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- 2025-05-21
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El cónclave para elegir al sucesor del papa Francisco terminó con la noticia más esperada por el mundo católico: El sucesor del papa Francisco ya fue elegido y ahora se espera conocer quién será nuevo líder del catolicismo y se sentará en la silla de Pedro. El Papa ha salido en la cuarta votación al igual que Juan Pablo I.
Fumata blanca en El Vaticano. Los cardenales, que llevaban dos jornadas reunidos, han elegido al que será sucesor del Papa Francisco. Para ser Papa, el elegido debe tener dos tercios del total de los votos de los cardenales reunidos, es decir, 89 papeletas.
El Papa Francisco falleció dejando una Iglesia modernizada, ahora el nuevo pontífice tendrá la misión de continuar con el camino iniciado por el primer Santo Padre americano o virar el rumbo de la Iglesia de nuevo hacia el clasicismo más conservador.
Desde primera hora de este jueves, los 133 cardenales electores retomaron el proceso. A las 7:45 horas locales (05:45 GMT), salieron de la residencia de Santa Marta, donde permanecen alojados en régimen de aislamiento, para dirigirse a la Capilla Paulina, ubicada a casi un kilómetro de distancia. Allí concelebraron la misa antes de ingresar nuevamente en la Capilla Sixtina hacia las 9:30 (07:30 GMT).
Con el inicio de las votaciones de la tarde, los fieles comenzaron a regresar a la Plaza de San Pedro, reanudando la vigilia con renovada expectativa. A pesar de la segunda fumata negra emitida por la mañana, muchos manifestaron su deseo de presenciar en directo un posible desenlace en las rondas vespertinas del cónclave.
La plaza, que horas antes había quedado parcialmente vacía, empezó a llenarse nuevamente con peregrinos, turistas y ciudadanos romanos atentos a cada movimiento dentro del Vaticano.
Algunos grupos que se habían retirado tras la señal de la mañana retornaron con termos de café, banderas y pancartas, mientras otros llegaban por primera vez en el día, como parte de excursiones organizadas. El ambiente en la plaza oscilaba entre la calma y la expectativa, con miradas fijas en la chimenea de la Capilla Sixtina y conversaciones sobre los posibles candidatos al papado.