19/10/2017 - 16:49:42
Actualidad.- Una serie de imágenes del cineasta Oliver Stone junto a la actriz Salma Hayek se han convertido en un nuevo motivo de indignación en el mundo del espectáculo en pleno escándalo sexual en torno al famoso productor de Hollywood Harvey Weinstein.

La revelación de varias artistas de renombre sobre las vejaciones sufridas a manos de Weinstein y silenciadas durante años parecen haber abierto una verdadera "caja de Pandora". Ahora cada vez más mujeres de diversas áreas profesionales se animan a contar abiertamente las historias de los acosos que padecieron, las cuales comparten en la Red bajo el "hashtag" #MeToo.

Tras esta serie de escándalos, los internautas recordaron un episodio relacionado con Oliver Stone ocurrido en 2012 en Londres (Reino Unido) durante el estreno de su película "Salvajes". El vestido de escote abierto que lució en esa ocasión la intérprete Salma Hayek, una de las estrellas de la cinta, pareció atraer una excesiva atención del cineasta.

A pesar de la presencia de fotógrafos y periodistas, Stone no hizo ningún intento por disimular sus ávidas miradas y hasta acercó su mano al pecho de la artista, quien no tardó en mostrar su enojo.

El interés del público hacia esas imágenes de hace cinco años fue reavivado a raíz de una serie de tuits publicados recientemente por la actriz Patricia Arquette. En sus mensajes, la artista reveló un extraño episodio ocurrido en 1994 durante el estreno de la cinta "Asesinos por naturaleza" del propio Stone. Primero, el director de cine mantuvo una reunión con Arquette, donde le propuso un papel en una película de "alto contenido erótico". Tras el encuentro, el cineasta le envió un ramo de rosas, un hecho que alarmó a la actriz, quien sintió que había "algo raro" en ese gesto que de por sí "no es infrecuente" en el mundo del cine.

Al recibir la invitación al estreno, la actriz no pudo deshacerse de la sensación de que aquello no era normal. Así las cosas, Arquette aceptó la propuesta pero decidió acudir acompañada de su novio. Ya en la proyección, Stone esperó a la artista a la salida del baño y le preguntó por qué había traído a su amante. La respuesta de actriz fue que esa circunstancia "no debería ser un problema". "Piénsalo, Oliver", concluyó entonces Arquette, quien desde entonces no ha vuelto a saber nada sobre el papel erótico que le ofreció Stone.