cerebral, pero a�n se esperan resultados de Laboratorio para comprobar si la muerte sucedi� por el estallido de un aneurisma o por un golpe.
La otra muerte que a�n es investigada es la de Sabina Colque Garc�a, de 63 a�os, cuyos restos �seos (cr�neo, mand�bula y algunas extremidades) fueron encontrados el 20 de noviembre en la comunidad Rancho Nuevo de Santiv��ez. Cerca de sus huesos hallaron un comprobante del cobro de una Renta Dignidad en la cooperativa P�o X y un carnet del centro de Salud de Lacma.
El municipio que m�s feminicidios registra es Cercado, con ocho cr�menes. Le sigue Quillacollo, con cinco, Sacaba con tres, Chapare con tres, Ayopaya con uno, Epizana uno y el Valle Alto, uno.
En cuanto a las denuncias de violencia f�sica, psicol�gica, sexual y econ�mica contra las mujeres, la Fuerza Especial de Lucha Contra la Violencia (FELCV) recibi� un total 4.762 casos en la Llajta, entre el 1 de enero y el 31 de octubre de 2017.
REALIDAD LEGAL La encargada distrital del Consejo de la Magistratura en Cochabamba, Daniela Gonzales Encinas, revel� el s�bado, en una entrevista en la radio OPINI�N-San Rafael (FM 92.5), que del 1 de enero al 31 de octubre de 2017 el Tribunal Departamental admiti� 22 causas por feminicidio, lo que podr�a variar la cifra final, pues los 22 casos citados por la Fiscal�a incluyen los registrados en la primera quincena de noviembre.
De las 22 causas ingresadas este a�o, hasta octubre, cuatro ya tienen sentencia ejecutoriada, una est� en etapa de extinci�n de la acci�n, una fue rechazada, dos est�n en fase de control jurisdiccional, una con imputaci�n formal; dos en etapa preliminar, seis causas en la fase preparatoria de juicio y cinco causas que ya est�n listas para juicio oral en los tribunales de sentencia.
LOS CASOS DE 2016 La autoridad del Consejo de la Magistratura detall� que el a�o 2016 ingresaron 27 causas por feminicidio al Tribunal Departamental de Justicia. De ellas, una est� sobrese�da y dos ya fueron rechazadas.
De las 24 causas restantes, 12 ya obtuvieron sentencia, 5 causas ya est�n en etapa de acusaci�n, 4 en etapa preparatoria, 2 en etapa preliminar y una en etapa de juicio oral, en el Tribunal de Sentencia 7.
INSUFICIENTE Pese a que la Ley 348 declara la lucha contra la violencia una prioridad nacional que debe contar con infraestructura, recursos humanos y presupuesto suficiente. Sin embargo, en los hechos, esto no se cumple.
A�n existen varios municipios que no tienen FELCV y la que existe en Cercado (prestada), se est� cayendo de vieja. Las v�ctimas no pueden ser atendidas con calidez y reserva.
Los fiscales que atienden casos de violencia son muy pocos. Y los tres jueces est�n sobresaturados, porque adem�s de supervisar caso del delito m�s denunciado en Cochabamba, deben atender causas de corrupci�n p�blica. Un juez deber�a atender un m�ximo de 350 causas en el a�o, seg�n protocolos internacionales. Pero, los jueces de violencia en Cochabamba deben encarar hasta un 200 por ciento m�s, lo que se traduce en retardaci�n de justicia, pese a sus esfuerzos y horas extras de trabajo. A esto se suma la puesta en vigencia de una sentencia constitucional que abre el candado para que feminicidas condenados hasta en dos instancias puedan salir en libertad y darse a la fuga. La existencia de una sentencia condenatoria fue anulada como riesgo procesal y requisito para mantener la detenci�n preventiva de un feminicida. Esto ha causado alarma entre los colectivos que ya han denunciado un fomento a la impunidad de los criminales. Ante este panorama, las v�ctimas son las m�s perjudicadas y la garant�a de una vida libre de violencia, sigue siendo un discurso en Bolivia, para las activistas de Mujeres de Fuego y #NiUnaMenos.
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