¿Seré un adicto al sexo, o acaso todos en algún punto lo somos?
23/12/2017 - 11:26:30
Infobae.-Una noche del verano pasado, estaba tomando unos tragos con un viejo amigo que volvi� a mi vida despu�s de que comenzara a responder a mis historias de Instagram. Ten�a curiosidad por escuchar todos los detalles en torno a su reciente separaci�n, que parec�a un tanto desordenada por el aspecto de sus publicaciones en las redes sociales, ahora borradas.
Yo, todav�a estaba superando una ruptura menos seria, y al menos, pens� que podr�amos encontrar alivio "c�mico" en nuestro dolor de coraz�n compartido. Pero cuando nos encontramos, me sorprend� al descubrir que no ten�a el coraz�n roto en absoluto. De hecho, insisti�, nunca hab�a estado mejor.
�Cu�l fue su secreto? Le pregunt�. Sonri� a sabiendas, baj� los ojos y pronunci� cuatros letras: ASAA (Adictos al Sexo y al Amor An�nimos). Hab�a escuchado de Adictos al Sexo y al Amor An�nimos por parte de algunos amigos que lo hab�an recomendado alguna vez, cuando me lament� de un encuentro desafortunado. En el pasado, no hab�a estado tan segura de que lo necesitara. Pero cuando este amigo habl� sobre martinis, sonaba como un exclusivo club de Hollywood. �l me aseguraba que Los �ngeles est� lleno de adictos al sexo y al amor. �Era posible que yo tambi�n fuera una de esas?
Sac� su tel�fono y ley� las 12 caracter�sticas de la adicci�n al sexo y al amor, que iban desde el miedo al abandono hasta el miedo al compromiso. Estaba bastante seguro de que no ten�a ninguna de esas caracter�sticas, pero algunas me hicieron pensar. Claro que no me importar�a involucrarme sexualmente o emocionalmente a otras personas sin conocerlas pero �qu� no ten�an los 20 y tantos con un perfil de Tinder? �Qui�n de nosotros no se hab�a sentido a veces un tanto vac�o al estar solo?
A juzgar por algunas de las caracter�sticas, tambi�n podemos ser adictos al sexo y al amor. Muchos de ellos parec�an sugerir que todas las grandes canciones de amor, las cl�sicas comedias rom�nticas, las comedias sobre solteros en la ciudad, etc. nos estaban alimentando comportamientos obsesivos y poco saludables disfrazados de historias de amor, sin duda, escritas por adictos al sexo y al amor.
A�n as�, despu�s de que �l y yo dividimos el cheque, nos dimos un abrazo y nos despedimos, la comprensi�n de que hubiera acogido con satisfacci�n un final menos plat�nico de la noche finalmente me convenci� para asistir a una reuni�n de ASAA.
Varias semanas m�s tarde me encontr� sentada en una silla de metal en el s�tano de una iglesia con unas dos docenas de extra�os de diferentes edades y or�genes. Dimos la vuelta al c�rculo y nos presentamos. Algunos dijeron que eran adictos a la fantas�a y al romance; otros identificados como emocionalmente anor�xicos o privados de sus necesidades emocionales. En cada reuni�n, alguien comenzar�a con una an�cdota sobre su recuperaci�n y luego otros alzar�an la mano para hablar sobre los comportamientos con los que lucharon esa semana y aquellos de los que estaban orgullosos. El grupo desalienta el intercambio de detalles que sean expl�citamente sexuales o que puedan desencadenar en otros, por lo que los miembros, a menudo, usan t�rminos codificados como "comportamiento final" y "acting out", que significan cosas diferentes para diferentes personas.
Si esto suena familiar es porque el programa de 12 pasos fue fundado en 1976 por un miembro de su predecesor m�s famoso, Alcoh�licos An�nimos, y sigue muchos de los mismos principios para la recuperaci�n: admitir que tienes un problema, encontrar una ayuda y trabajar para superarlo. Pero a diferencia entre beber y no beber, la sobriedad para un adicto al sexo y al amor es un poco menos f�cil de definir. Para algunos, significa no usar aplicaciones de citas como Tinder o abstenerse de tener sexo fuera de una relaci�n; para otros, se trata de salir de una relaci�n t�xica.
El concepto de adicci�n sexual es controvertido. No es un diagn�stico cl�nico reconocido por la Asociaci�n Americana de Psiquiatr�a y desde hace un tiempo ha sido cuestionado por psic�logos como David Ley, autor del libro de 2014 The Myth of Sex Addiction, y neurocient�ficos como Nicole Prause, que en 2013 public� un estudio junto a la Universidad de California en Los �ngeles sobre las respuestas cerebrales a las im�genes sexuales que estaban vinculadas al deseo y no a la adicci�n. Pero eso no ha impedido que los grupos de apoyo a la adicci�n al sexo como ASAA obtengan seguidores en todo el mundo. Solo en Los �ngeles hay m�s de 60 reuniones semanales diferentes, incluidas dos en una c�rcel para hombres.
El perfil de la adicci�n al sexo se ha visto impulsado por la cultura pop, ya que el programa de televisi�n de Amazon Transparent y la serie de Netflix Love describieron recientemente estos grupos de apoyo. Y cuando Harvey Weinstein fue acusado de agresi�n sexual por un n�mero abrumador de mujeres, se report� que fue a la rehabilitaci�n por adicci�n al sexo, un movimiento que provoc� la ira y el escepticismo de la comunidad m�dica porque suger�a peligrosamente que la causa era la adicci�n al sexo.
