Soy cristiano desde agosto de 1997, no como practicante de una religin sino de una relacin de amor directa con el Supremo Creador, a travs del nico intermediario posible para ello, Jesucristo.
Soy cristiano por el amor que Jess de Nazaret tuvo por m, ese Jess que sin haber cometido pecado, por m se hizo pecado; ese Jess que fue despreciado, golpeado, escupido, quebrantado y escarnecido; ese Jess cuyos huesos fueron descoyuntados y cuyo rostro fue desfigurado; ese Jess que llev en su cuerpo mis enfermedades y sufri mis dolores, para que por su llaga yo fuera curado; ese Jess azotado, abatido y herido por mis rebeliones, y molido por mis pecados, para que mi paz sea la consecuencia del castigo recibido; ese Jess que carg con mis transgresiones y fue avergonzado al ser colgado desnudo en un madero; ese Jess que, angustiado y afligido -sin que nadie le defienda- no abri su boca para quejarse ni para maldecir a nadie, sino que como un cordero manso fue llevado al matadero, y como oveja delante de sus trasquiladores enmudeci y no abri su boca del mal que le hacan, sino que dijo a favor de sus perseguidores y de quienes horadaron sus manos y sus pies en la cruz del Calvario -en lo peor de su estertor- la ms bella oracin intercesora que ningn ser humano, sino solo Jess, el Hijo de Dios, en tal condicin, poda hacer: Padre, perdnalos porque no saben lo que hacen.
Soy cristiano porque cuando de mi entera voluntad y sin presin alguna, cansado de la agitada vida que llevaba hace 16 aos atrs que casi me lleva a la muerte- decid depositarme en las manos de Dios para cambiar mi vana forma de vivir, siendo que el Padre me dio esta oportunidad, por Jesucristo.
Soy cristiano porque en un momento de gran desesperacin, cuando vea que mi cuerpo se deterioraba y mi alma no poda salir de mltiples conflictos, cuando no vea ninguna solucin a innumerables problemas que yo mismo haba creado, cre con mi corazn que Jesucristo era el Hijo de Dios, que vino a quitar el pecado del mundo muriendo en la cruz y al tercer da resucit, y lo confes con mi boca como mi Salvador para que mi alma no se condenara.
Soy cristiano porque si bien desde aquel momento pas a ser salvo por la gracia de Dios -al aceptar a Jess como mi Seor- cuando me dispuse a ir tras sus pasos y ser su discpulo, me convert entonces en su seguidor.
Soy cristiano adems, porque -parafraseando a Marcos Witt- no tengo vergenza ni temor de confesar pblicamente que Cristo es mi Seor, de declararle al mundo entero de su gran poder, permitir que en mi vida l se deje ver ()
Cristo es mi Seor y no me da temor, demostrar con mis acciones que l puede reinar, en la vida de cualquiera que se quiera entregar.
Soy cristiano porque toda mi vida est rendida hoy a l, por varias razones. La principal de ellas, porque si Jess no hubiera llegado a mi vida en el momento exacto, a estas alturas yo estara muerto, condenado a que mi alma anduviera en tinieblas y separada de Dios por la eternidad; pero tambin porque si le amo hoy, es porque l me am primero con amor eterno, y su amor hoy vive en m.
Soy cristiano porque Cristo pag un alto precio por mi vida, para redimirme del pecado y reconciliarme con el Padre, para abrir la posibilidad de ir a Su presencia por la eternidad all donde no hay llanto, enfermedad ni muerte.
Soy cristiano porque me considero una persona bienaventurada y agradecida al Supremo Creador, quien dio lo mejor que tena de S, no solo para que mi alma fuera salva de la ira venidera, sino tambin, para que en esta Tierra tenga vida, y vida en abundancia, tanto en el plano espiritual, como fsico y material.
Soy cristiano porque profeso la fe en Jess, el Hijo de Dios y Dios mismo, y he llegado a entender que aunque yo le confes como mi Salvador y Seor, no lo eleg yo a l, sino Dios me escogi para hacerlo -en su omnisciencia- desde antes de la fundacin del mundo. Por eso y ms, soy y seguir siendo cristiano.
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(*) Anciano del Centro Cristiano Evanglico Casa de Oracin
Santa Cruz, 28 de octubre de 2013
