Cómo Huawei, la empresa china que demanda a EE.UU., se convirtió en una de las compañías tecnológicas más controvertidas del mundo
07/03/2019 - 15:54:31
BBC.- Huawei es uno de los mayores fabricantes tecnol�gicos del mundo. Pero, en el �ltimo a�o, la compa��a china se ha visto envuelta en varias controversias que le han situado en el foco medi�tico, con el desarrollo del 5G cada vez m�s cerca.
�Es la firma verdaderamente culpable? �O es acaso v�ctima de rumores falsos, como afirma la empresa en la demanda que acaba de interponer contra el gobierno de Estados Unidos?
Esta es la historia de c�mo comenz� Huawei y de c�mo creci� hasta colocarse en el ojo del hurac�n.
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Un hackeo misterioso
La sede de la Uni�n Africada en Addis Abeba es una brillante estructura similar a una nave espacial que brilla bajo el sol de media tarde.
Se destaca en la capital et�ope junto al rascacielos que la acompa�a.
Saludos en mandar�n dan la bienvenida a los visitantes cuando entran en los ascensores y unas palmeras de pl�stico exhiben los logos del Banco de Desarrollo de China.
Por todas partes hay peque�as pistas de que el edificio fue construido con dinero de China.
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Image caption La sede de la Uni�n Africana (UA) fue un regalo del gobierno de China. Est�n en Addis Abeba, la capital de Etiop�a.
En 2006, Pek�n prometi� US$200 millones para construir las oficinas. Se completaron en 2012 y todo fue fabricado a medida por los chinos, incluido un sistema inform�tico de �ltima generaci�n.
El edificio pronto se convirti� en un orgulloso testimonio de los cada vez m�s estrechos lazos entre China y �frica.
Los acuerdos comerciales se dispararon durante las dos �ltimas d�cadas, creciendo en torno a un 20% cada a�o, seg�n la consultora internacional McKinsey.
De hecho, China es ahora el mayor socio econ�mico de �frica.
Sin embargo, en enero de 2018, el diario franc�fono Le Monde Afrique dej� caer una bomba al publicar que el sistema inform�tico de la UA hab�a sido comprometido.
El peri�dico, citando varias fuentes, dijo que durante cinco a�os, entre la medianoche y las dos de la ma�ana, los datos de los servidores hab�an sido transferidos a unos servidores en Shangh�i, a m�s de 8.000 km de distancia.
Eso se produjo presuntamente durante 1.825 d�as consecutivos.
Seg�n Le Monde Afrique el problema se descubri� en 2017, cuando un cient�fico que trabajaba para la UA registr� una cantidad inusualmente alta de actividad inform�tica en sus servidores durante horas en que las oficinas habr�an estado vac�as.
Tambi�n report� que hab�an sido descubiertos micr�fonos y dispositivos de escucha en las paredes y escritorios del edificio luego de una b�squeda de errores inform�ticos.
La reacci�n fue r�pida.
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Tanto la UA como los funcionarios chinos tacharon p�blicamente el informe de falso y sensacionalista. Dijeron que era un intento de los medios occidentales para perjudicar las relaciones entre una China m�s asertiva y un �frica cada vez m�s independiente.
Pero Le Monde Afrique dijo que los funcionarios de la Uni�n Africana hab�an expresado de forma privada preocupaciones sobre su dependencia excesiva de China y las consecuencias que eso podr�a tener.
Y, en medio de ese tumulto, hubo un hecho del que no se inform� durante mucho tiempo.
El principal proveedor de sistemas tecnol�gicos de informaci�n y comunicaci�n para las oficinas centrales de la UA era la empresa de equipos de telecomunicaciones m�s conocida de China, Huawei.
"Eso no significa que la compa��a fue c�mplice del posible robo de datos", dice Danielle Cave del Instituto Australiano de Pol�ticas Estrat�gicas en un an�lisis del supuesto incidente.
"Pero... es dif�cil ver c�mo -dado el rol de Huawei en la provisi�n de equipos y servicios de TIC claves para el edificio de la UA y espec�ficamente su centro de datos- la compa��a realmente nunca se haya enterado del aparente robo de grandes cantidades de datos, todos los d�as, durante cinco a�os", agrega.
"Si se produjo una filtraci�n de datos desde computadoras en la sede de la UA en Addis durante un per�odo prolongado de tiempo, esas filtraciones no se originaron en tecnolog�a proporcionada por Huawei", le dijo por su parte un portavoz de la empresa a la BBC.
"Lo que Huawei le proporcion� al proyecto de la UA inclu�a tecnolog�a para el centro de datos, pero la misma no ten�a ninguna funci�n de almacenamiento o transferencia de datos" agreg�.
Tampoco hay evidencia que indique que el equipo de la red de comunicaciones de Huawei alguna vez haya sido empleado por el gobierno chino -ni por nadie m�s- para acceder a los datos de sus clientes.
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Huawei tambi�n fue uno de varios proveedores del proyecto.
Y, de hecho, nadie nunca ha confirmado oficialmente que la seguridad del sistema de la UA se haya visto comprometida.
Pero estos reportes han ayudado a atizar a�os de sospechas sobre Huawei y sobre la posibilidad de que una gran compa��a china pueda verse indebidamente influenciada por el gobierno de su pa�s.
Ren y el auge de Huawei
"Cuando yo empec�, hace 30 a�os... la verdad es que no ten�amos tel�fonos. Los �nicos tel�fonos que hab�an eran esos de manivela que se ven en las pel�culas sobre la Segunda Guerra Mundial. La verdad es que est�bamos bastante subdesarrollados".
El fundador y presidente ejecutivo de Huawei, Ren Zhengfei, recuerda para la BBC los or�genes del segundo fabricante de tel�fonos inteligentes del mundo.
La conversaci�n tiene lugar en la sede de la empresa en Shenzhen, un s�mbolo del �xito para el que ha trabajado toda su vida.
Una gigantesca escalera de m�rmol, cubierta por una elegante alfombra roja, es lo primero que uno ve al entrar. Al final de las escaleras, hay una gigantesca pintura que representa una tradicional escena del a�o nuevo chino.
Y a unos pocos kil�metros de ah�, en Dongguan, las �ltimas instalaciones de Huawei son todav�a m�s impactantes.
El lugar -dise�ado para albergar a los 25.000 empleados de la empresa que trabajan en investigaci�n y desarrollo- est� formado por 12 "aldeas", y cada una recrea la arquitectura de una ciudad europea distinta, incluyendo Par�s, Bolonia y Granada.
Es como si el Silicon Valley hubiera sido reimaginado por Disney: largos corredores de pilares romanos y pintorescos caf�s franceses adornan el campus, mientras que el tren que conecta las diferentes zonas pasa por cuidados jardines y un lago artificial.
Un notable cambio con el ambiente que rodeaba a Ren al momento de fundar la compa��a, en 1987.
"Fund� Huawei cuando China empezaba a implementar su pol�tica de reforma y apertura", cuenta.
"En esa �poca China estaba movi�ndose de una econom�a planificada a una econom�a de mercado. Y no solo la gente como yo, sino tambi�n los m�s altos funcionarios de gobierno, no ten�amos la m�s vaga idea de lo que era una econom�a de mercado. Parec�a que sobrevivir iba a ser muy dif�cil", recuerda.
Ren naci� en 1944 en el sur de China, un lugar tumultuoso y ca�tico que tambi�n era una de las regiones m�s pobres de un pa�s bastante pobre.
Y como parte de una familia con siete hijos, durante mucho tiempo solo supo de privaciones.
"Eran muy pobres", dice David De Cremer, el coautor de un libro sobre Ren y Huawei.
"Creo que las privaciones son algo que puedes ver a lo largo de su vida, y �l las sigue destacando", agrega De Cremer.
Para escapar a esa vida de pobreza y penosos trabajos, Ren hizo lo mismo que muchos j�venes chinos de la �poca: se uni� al ej�rcito.
"Era un oficial bastante menor del Ej�rcito Popular de Liberaci�n", cuenta el fundador de Huawei. "Trabajaba en un proyecto de construcci�n ordinario, no una unidad de campo. Para ese entonces era un t�cnico en una empresa del ej�rcito y luego me hice ingeniero", recuerda.
Y cuando China empez� a reducir sus fuerzas en 1983 sali� del ej�rcito y entr� al negocio de la electr�nica.
El mismo Ren admite que al principio no era un muy buen hombre de negocios.
"Para ese entonces era alguien que hab�a pasado toda su vida en el ej�rcito, estaba acostumbrado a hacer lo que se ordenaba", dice.
"De pronto, empec� a trabajar en una econom�a de mercado. estaba completamente perdido. As� que yo tambi�n sufr� p�rdidas, a m� tambi�n me enga�aron, y tambi�n me estafaron", cuenta.
Ren, sin embargo, aprend�a r�pido, y era un �vido estudiante de las pr�cticas comerciales occidentales y de la historia europea.
"Investigu� de qu� se trataba exactamente una econom�a de mercado", dice. "Le� libros sobre leyes, incluso sobre leyes europeas y estadounidenses. En ese momento, hab�a muy pocos libros sobre leyes chinas, as� que tuve que leer sobre leyes europeas y estadounidenses".
Cinco a�os m�s tarde, fund� Huawei -que puede ser traducido como "logro espl�ndido" o "China es capaz"- para vender sencillos equipos de telecomunicaciones en el mercado rural chino.
Pero en unos pocos a�os la empresa ya estaba desarrollando y fabricando sus propios equipos.
Luego, en alg�n momento a inicios de la d�cada de 1990, Huawei obtuvo un contrato gubernamental que la convirti� en proveedora de equipos de telecomunicaciones del Ej�rcito de Liberaci�n Popular.
En 1995 la empresa ya generaba ventas por del orden de US$220 millones, principalmente por sus ventas en el mercado rural.
Y al a�o siguiente, a Huawei se le otorg� el estatus de "palad�n nacional" de China, lo que en la pr�ctica signific� que el gobierno le cerr� la puerta a la competencia extranjera.
En un momento en que la econom�a de China crec�a en promedio 10% al a�o, esta no era una ventaja peque�a.
Pero fue solamente cuando Huawei empez� a expandirse hacia el extranjero en el a�o 2000 que sus ventas despegaron de verdad.
En 2002, la empresa hizo m�s de US$552 millones en ventas en mercados internacionales. Y en 2005 sus contractos en mercados internacionales superaron a sus negocios dom�sticos por primera vez.
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El caso en su contra
Era el 1ro de diciembre de 2018. El presidente de EE.UU., Donald Trump, y su contraparte china, Xi Jinping, estaban cenando filete a la parrilla (seguido por panqueques con dulce de leche) en la cumbre del G8 en Buenos Aires.
Ten�an muchas cosas de las que hablar. EE.UU. y China estaban en medio de una guerra comercial -imponiendo tarifas a los bienes producidos por el otro- y como consecuencia las expectativas de crecimiento de ambos pa�ses hab�an sido revisadas a la baja, a lo que se sumaban temores de una ralentizaci�n de la econom�a global.
Pero durante la cumbre, ambos l�deres acordaron una tregua, y Donald Trump escribi� en Twitter: "�Las relaciones con China han dado un GRAN salto hacia adelante!"
A miles de kil�metros de distancia, sin embargo, en Canad�, se estaba produciendo un arresto que pondr�a en peligro ese acercamiento.
Meng Wanzhou, directora financiera de Huawei e hija mayor de Ren, hab�a sido detenida por funcionarios canadienses mientras cambiaba de avi�n en el aeropuerto de Vancouver.
El arresto se hab�a producido a solicitud de EE.UU., que la acusa de haber violado las sanciones contra Ir�n.
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"Cuando la detuvieron, como padre, el coraz�n se me rompi�", dice un claramente emocionado Ren. "�C�mo pod�a ver a mi ni�a sufrir as�? Pero lo que pas�, pas�. Solo podemos depender de la ley para solucionar este problema".
Y los problemas de Huawei apenas estaban comenzando, Casi dos meses despu�s, el departamento de Justicia de EE.UU. formaliz� dos acusaciones en contra de Meng y Huawei.
En la primera se acusa a Meng y a Huawei de haber enga�ado a los bancos y al gobierno de EE.UU. sobre sus negocios en Ir�n.
La secunda acusaci�n -en contra de Huawei- incluye cargos criminales que como obstrucci�n de justicia y el intento de robo de secretos industriales.
Tanto Huawei como Meng rechazan los cargos.
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Y a inicios de marzo la firma tambi�n introdujo su propia demanda judicial contra el gobierno de EE.UU. y su decisi�n prohibir a las agencias federales que adquieran equipos de la compa��a.
La acusaci�n de robo de secretos industriales se centra en una herramienta rob�tica conocida como Tappy desarrollada por T-Mobile.
Seg�n los documentos legales, Huawei trat� de comprar Tappy, un dispositivo que imita a los dedos humanos tocando r�pidamente las pantallas de los celulares para probar su capacidad de respuesta.
En esa �poca, T-Mobile ten�a una sociedad con Huawei, pero rechaz� las ofertas de la compa��a china por temor a que esta empleara la tecnolog�a en la fabricaci�n de tel�fonos para sus competidores.
Y se afirma que uno de los empleados de Huawei en EE.UU. sac� el brazo rob�tico Tappy en su mochila para poder enviar detalles sobre el mismo a China.
Cuando el robo se descubri�, el empleado de Huawei dijo que el brazo hab�a ca�do dentro de su bolso por accidente.
La empresa, por su parte, argumenta que el empleado actu� por su cuenta y dice que el caso se arregl� extrajudicialmente en 2014. Pero la �ltima acusaci�n se fundamenta en correos entre ejecutivos en China y los empleados de la empresa en EE.UU. que vinculan a los directivos de la empresa con el supuesto robo.
El pliego tambi�n da detalles sobre un supuesto esquema de bonificaci�n que data de 2013, en el que se le ofrecen incentivos a los empleados de Huawei a cambio de robar informaci�n confidencial de sus competidores.
La empresa niega la existencia de semejante esquema.
Esta no es la primera vez que Huawei ha sido acusada de robar secretos industriales. A lo largo de los a�os, empresas como Cisco, Nortel y Motorola han apuntado a la empresa china con dedo acusador.
Pero los temores en EE.UU. van mucho m�s all� del espionaje industrial.
Por m�s de una d�cada, el gobierno de EE.UU. ha considerado a la compa��a como poco m�s que una brazo del Partido Comunista de China.
Y el a�o pasado Australia fue todav�a m�s all�, prohibiendo la compra de equipos por parte de proveedores "muy probablemente sujetos a las instrucciones extrajudiciales de un gobierno extranjero".
Huawei no fue mencionada directamente, pero Danielle Cave dice que la compa�a representa un peligro por sus v�nculos con el gobierno chino.
Y la analista tambi�n cita un art�culo de la ley china que hace imposible que una compa��a se reh�se a ayudar al Partido Comunista de China en la obtenci�n de informaci�n de inteligencia.
"Es cierto que lo que falta en este debate es "la pistola humeante"", dice de la ausencia de pruebas.
"Y para la gente normal que tiene un tel�fono Huawei, no es gran cosa. Pero si eres un gobierno occidental que tiene que proteger su seguridad nacional, �por qu� permitir�as el acceso de una compa��a que est� en el sistema pol�tico en el que est� China?", plantea.
Ren, por su parte, dice que los recursos de Huawei nunca han sido y nunca ser�n empleados para espiar a favor del gobierno chino.
"El gobierno chino ha dicho claramente que no le pedir� a las compa��as que instalen puertas traseras", dice del t�rmino empleado para describir un punto de entrada secreto en un programa o sistema inform�tico.
"Y Huawei tampoco lo har�a", afirma. "Nuestros ingresos por ventas en la actualidad suman miles de millones de d�lares. No vamos a arriesgarnos a enojar a nuestros clientes en nuestro pa�s y en el resto del mundo por algo as�. Perder�amos todo nuestro negocio. No voy a correr semejante riesgo", afirma.
La China de Xi
Zhou Daiqi es el funcionario de Huawei a cargo del departamento de cumplimiento de normas y �tica.
Ha estado con la empresa por m�s de 25 a�os, en varios puestos diferentes: ingeniero en jefe, director del departamento de software, director del centro de investigaci�n en Xi"an, seg�n su biograf�a en la p�gina web de la compa��a.
Tambi�n se dice que combina sus deberes como alto ejecutivo con otro papel: el de secretario del comit� del Partido Comunista en Huawei.
Por ley, todas las compa��as en China deben tener un Comit� del Partido Comunista.
El argumento oficial es que dichos comit�s existen para garantizar que los empleados respeten los valores sociales y morales del pa�s. A menudo, a los representantes del comit� tambi�n se les pide que ayuden con los problemas financieros de los trabajadores.
Los cr�ticos del sistema de partido �nico de China, sin embargo, afirman que su rol es facilitar el control del Estado sobre la China corporativa. Tambi�n dicen que este control ha aumentado en los �ltimos a�os.
"[El presidente] Xi Jinping est� ejerciendo mayor control sobre la comunidad empresarial de China", dice Elliott Zaagman, quien a menudo asesora a empresas chinas en materia de relaciones p�blicas.
"Y cuando estas compa��as ganan cada vez m�s poder e influencia en el extranjero, menos raz�n tiene el partido para querer perder ese control", agrega.
Ren, sin embargo, sostiene que el rol del comit� del Partido Comunista en Huawei es mucho menos importante de lo que muchos en Occidente creen.
"Solo sirve para educar a sus empleados", dice. "No participa en ninguna decisi�n de negocios".
Sin embargo, la robusta defensa que el Partido Comunista chino ha hecho de Huawei tambi�n ha sembrado dudas sobre qu� tan independiente es realmente la compa��a de su influencia.
Por ejemplo, Pek�n ha calificado el arresto de Meng como un abuso de derechos humanos.
Y mientras avanza el proceso para su extradici�n a EE.UU., China ha arrestado a dos ciudadanos canadienses acus�ndolos de robar secretos estatales.
Varios cr�ticos afirman que ambas detenciones est�n vinculadas al arresto de Meng.
Ren no comenta sobre el arresto de los canadienses, pero dice que la defensa que China hace de Huawei es perfectamente comprensible.
"El deber del gobierno chino es proteger a su gente", dice.
"Y si EE.UU. trata de obtener una ventaja competitiva socavando a la empresa de alta tecnolog�a m�s destacada de China, entonces es comprensible que el gobierno chino, a su vez, proteja a sus compa��as de alta tecnolog�a", explica.
En los �ltimos a�os, sin embargo, han habido signos de una mayor presi�n gubernamental para que las empresas privadas, y en particular aquellas del mundo de la tecnolog�a, se adhieran a las reglas del partido.
Y los problemas del gigante chino del sector transporte Didi Chuxing son un ejemplo de las dificultades que enfrentan las empresas chinas cuando tratan de mantener su independencia.
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Image caption Un logo de Didi Chuxing adorna un edificio en Hangzhou, China.
La actitud de los chinos a los temas de registro y privacidad de los datos son muy diferentes a las de Occidente, pues a muchos no les importa que las empresas puedan acceder a sus datos ya que sostienen eso hace las cosas m�s f�ciles en la vida y en el trabajo.
As� que no hubo nada de inusual en que, despu�s del asesinato de dos pasajeros a manos de conductores de Didi, los reguladores utilizaran el esc�ndalo para tratar de obligar a que la empresa compartiera m�s informaci�n con el gobierno.
Didi -una especie de Uber chino- trat� de resistir, argumentando que eso comprometer�a la privacidad de sus clientes. Pero bajo la ley china, no ten�a otra opci�n.
Y cuando cooper�, entreg� "tres cajas de datos impresos en papel, incluyendo 95 copias f�sicas para su revisi�n por parte de las autoridades".
Seg�n Samm Sacks, del Centro Internacional de Estudios Estrat�gicos (CSIS, por sus siglas en ingl�s) el caso demuestra que "el acceso del gobierno a datos en China no es la rebati�a que muchos se imaginan fuera del pa�s".
La experta considera adem�s que el caso tambi�n sugiere que hay "una especie de tira y afloja entre el gobierno y las empresas sobre el tema del acceso a los datos".
Y la imagen de las compa��as chinas en el extranjero depender� en buena medida de c�mo se resuelva esto.
Empresas como Huawei han crecido en un sistema donde para sobrevivir y triunfar se necesitaban fuertes v�nculos con el gobierno. No hab�a, ni hay, otra posibilidad.
Pero esos v�nculos pueden da�ar su reputaci�n en el exterior.
"Son dos sistemas diferentes", dice Zaagman. "Una buena comparaci�n es un enchufe. El enchufe de China no calza con los que tenemos en Occidente".
"B�sicamente uno quiere conectarse con todo lo que puede ser conectado", agrega.
Lo que est� en juego
Zhu Peiying, el director del laboratorio inal�mbrico 5G de Huawei, muestra los aparatos que pueden conectarse a la nueva tecnolog�a.
Del cepillo de dientes inteligente que recoge informaci�n acerca de qu� tan bien te cepillas a la taza que te recuerda que deben beber m�s agua, este es un mundo donde todo lo que se te ocurra puede ser medido y analizado.
Tambi�n se cree que Huawei puede ofrecer precios un 10% m�s baratos que sus competidores, aunque sus cr�ticos dicen que eso es porque reciben apoyo estatal.
Ren desestima esos se�alamientos afirmando que Huawei no recibe subsidios gubernamentales.
Y dice que la verdadera raz�n detr�s de los ataques estadounidenses contra Huawei es que su tecnolog�a es superior.
"Estados Unidos no podr� destruirnos. El mundo necesita a Huawei porque somos los m�s avanzados", dice.
"Incluso si logran convencer a m�s pa�ses de que no nos usen temporalmente, simplemente podemos desacelerar un poco", asegura.
Por qu� Australia prohibi� las operaciones de la compa��a china Huawei, la mayor productora de celulares del mundo
De hecho, muchos analistas dicen que la exclusi�n de Huawei de las redes estadounidenses puede hacer que EE.UU. se quede a la zaga en los que a capacidades 5G se refiere.
"Significa que no podr�amos participar en ninguna red mezclada [que use tecnolog�a Huawei] en Europa o Asia", dice Samm Sacks, del CSIS.
"Eso nos pondr�a en una desventaja significativa", afirma.
En la pr�ctica, eso tambi�n se traducir�a en un mundo con dos internets, o lo que algunos analistas llaman "una cortina de hierro digital", que dividir�a al mundo entre aquellos que hacen negocios con compa��as como Huawei y aquellos que no.
Y, por lo pronto, las presiones de EE.UU. sobre sus aliados han obligado a Huawei a lanzar una agresiva campa�a de relaciones p�blicas para tranquilizar a clientes y socios y gobiernos que poseen acciones.
Recientemente, el presidente de Vodafone, Nick Read, le pidi� al gobierno de EE.UU. que compartiera cualquier evidencia que tuviera sobre Huawei.
Y el vicepresidente para el mercado �nico digital de la Comisi�n Europea, Andrus Ansip, dijo en Twitter que se hab�a reunido con directivos de Huawei para hablar sobre la importancia de la apertura y la transparencia y explorar formas de trabajar juntos.
Pero las sospechas sobre la empresa se mantienen.
Una empresa de seguridad report� un dr�stico aumento de consultas sobre Huawei por parte de los gobiernos asi�ticos que tienen como clientes.
"Algunos nos preguntan qu� tanto deber�an preocuparse", nos dijo un analista, bajo condici�n de anonimato.
Algunos tambi�n estiman que para 2030 la econom�a de China ya sobrepasar� a la de Estados Unidos.
Y su notable crecimiento lo ha logrado bajo un sistema de partido �nico y la supremac�a del Partido Comunista.
Por eso, este �xito ha atizado la preocupaci�n de que esto solo haya sido posible gracias a un gran nivel de control gubernamental sobre las compa��as chinas Y el miedo ahora es que ese control se utilice en el extranjero para alcanzar los objetivos del Partido Comunista, que por el momento no est�n claros.
"Es una espada de doble filo para China", dice Danielle Cave.
"[Por causa de sus leyes] el Partido Comunista Chino ha hecho pr�cticamente imposible que las empresas chinas puedan expandirse sin atraer sospechas comprensibles y leg�timas", explica.
Y a esto se suma que china se ha vuelto m�s autoritaria bajo el gobierno de Xi Jinping.
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Image caption China se ha vuelto m�s autoritaria bajo Xi Jinping
"Xi est� sistem�ticamente socavando pr�cticamente todas las caracter�sticas que hicieron que China fuera tan distinta y que le ayudaron a funcionar tan bien en el pasado ", escribe Jonathan Tepperman, editor en jefe de la revista Foreign Policy.
"Sus esfuerzos pueden aumentar su propio poder y prestigio en el corto plazo y reducir algunas formas de corrupci�n. Sin embargo, en general, la campa�a de Xi tendr� consecuencias desastrosas a largo plazo para su pa�s y el mundo", vaticina Tepperman.
Ren, sin embargo, no est� de acuerdo, e insiste en que China nunca ha estado tan abierta como en la actualidad.
"Si esta reuni�n hubiera tenido lugar hace 30 a�os", dice de su entrevista con la BBC, "habr�a sido muy peligrosa para m�. Hoy puedo ser honesto cuando respondo a preguntas dif�ciles.
"Eso demuestra que China tiene un ambiente pol�tico mucho m�s abierto", afirma.
Y el fundador de Huawei dice tener todav�a m�s esperanzas sobre el camino que China tomar� en el futuro.
"China ha tratado de cerrarse al mundo exterior por aproximadamente 5.000 a�os, y el resultado fue que terminamos pobres, muy detr�s de otras naciones", dice Ren.
"Fue solo durante los �ltimos 30 a�os, despu�s de que Den Xiapoing le abri� las puertas de China al mundo, que China se ha vuelto m�s pr�spera. Por lo tanto, China debe seguir movi�ndose en la direcci�n de la reforma y la apertura", opina.
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Image caption Xi Jinping y Ren Zhengfei en Londres, 2015.
En uno de los vastos emplazamientos del campus de Huawei en Shenzen, hay un lago artificial. Y nadando en estas serenas aguas hay dos cisnes negros.
Seg�n la leyenda, Ren hizo poner a los cisnes ah� para recordarle a sus empleados el riesgo de los llamados acontecimientos "cisne negro": eventualidades financieras impredecibles y catastr�ficas, para las cuales es imposible prepararse.
El fundador de Huawei dice que eso es un mito, pero resulta dif�cil no leer algo ah�.
Para Huawei, y para Ren, estos son tiempos impredecibles y no hay forma de saber qu� viene despu�s.
