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Argentina: Falleció el padre del Presidente Macri




03/03/2019 - 12:11:20
Clar�n.- A lo largo de casi sesenta a�os cre� y manej� m�s de cien empresas. Muchas fueron un �xito y otras un desastre. Altern� en terrenos tan distintos como la construcci�n, la fabricaci�n y venta de autom�viles, el correo, los residuos, el capital financiero, la obra p�blica o los electrodom�sticos, y supo adaptar sus sue�os y ambiciones, sus �xitos y fracasos, sus esperanzas y decepciones seg�n los vientos que soplaran en un pa�s en el que soplaron vendavales y en el que en seis d�cadas pas� por todo: Estado presente, Estado ausente, econom�a abierta, econom�a cerrada, dictablandas, dictaduras, democracias esperanzadas, autoritarias, violentas, corruptas o est�pidas.

Muchas de sus empresas fueron originales, innovadoras, tomaron el pulso a una sociedad que cambiaba a veces por horas y ayudaron a modificar sus h�bitos y costumbres: Movicom, por ejemplo, o Pago F�cil, o Autopistas del Sol. La muerte de Franco Macri, a los 88 a�os, hace descender el tel�n sobre una vida novelesca y casi de leyenda.

Franco Macri, que muri� en la noche de este s�bado en su casa de Barrio Parque, no fue un heredero. Lleg� a la Argentina con una mano atr�s y otra adelante y se hizo solo, entre luces y sombras, como solo construy� su imperio econ�mico y empresarial.

El padre del presidente Mauricio Macri naci� el 15 de abril de 1930 en Roma, en la zona del Lazio, el barrio que sue�a con la aristocracia imperial en una Roma que siempre ser� de Alberto Sordi. Si el hombre es en gran parte la infancia que vivi�, Franco Macri jam�s pudo superar la separaci�n de sus padres y cierto desinter�s por su destino por parte de su madre: �Las heridas que dej� en m� la aparente facilidad con que mi madre me abandon�, primero en un colegio donde estuve pupilo, luego en la vida de Roma en �poca de guerra, no hab�an cicatrizado �confes� en su autobiograf�a� Si bien no estoy seguro de c�mo afect� mi relaci�n con las mujeres, no tengo duda de que lo hizo�.

Macri ten�a nueve a�os al estallar la Segunda Guerra, quince cuando termin� y diecinueve cuando emprendi� el viaje a la Argentina junto a su hermano Tonino, de catorce, y a su hermana m�s chica, Mar�a P�a. En Buenos Aires los esperaba su padre, Giorgio, que era accionista de SADOP (Sociedad An�nima de Dragado y Obras Portuarias) y fundador, en 1955, de la constructora Vimac. Si Franco se dedic� en sus primeros a�os en el pa�s al duro oficio de pe�n de alba�il, es un dato en discusi�n: no hay demasiados testimonios que certifiquen esas jornadas, salvo ciertos episodios de fervor juvenil en los andamios encalados, que el propio Franco difundi� tal vez para mantener el mito en pie.

Franco estudi� dos a�os de Ingenier�a y abandon� los estudios por el trabajo. Fue su padre, Giorgio, quien en 1959 le prest� el capital para fundar Demaco, su primera empresa constructora especializada en la fabricaci�n de casas baratas hasta que en aquel pa�s que ol�a al petr�leo que impulsaba el presidente Arturo Frondizi, Franco obtuvo la concesi�n de la primera gran obra p�blica de las muchas que se adjudicar�a en los a�os por venir: la obra civil que acompa�aba al tendido del gasoducto de AGIP, la empresa italiana ligada al ENI (Ente Nazionale de Idrocarburi).

La leyenda dice que Macri tuvo la visi�n de que esa era una obra de enorme importancia y la sigui� metro a metro, pueblo a pueblo, con comidas al paso y en hoteles de colchones dudosos.

En una de esas paradas, en Tandil, conoci� a Alicia Blanco Villegas y se cas� con ella para poner fin a una �poca de tumultuosa solter�a: ��ramos el llanto de la mayor�a de las madres. Hac�amos honor a nuestra fama de donjuanes y para nada �ramos candidatos deseables para maridos, lo que a nosotros nos parec�a muy bien�. Tuvieron cuatro hijos: Mauricio, Sandra, Gianfranco0 y Mariano. El matrimonio se separ� en 1980.

En los cinco a�os siguientes, Macri estuvo casado con la psic�loga Cristina Cressier, madre de Florencia, el quinto hijo de Franco. Luego el empresario se uni� a Clara Bordeu, entre 1985 y 1989, a Evangelina Bompaola, entre 1989 y 1997, a Flavia Palmiero entre 1997 y 2000 y a Nuria Quintela. Los �ltimos a�os de su vida los pas� Macri en soledad: �Un hombre, sin una mujer al lado, no es nada. Hoy estoy solo y no me siento pleno�, dijo en febrero de 2009.

Macri se vincul� a la Fiat a trav�s de una empresa subsidiaria, Impresit, encargada de construir obras civiles y de la que Franco fue en principio socio menor. En cinco a�os, Impresit pas� a ser Impresit-Sideco (Silos DEmaco Compa��as). Quince a�os m�s tarde, Macri era el due�o del paquete accionario de Impresit-Sideco y del ochenta y cinco por ciento de las acciones de Fiat Sevel Argentina, que ser�a el alma de su emporio econ�mico y empresarial.

En 1979, durante el �Proceso� y con la econom�a en manos de Jos� Alfredo Mart�nez de Hoz, Macri se lanz� a la compra del Banco de Italia del que fue presidente del directorio en 1980. Al a�o siguiente vendi� sus acciones y toda la gesti�n de aquellos a�os fue denunciada en 1987 por el Banco Central e investigada por la Justicia y Macri record� siempre aquella aventura como uno de los errores m�s grandes de su vida. Para entonces, hac�a cinco a�os que Macri controlaba sus empresas trav�s de un holding administrador: SOCMA (Sociedades Macri) fundada el primer d�a de 1976 con Franco en la presidencia, para atender una facturaci�n anual de unos cien millones de d�lares.

SOCMA gan� varias licitaciones durante esos a�os, entre ellas la represa Yaciret�, la construcci�n del puente Misiones-Encarnaci�n, la central termoel�ctrica de R�o Tercero y de Luj�n de Cuyo, la recolecci�n de residuos de la Capital Federal a trav�s de la empresa Manliba (Mantenga Limpia a Buenos Aires) Las siete empresas iniciales de Macri, eran cuarenta y siete en 1983, entre las m�s importantes, Sevel Argentina (automotriz), Sideco Americana (construcciones), Socma Corp (financiera), Manliba (recolecci�n de residuos), Itron (electr�nica), Solvencia de Seguros (aseguradora), Prourban (inmobiliaria), Iecsa (instalaciones mec�nicas), Perfomar (perforaci�n petrolera) y, la joya de la corona, la fabricaci�n y venta de autos Fiat y Peugeot, en 1981.

En esa d�cada de devaluaciones, inflaci�n, inestabilidad y recuperaci�n democr�tica, Macri fue el rey indiscutido de la industria automotriz. Con la convertibilidad fue protagonista del estallido de producci�n del sector y presidi� la Asociaci�n de F�brica de Automotores de la Argentina (Adefa).

Sin admitir sus simpat�as por el peronismo y mucho menos proclamarlas, Macri termin� decepcionado con los gobiernos de Menem y de los Kirchner. Menem le dio la concesi�n del Correo, que prestaba Encotesa, y que pas� a ser Correo Argentino en manos de Franco Macri. Kirchner rescindi� ese contrato y el Correo volvi� a manos del Estado, luego de la presentaci�n del empresario a un concurso preventivo de acreedores en septiembre de 2001. Para entonces, Macri preve�a nuevos malos vientos en la Argentina. En esos tiempos le preguntaron si estaba desinvirtiendo en el pa�s y su respuesta fue que se avecinaban d�as muy dif�ciles. En su libro biogr�fico, Macri afirma sobre su mala experiencia con el Correo: �Tengo confianza en que la verdad y la raz�n finalmente se impongan. No estoy buscando que me devuelvan el Correo, sino que se cierre esta pesadilla con justicia�.

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