Sábado 18 de mayo 2024

Por qué tu perro te mira a todas horas como si fueras la única persona en el planeta


  • 12-08-2020
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Gismodo.- Los perros no miran únicamente a su dueño cuando hacen sus necesidades, en realidad cualquier momento es bueno para no dejar de mirarte fijamente en busca de algo que muchas veces se nos escapa. ¿Qué demonios quieren cuando se paran frente a ti y te clavan la mirada? La respuesta corta: depende.

En realidad, y como explican los expertos, esa mirada a todas horas y en todo tipo de circunstancias tiene poco que ver con lo que estamos haciendo en ese momento. Se trata más de lo que podríamos hacer.

Esto se debe a que los perros tienen una gran destreza en las señales visuales, por eso saben perfectamente que un paseo suele venir precedido de su dueño recogiendo su correa, o que a la hora de la comida te acercas a la despensa, o incluso que un viaje en coche viene precedido del sonido de las llaves del vehículo. Por todo ello, el perro busca indicios de que vas a hacer algo que él quiere vigilándote constantemente.

Por supuesto, las miradas también puede ser parte de un plan de nuestra mascota, algo así como un método para entrenarnos. ¿Cómo? Muchas personas es probable que le den a un perro algo de su plato si este les mira fijamente (y nosotros lo interpretamos como una señal de suplica o deseo). Si ese comportamiento se ve recompensado, entonces el perro sabe que con esa mirada suplicante puede conseguir comida.

Además, las miradas no solo implican codicia en los perros. Al igual que nosotros, al hacer contacto visual liberan oxitocina, también conocida como la “hormona del amor”. Algo así como una experiencia de unión entre los humanos y sus mascotas.

Por último, el significado de la mirada de un perro cambia completamente si no lo conocemos. En ese caso, la mirada fija sin parpadear bajo una postura rígida puede significar que nos andemos con cuidado, porque el perro podría estar mostrándose territorial e incluso podría estar considerando atacar en caso de sentirse invadido.

En estos casos los expertos recomiendan retroceder y, a poder ser, no mantener la mirada, ya que podría considerarse un acto de agresión.


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