07/02/2016 - 09:00:55
PÁGINA SIETE.- Decenas de jóvenes, ellas con trajes típicos de China y ellos con atuendos de guerreros de kung fu, interpretaron la danza del dragón chino por primera vez en la Anata Andina. Con sus saltos acrobáticos muy bien coordinados para dar movimiento al dragón de tela que portaban, se robaron los aplausos de los alteños a lo largo de la avenida Juan Pablo II.

Otros chicos y chicas, que se distinguían por las poleras verdes que vestían, daban vueltas en el aire, rodaban por el piso, se paraban de manos y realizaban otros movimientos acrobáticos al son de un berimbau (arco musical) y tambores ejecutados por ellos mismos. Interpretaban la capoeira, una disciplina brasileña que combina el arte marcial con acrobacias, baile y movimiento de lucha.

Los dos grupos fueron la novedad en la Entrada Anata Andina del Carnaval, organizada por la Alcaldía de El Alto, que se realizó con cuatro horas de retraso.

"¡Me gusta! Así tienen que ser los jóvenes, usar su energía y hacer ejercicio para que su mente crezca”, expresó entusiasta Julio Condori, un vendedor de jugos de naranja que se distrajo con las ágiles acrobacias y, por unos minutos, descuidó su negocio.

No le molestó que las dos danzas foráneas se mezclaran con la moseñada, los pepinos, los ch’utas choleros y con otros personajes tradicionales de la Entrada del Carnaval Andino que cada año se celebra en su ciudad. "Está bien, los jóvenes tienen que ver otras culturas, tienen que conocer para crecer”, comentó.

Los jóvenes que interpretaron la danza del dragón chino son alumnos y docentes de la Academia de Artes Marciales Shaolín que se encuentra en la zona de Alto Lima. El director de la institución, Marcelino Patzi, comentó que la presentación les significó preparación física y esfuerzo.

Es que los jóvenes y niños, que estudian en la academia, elaboraron hasta el dragón de tela con el que interpretaron la danza.

"Hicieron su ropa y se maquillaron para representar este baile, que es una ceremonia que en China se realiza en la época de cosecha para atraer la lluvia. Igual que nosotros, la cultura andina, que bailamos la moseñada para atraer la lluvia”, explicó Patzi.

Alex Mollo, docente la Academia de Capoeira Cordau de Ouro (Cordón de oro), ubicada en Río Seco, contó que los casi 50 jóvenes y niños que participaron en la Entrada del Carnaval Andino tienen el objetivo de difundir la disciplina que practican porque representa "una herramienta para la socialización”.

"Debemos rescatar todo lo bueno de otras culturas para ser mejores y la capoeira es una gran oportunidad”, dijo.

La Anata Andina se extendió durante horas con la participación de 12 comparsas, entre ellas la estudiantina EMLA.

Ch’utas y pepinos no pararon el tráfico alteño

Página Siete / El Alto

Los ch’utas, pepinos y demás personajes de la Anata Andina de El Alto no lograron paralizar el centro de esa urbe, pese a que la Entrada se realizó en plena avenida Juan Pablo II, una de las más importantes del lugar.

Pasadas las 13:00 de ayer, oficiales de Policía llegaron para cortar el tráfico vehicular en la Juan Pablo II, a la altura de la avenida La Paz. Lo lograron, pero sólo en uno de los carriles, porque en el otro, el intenso tráfico de vehículos, sobre todo de transporte pesado, no cesó y, más bien se congestionó por la falta de una ruta.

Las comparsas lograron atraer la atención de los alteños sólo por unos minutos. Algunos se detenían a verlos, pero luego continuaban su camino.

En el palco, ubicado a los pies de la Cruz Papal, se advertía una concurrencia reducida, pero que no dejó a aplaudir a los faranduleros, encabezados por las autoridades de la Alcaldía de El Alto, que organizó la Entrada.

A unas cuadras de la Cruz Papal, al inicio del distribuidor, algunos alteños ya habían comenzado a entregarse al dios Baco. Con botellas de cerveza en mano celebraban el inicio del Carnaval y esperaban a los bailarines, que en su mayoría interpretaban la moseñada, la danza que en la cultura aymara atrae a la lluvia.