Dos paralíticos vuelven a caminar tras cirugías
20/06/2018 - 08:15:13
Opini�n.- Amalia Quispe Huanca est� sentada al borde de una cama del hospital Viedma a donde lleg� paral�tica y en silla de ruedas, hace tres meses. Tras ese tiempo est� lista para irse a casa. Lo har� caminando.
Amalia sufri� de una enpondilitis tuberculosa que destruy� una de sus v�rtebras y la mantuvo inm�vil por casi tres a�os. Un equipo m�dico del hospital Viedma reemplaz� esa v�rtebra podrida por otra de platino.
Se trata de una de las dos cirug�as que se ejecut� en el hospital p�blico. Ambas fueron desarrolladas por el neurocirujano Gonzalo Gemio, acompa�ado por un equipo de especialistas. El primer caso, corresponde a Iv�n Quispe, un joven de 28 a�os que estaba postrado en una silla de ruedas por los mismos motivos que Amalia.
PRIMER CASO Gemio muestra solvencia profesional al hablar. Se refiere al diagn�stico, a los riesgos, a la intervenci�n quir�rgica y a las esperanzas que tiene para ayudar a m�s personas, a partir de los casos se�alados. Recomienda que la gente busque ayuda con rapidez y no deje mucho tiempo inm�viles sus miembros.
Recuerda la primera experiencia de cirug�a de reemplazo de v�rtebra en el Viedma. Lleg� hasta �l Iv�n Quispe. un joven que hab�a dejado de caminar.
Explica que existen diversas enfermedades que lesionan la columna vertebral y entre las m�s serias est� la espondilitis tuberculosa, una infecci�n causada por una microbacteria tuberculosa que es un microorganismo que destruye esa resistencia de la v�rtebra. �Se forma como cualquier micro organismo a causa de una herida. Se produce un absceso vertebral que causa dolor y la persona va encorv�ndose. En la espalda aparece una giba. Se va comprimiendo la m�dula. La persona deja de mover los pies y se orina porque hay alteraci�n en el esfinter�.
Las caracter�sticas se ven cuando el caso es severo. Aparece la joroba, falta movilidad en los miembros y hay mucho dolor. La radiograf�a muestra que no hay un cuerpo vertebral porque se ha destrozado. La cirug�a pasa por liberar la m�dula de la v�rtebra da�ada, colocar tornillos, como si fueran andamios de soporte, y reemplazar la v�rtebra afectada por otra de platino.
�Iv�n Quispe estaba paral�tico, no caminaba. En medicina, a veces parece ser un milagro. Los estudios dec�an que ten�a mucho tiempo sin caminar. Adem�s, no es f�cil conseguir m�s de cinco mil d�lares que cuestan los equipos de reemplazo�.
Iv�n, al d�a siguiente de la operaci�n, empez� moviendo el dedo gordo del pie. �Es una historia larga de contar�, dice Iv�n a OPINI�N, por tel�fono.
SEGUNDO CASO Amalia lleg� hasta Gemio por recomendaci�n de una persona que conoci� el caso de Iv�n. Est� p�lida a�n. Cuenta que hace 13 a�os se cay� de una balsa, en La Paz, en la provincia Omasuyos y cree que empez� a decaer. El dolor en la espalda la consumi� poco a poco hasta dejarla en silla de ruedas.
Se intern� el 7 de abril. Tuvo dos cirug�as. Sali� el 18 de junio. Lo hizo a�n adolorida, pero muy contenta. �Doy gracias a Dios y al doctor Gemio. Hice muchos sacrificios por mis hijos. He vivido un infierno por tres a�os, pero estoy bien�, llora.
