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Rolando Hurtado Ortiz

El ciego Bartimeo, el hijo de la corrupción


2015-09-25 - 19:24:39
MARCOS 10: 46-52
BARTIMEO era un ciego que tenía una percepción que la mayoría de las personas de su alrededor no la tiene. Él fue capaz de percibir la oportunidad del milagro cuando escuchó que el Señor Jesús estaba pasando por su camino.

El Señor estaba pasando de Galilea rumbo a Jerusalén y en ese camino pasó por Jericó.

Este es el lugar donde se encontró también con Zaqueo, el cobrador de impuestos. Bartimeo vivía en Jericó. La ciudad de Jericó se tornó una ciudad conocida como un lugar maldecido, porque Josué la maldijo cuando la conquistó. El Señor fue entonces para un lugar de maldición. El Señor tenía hábitos de ir a lugares donde otros evitaban. Bartimeo vivía en un lugar así.

Necesitamos entender el significado del nombre de "Bartimeo”. Bar en hebreo significa hijo, timeo significa: Corrompido, impuro, contaminado, desagradable, sucio.... Entonces Bartimeo significa aquel que es hijo del corrompido, impuro, del inmundo. Él vivía en un lugar maldecido, y el propio traía un legado de maldición generacional. Y para completar su desgracia era ciego y mendigo.

Es la situación de muchos cristianos, que no se identifican tan fácilmente con Bartimeo pero son espiritualmente figura de Bartimeo delante de Dios. Apocalípsis 3:17. Están junto al camino (S. Juan 14:6), pero continúan ciegos para la verdadera visión del Reino S. Marcos 10: 36-37. Estamos mendigando gloria, poder, auto gratificación...1Corintios 11:3.

Bartimeo vivía en un lugar de maldición, su familia era disfuncional, estaba destruida e impura. Él era ciego, vivía de la generosidad de otros, y estaba olvidado al lado del camino. Más un día Jesús pasó por allí, y fue el día en cual la historia de Bartimeo fue cambiada. Hoy quiero compartir cinco principios para que tu historia cambie y puedas recibir tu milagro hoy.

I.- RECONOCE TU OPORTUNIDAD. (V47).
La razón por la cual no recibimos nuestro milagro es que muchas veces estamos tan enfocados en nuestras deficiencias, limitaciones que ignoramos nuestras oportunidades. La palabra de Dios dice «Y oyendo que era Jesús nazareno, comenzó a dar voces y a decir: ¡Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí!» S. Marcos 10:47

¡Aleluya! Él era ciego, pero no era sordo, no gaste su tiempo reclamando sobre su ceguera, ignorando el hecho de que usted puede oír la voz del Espíritu Santo S. Juan 14: 26; No viva esperando la misericordia de los otros, gimiendo y mendigando su propia necesidad. Bartimeo sabía lo que quería y se enfocó en los recursos que tenía. 1Pedro 1:18. Y Dios le dio otro enfoque a su vida S. Juan 15:6. Es un hecho científico la ley de la compensación para mantener equilibrio.

El era ciego, mas su audición era muy sensible. Dios compensará la deficiencia de tu vida S. Juan 14:18-20; 26... El tuvo que preguntar ¿quién está pasando por el camino? ...muchos no reciben el milagro porque son orgullosos, no quieren que nadie sepa su real necesidad. Si no consigue ir solo puede pedir a alguien que lo lleve a la presencia de Jesús en oración. Usted necesita salir de la comodidad y correr el riesgo, muchos se quedan acomodados y no quieren procurar el milagro.

Pare de inventar disculpas, admita su ceguera, apenas levántese.

Concéntrese en la oportunidad. Bartimeo descubrió lo que estaba sucediendo, él era ciego y no podría encontrar a Jesús, pero él puede encontrarte a ti. La primera cosa que Bartimeo hizo, fue aprovechar la oportunidad. ¡Levántate hermano, aprovecha la oportunidad, la promesa del Espíritu Santo! S. Juan 14:16-17.

II.- RECONOCE A CRISTO COMO EL MESÍAS.
La expresión "Hijo de David “es usada entre los judíos como una referencia al Mesías. La verdad que el viejo testamento dice que el Mesías sería un descendiente de David. El Señor dijo a David que uno de sus propios descendientes seria colocado en el trono Salmos 132: 11, también en el libro de Jeremías 23: 5 lo confirma. Los propios fariseos lo sabían Mateo 22: 42.

Lo interesante de la historia es que el ciego pudo ver a Jesús mejor de lo que muchos lo pueden ver. Él no era apenas alguien que necesitaba de un milagro sino alguien que estaba pronto para aprovechar el milagro, y era alguien que reconocía A Jesús como "El Salvador".

Para recibir un milagro necesitamos verlo como el Hijo de David, el ungido de Israel, el Mesías que responde a la necesidad del que clama. Jesús es el cordero de sacrificio vivo, el que murió y resucitó y es el Señor del universo. Él es Todopoderoso y es también misericordioso. Lamentaciones 3: 23. ¿Cómo usted ve a Jesús?, como alguien distante? o usted lo ve como El Salvador Todopoderoso y misericordioso? Excepto Pedro, nadie vio tan claro a Jesús como el ciego Bartimeo. Los fariseos lo veían como un mesías distante indiferente, lejano. El joven rico podía verlo como un buen maestro, pero no consiguió verlo como su Señor. Las multitudes podían ver los milagros de Jesús, mas no consiguieron verlo como el cordero de Dios que quita los pecados del mundo. Ellos no consiguieron verlo como aquel que necesitaba ir a la cruz. Ellos no consiguieron ver a Jesús amigo de pecadores, de los lisiados, de los ciegos y de los cojos. El ciego Bartimeo pudo ver a un Jesús lleno de misericordia.

III.- NO PERMITA SER DESALENTADO.
Otra cosa que Bartimeo comprendió es que él no podría permitir ser desalentado por la multitud. «Y muchos le reprendían para que callase, pero él clamaba mucho más: ¡Hijo de David, ten misericordia de mí!» S. Marcos 10: 48. El ciego Bartimeo después de años siendo ciego, viviendo en la pobreza y siendo marginalizado por la sociedad, el entendió que necesitaba de sanidad, necesitaba de la misericordia del hijo de David. Tú también no debes permitir que alguien te desanime de buscar el milagro del cielo. No puedes permitir que alguien te impida llegar a Dios, para recibir la misericordia que él tiene para contigo.

No escuche esa vos de incredulidad, que nos dice: "la religión es una muleta para los débiles", "usted debe aprender a resignarse, a vivir con sus problemas". Es en ese momento que necesitamos gritar todavía más alto. No escuche la multitud, antes clame cada vez más alto. Si usted escucha la multitud el señor no lo escuchará.

IV.- TENGA CONFIANZA JESÚS ESCUCHARÁ SU CLAMOR.
La Biblia dice que Jesús estaba a camino de Jerusalén y cuando el escucha el clamor de Barti-meo él se detiene. «Entonces Jesús, deteniéndose, mandó llamarle; y llamaron al ciego, diciéndole: Ten confianza; levántate, te llama.» S. Marcos 10: 49. Amado a pesar de que exista un universo para El gobernar, Dios está dispuesto a responder el grito interior de alguien que esta afligido y que busca intimidad con El. Amado si usted necesita de un milagro clama a Él y él te responderá. Usted puedes clamar como Bartimeo: Yo vivo en un lugar maldito, mi familia es corrompida, impura y corrompida, soy apenas un mendigo ciego, no soy digno de estar delante de ti mi Señor, tú puedes clamar: ¡Jesús, hijo de David, ten misericordia de mí!

V.- LÍBRESE DE SU VIEJA VIDA. (ARREPENTIMIENTO)
Finalmente si usted quiere recibir el milagro, usted necesita dejar su capa (los mendigos usaban esa túnica hecha de pelo de camello, era usada como protección para mantenerse fresco en el sol y seco en la lluvia, era también usada para guardar las limosnas que recibía. La túnica por tanto era su marca registrada, era símbolo visible de su estilo de vida, la vida de mendigo, de estar junto al camino mendigando, «Él entonces, arrojando su capa, se levantó y vino a Jesús. Respondiendo Jesús, le dijo: ¿Qué quieres que te haga? Y el ciego le dijo: Maestro, que recobre la vista. Y Jesús le dijo: Vete, tu fe te ha salvado. Y en seguida recobró la vista, y seguía a Jesús en el camino. S. Marcos 10: 50-52.

Amado Jesús está pasando por aquí, y tal vez eres ciego (no hay peor ceguera del que teniendo ojos no ve. Jeremías 5:21; es la ceguera de aquel que no ve sus limitaciones y cree que de ninguna cosa tiene necesidad y es un miserable mendigo digno de pena, desagradable, impuro, sucio, contaminado. S Juan 3:17; El Camino a Emaús Lc. 24:13-35.

Hoy usted puede dejar su vida vieja su estilo de vida mundana, de búsqueda de poder de posición de estatus y usa la capa de miserable limosnero. Lanza fuera tu túnica y recibe la vista, recibe tu milagro hoy. ...Jesús te pregunta ¿qué quieres que te haga? Dile quiero ver, quiero andar en el camino, quiero servirte, seguir a Jesús en el camino, es pagar el precio del discipulado Lc. 9:57-62; andar en el camino es vivir una nueva vida en Cristo; es sepultar el pasado y hacer con ayuda del Espíritu Santo todo nuevo 2 Co 5:17. Esto es arrepentimiento verdadero.
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