El perfil de Iván Duque, el joven y metódico presidente electo
18/06/2018 - 11:41:03
El Tiempo.- Es posible que sea una casualidad. El poder acompa�a a quienes vinieron al mundo en agosto. En este mes nacieron Ernesto Samper, Andr�s Pastrana, Juan Manuel Santos e Iv�n Duque M�rquez, y Barack Obama, en Estados Unidos. El signo Leo los cobija a todos.
Duque cumplir� 42 a�os el primero de agosto. A los seis d�as se posesionar� como el presidente n�mero 117 en la historia de Colombia. Es la c�spide de un ascenso vertiginoso jalonado por su dedicaci�n, preparaci�n y buena estrella.
Antes de cumplir 25 a�os de edad dej� el cargo de asistente de Santos en el Ministerio de Hacienda y le acept� el nombramiento de asesor en el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), en Washington. �Cuando lleg� a Estados Unidos me llam� muy entusiasmado�, recuerda Juan Fernando Londo�o, quien entonces trabajaba en la sede de la OEA.
Londo�o cuenta que lo hab�a conocido a�os atr�s, en el tradicional barrio Teusaquillo de la capital, cuando dirig�a las juventudes del Partido Liberal. �A�n estaba en el colegio, en el Rochester, pero se diferenciaba de los dem�s por su inter�s por la pol�tica, los problemas nacionales y su evidente pilera�.
Temas que abord� en profundidad en Washington, un escenario ideal para especializarse en pol�tica p�blica. Adem�s de la Casa Blanca all� est�n, entre otras, las sedes del FMI y el Banco Mundial. �Muchos llegan all�, trabajan y se devuelven �comenta Londo�o�. �l se qued� m�s de una d�cada, se prepar� acad�micamente y le sac� el m�ximo provecho intelectual a una ciudad que respira pol�tica en cada esquina�.
Precisamente, en los albores de un oto�o, caminaba por Georgetown University con su amiga Gloria Isabel Ram�rez cuando vio en una vitrina un libro de Obama, entonces novato aspirante a hablar en la convenci�n del partido dem�crata. Entr� al local, compr� un ejemplar y se lo regal�.
��Por qu�? �le pregunt� su hoy asesora de comunicaciones.
�Hay que saber todo de �l. Va a ser el pr�ximo presidente de Estados Unidos.
A ella no le pareci� una premonici�n sino un juicio de un hombre que devora todo lo relacionado con �marketing� pol�tico, estrategias electorales y discursos de los presidentes.
Esa preparaci�n intelectual fue un valor a�adido para el aprecio que le ten�a �lvaro Uribe V�lez. �Uribe lo fich� muy precoz�, dice una fuente que los conoce a ambos. En 2011 trabajaron hombro a hombro cuando el exmandatario viaj� a Nueva York para ser parte de un panel de investigaci�n de las Naciones Unidas que buscaba establecer lo sucedido en una acci�n que involucr� a comandos israel�es contra la llamada Flotilla de la Libertad, cuyo saldo fueron varios muertos y que provoc� una crisis diplom�tica con Turqu�a.
A pesar de las fiestas, Duque era met�dico y siempre sacaba tiempo para leer.
Uribe en el camino
A Uribe le encant� el juicio del joven a quien conoc�a desde peque�o, pues era amigo personal de su padre, el exgobernador de Antioquia y exministro de Estado Iv�n Duque Escobar. A finales de 2013 le ofreci� un puesto en la lista del Centro Democr�tico (CD) que debutar�a en las elecciones de marzo del a�o siguiente.
Dej� atr�s la pl�cida vida en Washington, renunci� al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), donde estuvo doce a�os (2001-2013), primero como consejero principal de la Direcci�n Ejecutiva para Colombia, Per� y Ecuador y, luego, como jefe de la divisi�n de Cultura, Creatividad y Solidaridad, y volvi� a Colombia.
Para Duque, hasta ese instante un desconocido en el pa�s, resultaba dif�cil salir electo en solitario. Uribe, sin embargo, hizo una lista cerrada y lo ubic� en una posici�n de privilegio, por lo que en la pr�ctica retornaba en condici�n de senador.
La fortuna volvi� a sonre�rle cuando al rifar los puestos de la bancada del CD se gan� el pupitre al lado de Uribe. Cualquier c�mara que enfocara al l�der natural de esta colectividad inevitablemente captaba el rostro de Duque.
��l es muy buena persona, y la gente que es as� atrae siempre buenas cosas�, dice su amiga Mar�a Paula Correa, quien ha compartido con �l una amistad de 10 a�os y estuvo a su lado durante la campa�a que acaba de concluir como su secretaria privada. Cuando sortearon el sitio en el tarjet�n de la consulta interpartidista de la derecha entre Martha Luc�a Ram�rez y Alejandro Ord��ez, �l sac� el n�mero 1 con la balota naranja, lo que facilit� la publicidad en otra etapa en la que sali� victorioso.
Londo�o, quien fue uno de los asesores del equipo de Santos que negoci� la paz en La Habana con las Farc y, luego, uno de los impulsores de la campa�a del S�, tambi�n habla de las virtudes de Duque. �Es como si desde ni�o se hubiera dedicado a cultivarlas: buena gente, aplomado, respetuoso, trabajador,divertido, simp�tico�.
�Y muy preparado�, a�ade Francisco Barbosa, uno de los mejores amigos de Duque. Se conocieron en las aulas de la Universidad Sergio Arboleda, donde estudiaron derecho. Eran compa�eros asiduos de rumba en Caf� y Libro, Maderos y Los Versos del Capit�n, los locales que marcaban la bohemia nocturna de la ciudad por la �poca.
Siempre le ha gustado la m�sica. Por eso, Duque sonr�e al recordar los conciertos de verano, en Estados Unidos, que tanto disfrutaba con la m�sica de Led Zeppelin, Dire Straits, Metallica, Iron Maiden y Megadeth, bandas que tienen canciones que son verdaderos himnos contra el establecimiento.
Leer es la clave
No es un rasgo nuevo. De hecho, antes de zambullirse en la pol�tica, su sue�o era ser cantante de rock, tal como lo hab�a hecho en su adolescencia, cuando en el colegio fue vocalista de un grupo que conform� con sus amigos, al que bautizaron Pig Nose.
�A pesar de las fiestas, Duque era met�dico y siempre sacaba tiempo para leer. Ejemplares que compraba en compa��a de su padre�, relata Barbosa. El plan sabatino con �l era irse a las librer�as Merl�n y Temel, en el centro de Bogot�, para perderse entre los laberintos de cl�sicos, novedades y usados.
Sin duda, su padre ha sido la persona m�s influyente en su vida. No solo por haberle inculcado el amor por el trabajo sino que le hered� una biblioteca de 17.000 vol�menes que �l cuida como un tesoro. Por eso ley� la obra completa de su autor favorito, Mario Vargas Llosa. De ah�, la emoci�n cuando el premio nobel peruano no solo vino a conocerlo sino a manifestarle su apoyo. �Fue un placer intelectual verlos conversar sobre los personajes de ficci�n del novelista�, a�ade Correa.
Una imagen diametralmente opuesta fue la que vivi� Duque el jueves 2 de noviembre de 1995 junto a Barbosa. Los dos se hab�an encontrado con su profesor �lvaro G�mez Hurtado, el eterno aspirante a la presidencia, a la entrada de la Sergio Arboleda. El dirigente conservador se despidi� de ellos, camin� 60 metros. A las 10:30 de la ma�ana sonaron los disparos que segaron su vida. �Lloramos como ni�os�, dice Barbosa. Tiempo despu�s, Duque reemplaz� a G�mez Hurtado en la c�tedra que dictaba.
Eran tiempos en los que los dos j�venes se iban al Congreso de la Rep�blica para tomar nota de las sesiones sacudidas por el llamado proceso 8.000 que investigaba el ingreso de dinero del cartel de Cali a la campa�a de Samper Pizano. �Ese cap�tulo marc� a Iv�n porque vio c�mo el narcotr�fico destruye nuestra sociedad�.
A este recinto volver�a en esta �poca como senador en donde brill�. Sus propios colegas durante dos ocasiones consecutivas lo votaron como el mejor congresista. Los periodistas que cubren cotidianamente la actividad legislativa le valoran tambi�n su don de gentes y su disciplina. �Es una hormiguita trabajando�, testimonia uno de ellos.
La mitad de los proyectos que sac� adelante el Centro Democr�tico son de su autor�a. Cuando anunci� el retiro de su curul para irse en b�squeda de la presidencia, una mayor�a, entre aliados y opositores, se levant� a aplaudirlo en se�al de agradecimiento por su entrega, respeto y buena gesti�n. �Si una lecci�n dej� aqu� es su capacidad para tender puentes�, cuentan en el Congreso.
La familia, primero
A su actividad pol�tica se consagra tanto como a su familia. Su esposa es la abogada de la Universidad Javeriana Mar�a Juliana Ruiz, Maju para sus amigos, quien lo conoci� cuando ella ten�a 15 a�os. Un d�a, ella esperaba el bus en el paradero. �l aprovech� la circunstancia y se le present�. Hablaron por primera vez sobre libros y m�sica. Luego empez� a invitarla a sus conciertos cuando �l cantaba con chaqueta de cuero, cremallera y el pelo un tanto alborotado.
Forman una pareja feliz que se escapa con frecuencia a rumbear. �A m� me fascina bailar�, dice ella. �Y a �l, la m�sica�. Se complementan. Hoy tienen tres hijos: Luciana (11), Mat�as (7) y Elo�sa (6). Precisamente durante esta campa�a, �l interrumpi� su agenda en dos ocasiones para ir a la entrega de notas de sus ni�os. Ella es reservada, cautelosa. Al describirlo dice: �La gente puede estar tranquila porque Iv�n es lo que ven: un hombre transparente�.
Yo no quiero ministros chispita mariposas, que enciendan mucho un instante y luego no duran nada
�C�mo ser� un gobierno de Duque? �l responde: �Mi intenci�n es nombrar un gabinete de gente joven, ojal� todos menores de 45 a�os, y en el que est�n m�s mujeres que hombres�. �Ser� un experimento? �Para nada. Quiero gente preparada, muy t�cnica, a mi lado. Yo no quiero ministros chispita mariposas, que enciendan mucho un instante y luego no duran nada. Yo los quiero para todo mi mandato�.
El nuevo presidente electo promete actuar como lo ha hecho hasta ahora: �De manera honesta, trabajando duro y buscando siempre lo mejor para mi pa�s�.
En el ambiente, sin embargo, gravita el nombre de Uribe, el dirigente pol�tico m�s influyente de las dos �ltimas d�cadas en el pa�s. �Cu�l ser� su papel? �Yo voy a ser el presidente de Colombia�, responde con tono vehemente pero respetuoso.
Tambi�n sale al quite de la sombra de personas que lo rodean y tienen posturas pol�micas. Por ejemplo, la visi�n sobre las parejas del mismo sexo de Vivian Morales o de la religi�n de Alejandro Ord��ez. �Nada de los derechos ganados hasta ahora por la comunidad LGTBI se echar�n para atr�s. Nada�, insiste.
Y, aunque ama los libros �ha escrito seis� y conoce el valor de la Biblia al afirmar ser cat�lico, sentencia: �Yo voy a gobernar con la Constituci�n�.
La campa�a qued� atr�s. Ahora es el presidente electo. Un hombre que pertenece a un grupo pol�tico de derecha en el que �l es la cara de la renovaci�n. Tiene un m�ster en Derecho Econ�mico en American University, otro en Gerencia de Pol�ticas P�blicas en Georgetown University, adem�s de encantarle el cine, la literatura, las innovaciones de la tecnolog�a y exhibir siempre un muy buen humor. �Yo miro es al futuro�, asegura.
La nueva familia que llega a la Casa de Nari�o
Vuelven la risa y la alegr�a infantil a la Casa de Nari�o. Los peque�os Luciana (11 a�os de edad), Mat�as (7) y Elo�sa (6) ser�n los primeros ni�os en vivir en el palacio presidencial en este siglo. Ellos, m�s all� de la pol�tica, son la raz�n de la existencia de sus padres, Iv�n Duque M�rquez y Mar�a Juliana Ruiz.
La nueva primera dama tiene una alta formaci�n intelectual. Estudi� Derecho en la Universidad Javeriana e hizo una maestr�a en leyes con �nfasis en negocios internacionales en American University. Tambi�n adelant� estudios en Johns Hopkins University y el Institut Catholique de Par�s.
Estuvo laborando en la OEA, en Washington, y ahora trabaja como secretaria general de una cl�nica de Bogot�.
Cada ma�ana se levanta a las 4:30 a.m. a meditar. Una hora despu�s empieza la carrera de la pareja para levantar a sus ni�os y prepararlos para enviarlos al colegio. Durante la campa�a, era un tiempo que val�a su peso en oro. Luego ambos sal�an para sus respectivos quehaceres. Pero siempre estaban conectados. Duque, por ejemplo, aplaz� varias reuniones de la carrera a la presidencia para ir a conversar con los profesores sobre la marcha de los peque�os.
�Somos bastante hogare�os, nos gustan los planes de casa y de finca: chimenea, m�sica, pel�culas y libros. Cocinar en familia es una terapia y nos entretiene cantidades. El mejor plan en familia es un viaje, ya sea planeado, como le gusta a Iv�n, o improvisado, como me gusta a m�, ha dicho ella.
Ahora en su nuevo rol, ellos son conscientes de los cambios tan bruscos que les esperan, pero prometen que har�n un esfuerzo por darles el mejor ejemplo a los dem�s colombianos.
