Las revelaciones de Popeye, el sicario de Pablo Escobar
04/08/2015 - 18:15:51
Infobae.- Jhon Jairo Vel�squez V�squez lleva ya 343 d�as libre. Es conocido como "Popeye" y se define como "un ex bandido", aunque reconozca que no sabe hacer otra cosa. Pas� la mitad de su vida tras las rejas, como un reo com�n, sin privilegios. Pero fue, sobre todo, mano derecha y lugarteniente de Pablo Emilio Escobar Gaviria, el capo narco m�s sangriento de Colombia durante los a�os 80 y 90. A Jhon Jairo se le contabilizan al menos 300 muertes. Ahora vive en la clandestinidad. De esta forma intenta evitar que alguno quiera cobrarse alguna antigua deuda.
"Estoy cumpliendo con lo que dicta la sociedad, para eso me prepararon las psic�logas del penal. La libertad no es f�cil", se�al� "Popeye" en una entrevista concedida al programa Los Informantes, de la cadena Caracol.
Vel�squez V�squez ten�a 27 a�os cuando se entreg� a la Justicia y cree que ya purg� sus pecados, pero es consciente de que "la sociedad nunca perdona". "Yo no me puedo quitar el r�tulo de bandido nunca en la vida", manifest� este hombre que est� por lanzar un libro en el cual cuenta su vida. "Soy la memoria hist�rica del Cartel de Medell�n", se defini� ante la periodista Mar�a Alejandra Cardona, de Caracol.
"En la vida siempre hay unas �pocas. Hay una �poca para matar, una �poca para arrepentirse, una �poca para pagar la condena. Esta es la �poca de cambiar y resarcirme con la sociedad", se�al� "Popeye" quien en estos momentos colabora con la Justicia de Colombia, como admiti� en la entrevista.
"Yo lo �nico que s� es ser bandido", confes�, y aunque aclar� que ya no anda armado por la vida, es mejor no amenazarlo. "Soy de respeto. Y tengo amigos que tambi�n son de respeto. A m� me amenaza un tipo y tiene sus consecuencias, porque tampoco la cosa es tan f�cil. Yo soy humilde y soy como bobito, pero del todo no".
Como protagonista directo del Cartel de Medell�n, Jhon Jairo tiene secretos que no quiere llevarse a la tumba. Y necesita que quienes fueron v�ctimas directa o indirectamente de la violencia en Colombia, puedan cerrar alg�n c�rculo que quiz�s a�n permanezca abierto. Es as� como cuenta parte de lo que fue el ataque terrorista contra el vuelo 203 de Avianca, el 27 de noviembre de 1989, donde murieron 110 personas, luego de que la nave explotara en pleno vuelo. "No particip�, pero Pablo Escobar organiz�. Yo entregu� la plata para la bomba, pero yo ya pagu� por eso", record�.
Sin embargo, "Popeye" apunta contra el Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) ahora disuelto, como una parte fundamental dentro de la historia del narcoterrorismo en Colombia, durante los 80 y 90. "Sin el DAS, el doctor (Luis Carlos) Gal�n no hubiera muerto, sin el DAS no hubiera muerto Jos� Antequera, sin el DAS no hubieran muerto las 107 personas en el avi�n de Avianca", denunci� Vel�squez V�squez.
Seg�n explic� el ex lugarteniente de Escobar Gaviria, el DAS y todos sus recursos monetarios y de inteligencia eran utilizados por el Cartel de Medell�n y por la ultraderecha, al mismo tiempo, lo que desat� una guerra contradictoria e interminable dentro del pa�s y que todav�a no fue lo suficientemente investigada.
"Popeye" sabe que su vida corre peligro. Que no puede andar solo por las calles de Medell�n. El da�o que provoc� fue demasiado y cualquiera podr�a querer saldar viejas deudas de sangre. Es por eso que vive en la clandestinidad, se moviliza en veh�culos blindados, no prueba comida de extra�os y tiene conductas paranoicas. Sabe que podr�an poner fin a su vida de un momento a otro. "Yo quisiera disfrutar m�s. Pero ya con lo que he disfrutado ya estoy contento".
La periodista de Los Informantes le consult� respecto a su apodo y a si hab�a cambiado su rostro mediante operaciones pl�sticas. "Yo era m�s feo todav�a. Me dicen Popeye porque ten�a la mordida as� al contrario. Llegu� al Memorial Hospital y averig�� cu�nto sal�a una cirug�a de la mand�bula. Sal� de la cl�nica a los tres d�as. Y despu�s me hice la operaci�n de la nariz".
Con el n�mero de presidiario "0007" en su pecho y espalda, "Popeye" sobrevivi� a los peores penales colombianos. La Catedral, la Modelo, entre otras, representaron un infierno para el sicario de Escobar Gaviria. "Los bandidos tenemos dos lugares donde siempre nos encontramos, as� seamos amigos, enemigos, ricos, pobres. La c�rcel y la morgue. Ah� llegamos todos".
Y fue en la c�rcel donde se encontr� a los archienemigos de su "Patr�n", como todav�a lo llama. Los hermanos Rodr�guez Orejuela, Gilberto y Miguel, capos del Cartel de Cali, finalmente cayeron detenidos. �l lo recuerda fotogr�ficamente: "Don Miguel y Gilberto llegaron arrogantes. Don Miguel es muy prepotente. Y lleg� con un pelito de lo m�s bonito, todo peinadito. Camisa de seda muy linda, el pantal�n con la rayita aqu�, los zapatos divinos, calzoncillos Calvin Klein; el viejo, reloj de oro, cadena de oro... llega como un pavo real. Yo ya ven�a de c�rcel brava. Con el uniforme carcelario, el pelo cortado con m�quina n�mero uno... "y para all�, papito". "Vamos a ver si estos hijos de puta le van a aplicar la misma a estos viejos". Lleg� el guardia y le dijo: "la misma, papito, venga para ac�", y le pasan la m�quina. Gilberto les dijo que el uniforme no se lo iba a poner... enseguida se sac� la camisita, el pantaloncito, lo �nico que le dej� fue el canzoncillito. Zapatos carcelarios, papito. Y yo dije: "bueno, listo, ac� estamos. Vamos apara adelante"".
"Popeye" tambi�n record� el d�a en que decretaron la extradici�n de Gilberto. Habl� con �l y el enemigo de su "Patr�n" le confes�: "Todas las noches le oro al alma de Pablo Escobar, porque el que ten�a raz�n de todo esto, era Pablo. Y el viejo reconoci� y se le vinieron las l�grimas".
Jhon Jairo habla de su libertad y recuerda los a�os en Medell�n, aquella ciudad que dominara durante a�os. Se sorprendi� por la cantidad de motos que circulan por todos lados. Se r�e rememorando sus a�os de tipo duro. "En la �poca de nosotros cuando uno iba con el Patr�n, ven�a una moto y uno ah� mismo sacaba el arma, le quitaba el seguro y apuntaba, donde se iba de manos el tipo, pierde. Ahoritica son diez (motos) por aqu�, 20 por all�, 30 por all�. Y entonces, ya... disparen hijos de puta...", brome� divertido.
Tambi�n extra�a a su antiguo jefe, aunque no lo diga. La nostalgia se le nota al recordar el primer d�a en libertad. "Pas� por la Hacienda N�poles y me impact� much�simo. Todav�a el aire caliente de la Hacienda N�poles huele a aventura. Y todav�a se sent�a la presencia de Pablo Emilio Escobar Gaviria ah�".
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