Huelga policial en sureste de Brasil: Ola de violencia deja al menos 90 personas fallecidas
09/02/2017 - 14:00:59
EMOL.- Con un "Bienvenidos a Iraq", un taxista saluda a los clientes en el aeropuerto de Vit�ria, en el sureste de Brasil, adelantando el clima hostil que se vive en la ciudad debido a la huelga iniciada el s�bado por la Polic�a Militarizada y que ha dejado casi 100 asesinatos. Con algo m�s de 350 mil habitantes, Vit�ria, la capital del estado de Espirito Santo, es una tranquila ciudad que raramente aparece en los medios nacionales y que la huelga de polic�as ha llevado a las primeras p�ginas de los diarios.
Pasearse estos d�as por el pueblo es hacerlo por una ciudad fantasma, en la que pr�cticamente todos los comercios est�n cerrados, no hay transporte p�blico y apenas se encuentran personas en la calle. "Durante la noche, la cosa se pone muy fea. Es una situaci�n muy tensa", comenta Rodrigo, un joven de 24 a�os, en la cola de un supermercado. Desde que la polic�a inici� una huelga, al menos 90 personas han sido asesinadas en el estado, mientras que centenares de tiendas han sido saqueadas.
Noticia relacionada Ciudad brasile�a investiga una ola de violencia que dej� 27 homicidios en un d�a Ciudad brasile�a investiga una ola de violencia que dej� 27 homicidios en un d�a La polic�a militar se retir� de las calles el s�bado en protesta por las condiciones laborales y la congelaci�n de salarios, y, dado que por su estatus est�n asimilados al Ej�rcito no pueden hacer huelga, sus familiares bloquean los cuarteles para justificar que la paralizaci�n de la actividad de los agentes.
Presencia militar Sin la presencia de la Polic�a Militarizada en las calles, el Gobierno regional se vio obligado a pedir ayuda a Brasilia, que envi� 1.200 militares y miembros de la Fuerza Nacional. Pero su presencia no ha logrado acabar con la ola de violencia y la confusi�n y los empresarios con recursos han optado por pagar su propia seguridad y han contratado a polic�as civiles para que vigilen sus establecimientos.
"Hacemos turnos de siete horas, y cobramos cerca de 500 reales por d�a (unos 160 d�lares)", explica uno de ellos, dejando claro que no quiere ser ni filmado ni fotografiado.
"Ni nos han llamado para conversar, han dado la espalda a los funcionarios p�blicos", explic�. "Esto es un caos. Estamos aqu� porque necesitamos el dinero, cuando deber�amos estar en casa con nuestras familias, pero con lo poco que cobramos, es imposible vivir", agrega. Uno de sus compa�eros se lamenta porque hace "un trabajo que tendr�a que hacer el Gobierno, pero estamos a merced de una pol�tica barata y corrupta, no s�lo en Espirito Santo, sino en todo Brasil".
"Brasil est� fallido, son tantos robos que el pa�s est� a merced de cualquier acontecimiento como este o m�s grave", advierte. Cr�ticas y tensi�n Todas las cr�ticas se dirigen hacia el gobernador, Paulo Hartung, del Partido del Movimiento Democr�tico Brasile�o (PMDB), el mismo del Presidente Michel Temer y quien tras ocho a�os en el cargo fue reelegido a finales de 2014. "�D�nde est� el gobernador, d�nde est� el gobernador?", cantan varias de las esposas de polic�as militarizados delante del cuartel del cuerpo en Vit�ria. Los familiares mantienen un clima de colaboraci�n que s�lo se rompe ante las protestas de grupos de ciudadanos que se acercan para reclamar que los polic�as vuelvan a su actividad.
"Vengan a nuestro lado, pueblo! Necesitamos a la polic�a en las calles. A �l, Paulo Hartung, le da igual porque ya tiene sus guardaespaldas para protegerle", grita una mujer desde un cami�n utilizado como tarima en la puerta del cuartel. M�s adelante, otro grupo de mujeres tambi�n protesta: "Es una verg�enza, que vuelvan a trabajar! Son sueldos p�blicos, nos han abandonado".
La tensi�n entre las familias de los polic�as y los ciudadanos contrarios a la huelga se olvida cuando desde el cami�n se pide "una oraci�n" para encontrar una soluci�n y r�pidamente se forma un cord�n con decenas de personas que rezan para que termine un conflicto que podr�a empeorar si la Polic�a Civil se suma a la huelga.
