Mi�rcoles 24 de abril 2024 Contacto

El infierno que viven las niñas esclavas sexuales de la pandilla MS en El Salvador




26/06/2018 - 12:30:36

EL Salvador.com.- Esta es la l�gubre narraci�n del infierno en que viven muchas ni�as de 12, 13 o 14 a�os, quienes tuvieron la maldici�n de que a un pandillero de la clica Saylor Locos Salvatruchas, que forma parte de la MS, se le antojase hacerlas su mujer. Esta es la realidad que sucede en tres municipios del departamento de San Miguel.

�Ella era una de las mujeres del Thunder. Lo que sabemos es que desde cuando ten�a 13 a�os, fue obligada por ese pandillero a que tuviera relaciones sexuales; la amenaz�, pues�, dijo una polic�a a quien casualmente se le pregunt� sobre el posible m�vil del feminicidio contra una adolescente cometido en los primeros cuatro meses de este a�o en uno de los tres municipios de San Miguel, a los que el pasado 14 de abril, el fiscal general de la Rep�blica, Douglas Mel�ndez, dijo que formaban �el tri�ngulo de la delincuencia�.

El funcionario se refer�a as� a los municipios de Moncagua, Chapeltique y Lolotique, cuya posici�n geogr�fica dibuja un tri�ngulo en el mapa de El Salvador. Los tres son municipios eminentemente rurales; en conjunto, su poblaci�n es de 50 mil habitantes.

En esa triada territorial, la pandilla Saylor Locos Salvatruchos (SLS), de la Mara Salvatrucha (MS-13) tiene un dominio casi absoluto; es decir, que casi no hay pandillas rivales y, por consiguiente, el control territorial que ejercen es fuerte, tan fuerte que ha obligado al Gobierno del FMLN a implementar el Plan 10, que no es m�s que desplazar de manera permanente a dos o tres grupos de soldados y polic�as en los cantones con m�s incidencia delincuencial.

Fue sacada de su casa donde dorm�a con sus padres y hermanos. A pocas cuadras la ejecutaron con un disparo en la frente.

Movido por la incredulidad de lo que la agente policial dec�a sobre una ni�a que hab�a sido esclavizada sexualmente, a quien llamaremos Rosita Uno, a sus escasos 13 a�os por un pandillero con un amplio r�cord criminal, se busc� corroborar la versi�n de la Polic�a.

El que busca encuentra, reza un refr�n. Y la respuesta que se hall� fue estremecedora e inquietante porque demuestra hasta qu� punto el Estado salvadore�o ha permitido que las pandillas controlen, en muchos lugares, m�ltiples aspectos de la vida de las personas: sexual, econ�mico, sentimental, laboral, acad�mico�

�Vaya, hoy le voy a contar la mera verdad yo. Es cierto, a mi ni�a, a los 13 a�os ese maldito comenz� a violarla. Le dijo que si no se hac�a su mujer, la iba a matar a ella y a todos nosotros�, dijo la abuela de la adolescente asesinada en los primeros cuatro meses de 2018 en uno de los tres municipios del �tri�ngulo de la delincuencia�.

Para protecci�n de las v�ctimas y sus familias, as� como por impedimento legal, en este reportaje no se mencionar�n los nombres de las menores ni se har� relaci�n directa de la identidad de sus familiares, tampoco el nombre del cant�n, caser�o o colonia donde ellas viven o fueron asesinadas.

La abuela de Rosita Uno se hab�a guardado celosamente el porqu� su nieta se hab�a vinculado sentimentalmente con el cabecilla de la SLS. Todo mundo en el cant�n y m�s all� de los confines del mismo sab�a de que Rosita Uno era una de las mujeres del Thunder; muchos no entend�an por qu� aquella ni�a de aspecto agradable, tez blanca, alta, delgada, y de ojos marr�n se hab�a enredado maritalmente con aquel criminal; no lo entend�an porque no sab�an que hab�a de por medio una amenaza y por eso las cr�ticas eran abundantes y mordaces.

Al decir �maldito�, la abuela de Rosita Uno se refer�a a Luis Alberto Aguirre Castillo, al�as Thunder, un pandillero de 23 a�os de edad. El Thunder fue capturado a principios de agosto de 2017, en San Miguel. La Polic�a dijo que se hab�a enfrentado a balazos con ellos y como resultado, un pandillero fue abatido y el Thunder y dos m�s fueron arrestados.

Horas despu�s de ser capturado, varios polic�as dijeron en sus cuentas en redes sociales, que era un gran criminal: que hab�a participado directamente en el asesinato de polic�as en San Miguel y que hab�a violado a muchas ni�as. Pero solo lo dijeron m�s no presentaron ninguna prueba.

Su identidad ha sido resguardada con el seud�nimo de �Elena�. Por un a�o, entre 2014 y 2015, la joven fue esclava sexual de una clica de la MS en Santa Ana. En ese mismo per�odo, 2,117 casos de violencia contra mujeres fueron procesados en todo el pa�s por la PNC.

Pero pobladores de Chapeltique, Moncagua y Lolotique saben que aquel rumor esparcido por algunos polic�as no es falso. Es tan cierto que se puede comprobar visitando casas donde viven esas ni�as que el Thunder esclaviz�; la mayor�a de ellas a los 13 a�os.

El caso de violaci�n, de sometimiento sexual de Rosita Uno es solo un caso. Los mismos parientes de la adolescente aseguran que ella era solo una de varias ni�as que el criminal hab�a violado.

De hecho, aseguran que (se omite el nombre del cant�n y la fecha cuando dio a luz), a finales de 2016, una ni�a a quien llamaremos Rosita Dos, que tambi�n hab�a esclavizado sexualmente (violaci�n, en t�rminos legales) dio a luz a un hijo del Thunder. Cuando la embaraz� apenas ten�a 14 a�os.

Rosita Dos es tambi�n solo una de las 180 ni�as que entre enero de 2016 y diciembre de 2017, se convirtieron en madres. Varias de esas adolescentes s�lo ten�an 14 a�os cuando parieron, lo cual indica que fueron embarazadas a los 13 a�os.

Pero en los municipios del �tri�ngulo de la delincuencia� no solo el Thunder era el violador de ni�as. Tambi�n se�alan a El Chiqui, alias de Luis Anatanael Sandoval Trejo, quien era el segundo cabecilla de la SLS en Chapeltique y Moncagua, y a El Callado, en Lolotique. Callado es el al�as de Nelson Guadalupe Garc�a Guevara, m�ximo cabecilla de la SLS en Lolotique, quien tiene varias �rdenes de captura por homicidio y que ha sido se�alado como sospechoso de asesinar al sacerdote W�lter Osmir V�squez, cometido a finales de abril de este a�o.

Tanto en Moncagua como en Chapeltique no es un secreto que en diciembre del 2014, El Chiqui priv� de libertad a una ni�a de 13 a�os en el cant�n Tangolona, que tiene varios caser�os, todos dominados por la MS-13. Y los polic�as de ambos municipios lo saben.

El Chiqui lleg� en la noche de Navidad
Simplemente aquel 24 de diciembre, mientras muchas familias celebraban felices la Nochebuena, el Chiqui lleg� a la vivienda de la ni�a y dijo a los padres que se la llevar�a y que no deb�an decir nada.

Por mucho tiempo, la familia de la ni�a no supo nada de ella pero continuaron viviendo en el lugar.

Aproximadamente dos a�os despu�s, la ni�a volvi� a su casa, pero iba embarazada, a punto de dar a luz.

Al final, de acuerdo con fuentes policiales de Moncagua, la familia abandon� su vivienda y posteriormente sali� de El Salvador con la ayuda de una organizaci�n, lograron conseguir refugio en otro pa�s. La Polic�a sabe todo eso.

Huy� toda la familia, por temor a que El Chiqui cumpliera sus amenazas. Hoy, cerca de donde ocurri� esa tragedia familiar, han colocado un Grupo Conjunto de Apoyo a la Comunidad (GCAC), conformado por un polic�a y tres soldados.

La tragedia de esa familia es conocida de todos los habitantes de cualquier caser�o del cant�n Tangolona. Pero el de la ni�a que fue sacada de su casa en Navidad no es un caso aislado. En ese cant�n hay varias j�venes que a sus 14 o 17 a�os, alternan sus deberes de madre con las tareas escolares. Varias estudian bachillerato a distancia y solamente asisten a clases el fin de semana.

Si algunos polic�as encargados de dar seguridad al municipio de Moncagua se limitan a mencionar nombres de algunas menores que tengan hijos del Thunder o del Chiqui y a dar indicaciones del lugar donde viven, polic�as del municipio de Chapeltique se atreven a decir que de todas las menores de edad que est�n criando en ese municipio, posiblemente un 70 por ciento de esas cr�as, son de pandilleros.

Pero no solo los polic�as. Una persona vinculada a la alcald�a municipal de esos tres municipios, que pidi� no mencionar su nombre, asegur� que del total de menores cuyos hijos fueron inscritos entre 2016 y 2017 en el registro familiar, posiblemente el 60 por ciento de ellas fueron embarazadas por miembros de pandillas.

Los polic�as que patrullan los municipios de Moncagua, Chapeltique y Lolotique conocen los casos por la naturaleza de su trabajo. Estos est�n al d�a con los datos de qui�nes son las �nuevas novias� de los pandilleros, qui�nes est�n embarazadas de esos sujetos y quienes est�n criando hijos de esos mismos delincuentes.

Una trabajadora social, que ayud� a una v�ctima a denunciar el maltrato que sufr�a por un pandillero en su hogar, fue amenazada de muerte por pandilleros al sur de San Salvador.

En los pueblos del interior, por su tama�o territorial y poca poblaci�n, se conocen entre vecinos. Tal vez sea por eso que a nivel de empleados municipales, tambi�n se sabe qu� ni�a ha salido embarazada o ya tuvo el hijo� Y que el padre de �ste es un pandillero que, en muchos casos, est� preso, anda huyendo o simplemente no se volvi� a saber de �l.

Pero hay un dato muy concreto, uno irrefutable, que se convierte en un fuerte indicio de que muchas ni�as fueron embarazadas por pandilleros. En conjunto, en Moncagua, Lolotique y Chapeltique, entre 2016 y 2017, 43 menores de edad tuvieron que ir ellas mismas, solas, a inscribir a sus hijos al registro familiar.

En algunos casos lo hizo la madre, la abuela o el padre de la menor.

La cifra podr�a ser mayor si se toma en cuenta otras dos variables. La primera es que para evitar problemas legales, algunas adolescentes esperan a cumplir los 18 a�os para ir a inscribir a sus hijos. La segunda es que la cantidad de mujeres j�venes que dieron a luz a los 18 a�os, es considerable.

La doctora Blanca de Santos, epidemi�loga de la Regional del Ministerio de Salud, con sede en San Miguel, proporcion� el dato de que entre 2016 y 2017, fueron 75 j�venes de 18 a�os las que parieron en esos tres municipios.

Algunas de esas j�venes podr�an haber sido embarazadas cuando a�n no hab�an cumplido los 18 a�os de edad.

�Es una t�ctica para evitarle al responsable del embarazo, posibles problemas con la justicia: No los van a asentar hasta que la madre alcanza los 18 a�os de edad�, se�al� una persona que trabaja en una alcald�a de los tres municipios, refiri�ndose a que algunos hombres esperan a que la madre sea mayor de edad para ir a asentar al ni�o.

Un ejemplo de lo anterior es el caso de D.E., quien tuvo a su hijo en 2012, cuando no ten�a ni 14 a�os, el padre del ni�o lo fue a inscribir hasta el 2016, cuando ella ya hab�a cumplido los 18.

El problema de los embarazos en menores de edad no parece disminuir en Moncagua, Lolotique y Chapeltique. La doctora de Santos indic� que hasta marzo de 2018 en esos tres municipios ya registraban 19 casos de madres entre los 14 y 17 a�os, con Moncagua punteando esas estad�sticas.

Por su parte, polic�as, soldados y empleados de salud que trabajan en esos municipios indicaron que los pandilleros contin�an seduciendo o violando a ni�as, embaraz�ndolas y hasta desapareci�ndolas o mat�ndolas cuando se resisten a continuar una relaci�n con ellos.

El caso de Rosita Uno podr�a ser uno de los casos en que la pandilla la mat� porque ella le pidi� ayuda a la familia en el sentido de que no quer�a continuar con aquella relaci�n.

Otro caso podr�a ser el de T.P., una joven que fue desaparecida a principios de diciembre de 2017. I. y B. tambi�n est�n desaparecidas. Ellas eran menores de edad que por alguna raz�n decidieron no continuar siendo mujeres de pandilleros.

Casos para citar de ejemplo los hay. Y lo m�s grave es que todos esos empleados p�blicos los conocen pero hacen poco o nada por combatir ese problema. Cada uno tiene sus propias excusas. Al esgrimir esas excusas, cada uno lo hace con tono despreocupado, como si no tuviera una obligaci�n de denunciar.

Estimados lectores: recuerden que estas noticias las pueden encontrar en nuestro Canal de Whastapp al momento de su publicación.

Sigue el canal de Hoybolivia.com en WhatsApp:
whatsapp.com/channel/0029Va8B7PQ3GJOyC41B2Q1a

Noticias Recientes de Virales

Copyright © Hoybolivia.com Reservados. 2000- 2024