Por qué la búsqueda constante de la felicidad puede en realidad hacerte sentir más miserable
26/12/2018 - 10:05:36
BBC.- �Cu�nto te esfuerzas por alcanzar la felicidad plena?
Para muchos es una meta inalcanzable en la que, cuanto m�s lo intentas, m�s lejos est�s de la meta.
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Las �ltimas investigaciones cient�ficas sugieren que la b�squeda de la felicidad puede, en realidad, causar el efecto contrario, llegando incluso a provocar sentimientos de soledad, estr�s y fracaso personal.
Esto puede explicar el estr�s y la decepci�n que algunos sienten durante ocasiones especiales tales como cumplea�os, navidades o A�o Nuevo. Pero los estudios cient�ficos dicen que esta b�squeda exacerbada de la felicidad tambi�n tiene consecuencias profundas en nuestro bienestar a largo plazo y ofrecen algunas pautas muy �tiles para conseguir objetivos mucho m�s amplios.
El mantra de los libros de autoayuda
Iris Mauss, que ahora imparte clases en la Universidad de Berkeley, en California, fue una de las primeras psic�logas en explorar cient�ficamente esta idea.
Dice que se inspir� en la gran cantidad de libros de autoayuda que se han publicado en Estados Unidos en las �ltimas dos d�cadas. Muchos de ellos presentan la felicidad como el sine qua non de la existencia.
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"Dondequiera que mires, ves libros sobre c�mo la felicidad es buena para ti y c�mo, b�sicamente, debes alcanzar la felicidad, casi como un deber", asegura.
Pero, �est�n esos ejemplares simplemente preparando a la gente para la decepci�n?
En funci�n de esto, la gente puede marcarse est�ndares muy altos para lograr su propia felicidad. Pueden pensar que deber�an ser felices todo el tiempo, o extremadamente felices, y eso puede hacer que las personas se sientan decepcionadas con ellas mismas. Los efectos pueden ser contraproducentes".
Cuantificar la felicidad
Mauss tambi�n se plante� que si simplemente nos cuestionamos muy a menudo "�qu� tan feliz soy?", esto puede traer consigo sentimientos negativos.
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Para obtener respuestas, decidi� llevar al cabo un experimento con la ayuda de Maya Tamir, Nicole Savino y Craig Anderson. Los cuatro elaboraron un cuestionario detallado y pidi� a los encuestados que calificaran afirmaciones como:
Lo feliz que estoy en un momento dado dice mucho sobre lo que vale la pena en mi vida.
Para tener una vida significativa, necesito sentirme feliz la mayor parte del tiempo.
Valoro las cosas en la vida solo en la medida en que influyen en mi felicidad personal.
Como era de esperar, el equipo descubri� que cuanto m�s firmemente respaldaban los participantes esas afirmaciones, menos satisfechos estaban con su vida actual.
El panorama result� distinto para los participantes que recientemente hab�an experimentado momentos emocionalmente duros y cuya visi�n de la felicidad se basaba menos en un momento preciso.
As� que el deseo de querer ser feliz, incluso cuando uno atraviesa momentos dif�ciles, no es lo que necesariamente nos hace m�s miserables, pero ese mismo anhelo puede hacer que no sepamos sentirnos satisfechos con nuestra felicidad cuando atravesamos un momento bueno.
Expectativas marcadas
Tras el cuestionario, Mauss y sus colegas quer�an ver si pod�an manipular la actitud de los participantes para alterar su percepci�n de la felicidad a corto plazo.
Para hacerlo, pidieron a la mitad de los encuestados que leyeran un art�culo de peri�dico falso que exaltaba la importancia de la felicidad. Otro grupo de control ley� un art�culo similar sobre los beneficios del "buen juicio", sin hacer referencia a las emociones.
Tambi�n pidieron a las personas que formaron parte del experimento que vieran una pel�cula conmovedora sobre una victoria ol�mpica. Hecho esto les preguntaron acerca de sus sentimientos.
Una vez m�s, el resultado fue asombrosos: la pel�cula fue menos efectiva a la hora de subir el estado de �nimo de las personas que estaban predispuestas a tener un sentimiento de felicidad mayor, en comparaci�n con las personas que hab�an le�do el art�culo neutral.
Leer sobre la felicidad hab�a aumentado las expectativas de los participantes sobre el c�mo "deber�an" sentirse cuando experimentaban algo positivo y esperanzador y por eso se cuestionaban constantemente c�mo se sent�an.
Cuando sus sentimientos reales no alcanzaron esos est�ndares, terminaron la pel�cula sinti�ndose decepcionados en lugar de euf�ricos.
Probablemente te hayas sentido as� durante una celebraci�n importante, tal como una boda o aquel "viaje de tu vida": cuanto m�s deseabas disfrutar de algo menos lo hac�as.
Lo contrario te ha podido ocurrir con un viaje inesperado y a un destino mucho m�s asequible, por ejemplo.
El efecto contrario
Los resultados de la investigaci�n de Mauss, sin embargo, muestran que esto podr�a aplicarse a muchas otras �reas de nuestra vida.
Desde entonces, la psic�loga ha demostrado que el deseo de (y la b�squeda de) la felicidad tambi�n puede aumentar los sentimientos de soledad y desconexi�n, quiz�s porque hace que tu atenci�n se centre en uno mismo y en tus propios sentimientos en lugar de apreciar a las personas que lo rodean.
"El enfoque en uno mismo podr�a hacer que uno se involucre menos con otras personas, y podr�a juzgar a los dem�s de forma negativa si percibo que "interfieren con mi felicidad", agreg�.
Pero los efectos de desear mucho ser feliz no terminan aqu�.
Sam Maglio, de la Universidad de Toronto (Canad�) y Aekyoung Kim, de la Universidad de Rutgers (Estados Unidos) encontraron otra manera en la que la b�squeda consciente de la felicidad puede ser contraproducente al hacernos sentir que el tiempo para alcanzar dicha meta se nos est� acabando.
Al igual que Mauss, Maglio y Kim utilizaron varios estudios para poder establecer el efecto causal de su ensayo. Incluyeron cuestionarios y experimentos.
Uno de sus estudios pidi� a los participantes que enumeraran las 10 cosas que cre�an les podr�an hacer feliz en la vida. Algunos ejemplos pod�an ser cosas simples como dedicar algunas horas a la semana para estar con su familia.
El resultado fue que en lugar de sembrar un sentimiento optimista de cara al futuro, el ejercicio hizo que muchos se angustiaran por el poco tiempo que ten�an para hacer todas esas cosas, y como resultado, se sent�an menos felices.
El problema no era enumerar las cosas que los hac�a felices en ese momento: el problema era querer aumentar ese deseo de felicidad.
La felicidad, explica Maglio, es una meta nebulosa y conmovedora: es muy dif�cil sentir que has alcanzado la felicidad m�xima e incluso si te sientes contento, deseas prolongar esos sentimientos.
El resultado es que siempre sientes que puedes hacer algo m�s para ser todav�a m�s feliz.
"La felicidad pasa de ser algo agradable a algo oneroso en lo que tengo que seguir trabajando una y otra vez", afirma Maglio.
Las redes sociales
Maglio se�ala que las redes sociales nos hacen especialmente conscientes de c�mo es la vida de los dem�s y pueden aumentar nuestro deseo de vivir una vida m�s feliz y emocionante que la propia.
El experto piensa que ser�amos estar�amos m�s satisfechos si no nos compar�semos con los dem�s para establecer nuestros est�ndares de lo que significa una vida buena y relevante.
"Si te hacen recordar constantemente como un amigo disfruta de viajes ex�ticos o cenas elegantes, funciona como una especie de recordatorio de que otras personas son m�s felices que t�, y hace que la felicidad se fije de nuevo como un objetivo", explica Maglio.
"Definitivamente creo que el deseo por ser feliz est� aumentando hoy en d�a".
Aprender a aceptar lo malo
Por otro lado, Mauss dice que las investigaciones cient�ficas tambi�n han demostrado que las personas que aceptan mejor los sentimientos negativos.
Son capaces de que, en lugar de tratar de luchar constantemente contra ellos, como si fueran un enemigo de nuestro bienestar, acaban por sentirse m�s satisfechos con su vida a largo plazo.
"Cuando te esfuerzas por ser feliz, puedes llegar a ser muy cr�tico y no aceptar las cosas negativas de tu vida... casi te reprendes por los sentimientos que son incompatibles con la felicidad", sostiene.
Por estas razones, aconseja adoptar una actitud m�s estoica ante los altibajos de la vida, en la cual se acepten los malos sentimientos como momentos fugaces en lugar de tratar de eliminarlos por completo.
Pero esto no quiere decir que no haya peque�os trucos que aumenten el bienestar propio. Algunos de ellos incluyen mantener un "diario de gratitud" o ser bondadoso con los dem�s. Pero no esperes que tu estado de �nimo mejore de manera inmediata e intenta no seguir cuestionando constantemente c�mo te sientes.
La felicidad es como un animal t�mido. Una vez que dejas de perseguirlo, posiblemente aparezca.
