Mi mamá vendió mi virginidad para acabar de pagar una deuda: Colombia
05/03/2017 - 08:33:43
El Tiempo.- A los 13 a�os, Karen no entend�a por qu� su mam� no la dejaba salir sola, la encerraba con llave y no le permit�a tener novio. Ni siquiera amigos. Es verdad que su barrio era peligroso, pero un tiempo despu�s descubri� la verdadera raz�n detr�s de tanto celo: su virginidad ten�a precio.
Un d�a cualquiera, su madre la entreg� a otra mujer, que le tom� fotos, le examin� la vagina y le advirti� hasta el cansancio que hiciera lo que le pidieran sin chistar. De lo contrario, no volver�a a su casa.
�De repente me vi en una habitaci�n con un viejo gordo y agresivo que me hablaba en ingl�s. No le entend�a nada. Me desnud� y me viol�, recuerda sobre la forma como perdi� su virginidad. A cambio le dieron un tel�fono Nokia. Su madre hizo mercado por primera vez en mucho tiempo y sald� una vieja deuda.
�No conoc� a mi pap� y �ramos pobres: pas�bamos con un golpe (comida) al d�a. Entonces mi mam� se enred� con una gente mala, perdi� mucha plata y se endeud�. Dos hombres la persegu�an, la amenazaban y la cascaban cada vez que se venc�a el plazo para pagar, pero ella no ten�a c�mo responder. Y esa rabia la descargaba en m�, cuenta. Karen cree que si su mam� no hubiese pagado la deuda, una de las dos estar�a muerta. Por eso no la odia.
Los combos las reservan
Pero la pobreza no es la �nica motivaci�n detr�s de �la feria de las virginidades�, como se conoce este fen�meno en el bajo mundo. En sus recorridos por las laderas de esta capital, un investigador del Sistema de Informaci�n para la Seguridad y Convivencia (Sisc), de la Alcald�a, recogi� testimonios de familias que aseguran que los llamados combos las obligan a cuidar la castidad de sus hijas desde los 11 a�os. �Grupos armados eligen ni�as y les advierten a las mam�s que sus hijas deben llegar v�rgenes a los 13 o 14 a�os, para subastarlas a extranjeros o llev�rselas al comandante del combo�, detalla el funcionario del Sisc, adscrito a la Secretar�a de Seguridad.
�l encontr� casos en las comunas perif�ricas Villa Hermosa y Popular, donde hay altos �ndices de desempleo y pobreza.
Amantina Rengifo, presidenta de la Asociaci�n de Juntas de Acci�n Comunal de Villa Hermosa, reconoce que algunas mujeres de la zona cambian por mercados el cuerpo de sus hijas, incluso desde los 7 a�os. �Esa pr�ctica se detect� en los barrios Villatina, Altos de la Torre y Pac�fico, donde madres explotan a sus peque�as en sus propias casas o las llevan al centro o a El Poblado�, afirma.
La violaci�n de Karen ocurri� en el 2011, dos a�os antes de que Luis Guillermo Pardo, director del Centro Consultor�a de Conflicto Urbano, denunciara por primera vez las subastas de v�rgenes en Medell�n. La ONG estableci� que las subastas comienzan en 600.000 pesos y pueden cerrarse hasta en 5 millones, ofertas que generalmente provienen de extranjeros.
Entre los testimonios que Pardo reuni� est� el de una joven a quien una amiga la sedujo con regalos y luego la secuestr� para venderla al mejor postor.
La fiscal Mar�a Victoria Beltr�n lleva ocho a�os investigando historias de violencia y explotaci�n sexual infantil en Medell�n. A su despacho, la Fiscal�a 99 del Centro de Atenci�n a V�ctimas de Abuso Sexual (Caivas), llegan casos de pornograf�a, proxenetismo, constre�imiento y trata de personas. De acuerdo con su experiencia, es muy dif�cil que las v�ctimas denuncien, y m�s si sus mam�s est�n implicadas.
La historia que la fiscal m�s recuerda es la de cinco hermanas alquiladas por su propia madre a mec�nicos de un taller. La se�ora tambi�n le exig�a a su hijo de 13 a�os que ofreciera su cuerpo para ayudar a pagar los gastos de la casa.
Beltr�n dice que en su testimonio inicial, las jovencitas �con el apoyo de su abuela� contaron que su mam� las obligaba a tener sexo con hombres, les pegaba con alambres de p�as y las encerraba. El ente investigador captur� a la mujer y le pidi� a un juez que le dictara medida de aseguramiento. Sin embargo, las v�ctimas se retractaron cuando supieron que su mam� pod�a ir a la c�rcel durante al menos 14 a�os, sin rebaja de penas.
�En muchos casos, la �nica referencia afectiva que tienen las menores que sufren abuso son sus mam�s. Por eso las defienden, por muy malas que sean�, comenta la fiscal. Las cinco hermanas se acogieron al art�culo 33 de la Constituci�n, que dice: �Nadie podr� ser obligado a declarar contra parientes cercanos�.
Y aunque las denuncias por estos delitos no se pueden retirar, sin v�ctimas no hay juicio. �Encontramos historias horribles y hacemos lo posible para que haya justicia, pero los afectados no colaboran�, agrega Beltr�n.
En otros casos, los vecinos denuncian, pero no se prestan para declarar en un juicio. Y cuando los detectives buscan en las direcciones reportadas, nadie sabe nada.
La nueva vida de Karen
Meses despu�s de perder la virginidad de manera violenta, Karen se fue de su casa, en Villa Liliam. Pero no lo hizo para evitar los abusos sino porque vio en la prostituci�n una forma de hacer dinero.
Ella tiene 19 a�os, piel canela y estatura mediana, pero sus tacones la hacen ver alta. Su cabello es rubio tinturado y usa lentes de contacto azules. Su escote deja ver sus senos operados, y sus shorts, el inicio de sus caderas. Por plata, se ha acostado con m�s de 150 hombres. Fue bailarina y hoy es modelo de c�mara web en un estudio del centro de Medell�n. Casi a diario (descansando solo dos domingos al mes) le dedica 5 horas a su trabajo. Desde las 5 hasta las 10 de la noche est� frente a un computador complaciendo a extranjeros que compran paquetes de sexo por internet.
Tras un a�o en el mundo del sexo digital, asegura que ese trabajo le cambi� la vida porque ahora s� puede pensar en un futuro para ella y su mam�. Adem�s, ya nadie la manosea.
La joven afirma que mostrando hasta lo m�s �ntimo de su cuerpo gana seis millones de pesos al mes, dinero que derrochaba en lujos pero que ahora guarda para estudiar. Todav�a no decide si econom�a o dise�o de modas, pero el sue�o es uno solo: comprarle una casa a su mam�.
La Fiscal�a no tiene ni una sola denuncia
La Fiscal�a de Medell�n no tiene denuncias sobre subasta o venta de v�rgenes, pero s� investigaciones contra padres de ni�os que fueron cambiados por mercados o dinero. Tambi�n hay casos de sujetos que buscaban v�rgenes, como el del canadiense Brent Ron William Harracksing, de 35 a�os. En el 2015 fue acusado por tener sexo con menores. Este hombre, condenado a 15 a�os de prisi�n, contactaba por Facebook a jovencitas de Medell�n y les ofrec�a plata a cambio de su virginidad. Adem�s, les pagaba comisiones de hasta $ 300.000 por que le llevaran a otras colegialas. La Fiscal�a 99, la �nica de Medell�n especializada en explotaci�n sexual de menores, ha recibido 270 denuncias en los �ltimos dos a�os. Derivadas de ellas hay seis condenas y seis juicios en curso.
