Narran acción de la Policía contra los universitarios
13/01/2018 - 08:42:57
El Pa�s.- Golpes, gritos, desmayos, sangre y choques el�ctricos. Eso ocurri� durante la violenta represi�n policial que se registr� la tarde del jueves cuando efectivos del orden irrumpieron en predios de la Iglesia de San Francisco para perseguir y someter a j�venes que protestaban contra el C�digo Penal y el Dakar.
El administrador del Museo de San Francisco, doctor Jos� Luis R�os, relat� en entrevista con ERBOL los pormenores de la acci�n policial que �l calific� como �tortura� contra los muchachos manifestantes.
Indic� que alrededor de las tres de la tarde, al interior de predios de la Iglesia se sinti� la fuerte gasificaci�n con que polic�as disiparon a la protesta. Turistas y el personal del Museo resultaron afectados y experimentaron malestares por la fuerte presencia de los qu�micos en ese ambiente.
Mientras se atend�a a los turistas, el administrador relat� que subi� a un piso superior donde hab�a alrededor de 30 personas refugiadas. Estaban mujeres de la tercera edad, vendedoras, j�venes y hasta ni�os que se desvanecieron con susto y el efecto de los gases.
Por otro lado -seg�n el testimonio- los polic�as golpearon la puerta del Museo para ingresar a los predios de la Iglesia. Al notar el exceso, R�os dijo que se interpuso entre los uniformados y los refugiados para evitar m�s abusos.
El doctor R�os se�al� que en los pasillos hab�a alrededor de 20 polic�as que estaban muy agresivos. Ellos y sus oficiales al mando se hab�an quitado sus marbetes y escond�an sus identidades.
Pidieron a los polic�as que se retiren de los predios de la Iglesia, pero ellos respondieron que en ese lugar es estaban montando bombas Molotov y dinamitas, lo cual a criterio del administrador era falso.
Ante la insistencia del administrador, sali� parte del contingente policial, pero se quedaron cuatro o cinco agentes que custodiaban a j�venes detenidos. Todo ocurr�a a puertas cerradas.
Entonces se escucharon golpes y gritos. R�os vio que los polic�as ten�an a lo muchachos boca abajo en el piso y enmanillados. Pidi� que se los levante y respete su dignidad.
Cuando se levantaron los muchachos, se observ� que uno de los j�venes estaba sangrando. Imploraron a los polic�as que dejen de golpearlos y prestaron atenci�n al manifestante con lo que ten�an a mano, que era un pa�uelo de papel desechable.
R�os relat� que tambi�n not� que un polic�a aplicaba choque el�ctricos a los j�venes de manera disimulada en la parte de la entrepierna. Se escuchaba el chirrido de la descarga el�ctrica y los j�venes gritaban de dolor. Seg�n el administrador, uno de los j�venes s quej� de que los polic�as hab�an golpeado con las culatas de las armas de gas. Los efectivos lo negaron, pero las heridas era evidentes.
Los polic�as reclamaron a los administradores del Museo por defender a lo que denominaron �delincuentes�.
