Miércoles 17 de diciembre 2025

La verdadera Navidad



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Gran parte del planeta festeja la Navidad y no es para menos, pues ese da se recuerda a Jess de Nazaret que con su nacimiento en Beln hace 2013 aos, parti en dos la Historia de la Humanidad: antes de Cristo y despus de Cristo.

La Navidad, con el transcurrir del tiempo se convirti en varias cosas: un tiempo para endiosar a Papa Noel, para armar arbolitos con luces y representaciones de un nio sonriente en un pesebre rodeado de animalitos, as como para hacer reuniones familiares y compartir regalos, comidas y bebidas acorde a la ocasin. El pretexto es el nacimiento del nio Dios, a cuya representacin incluso adoran.

Debera ser se el sentido de la Navidad? Primero, habr que aclarar que el 25 de diciembre es una fecha improbable para el nacimiento del Redentor, a la luz de lo que la Palabra de Dios revela: Haba pastores en la misma regin, que velaban y guardaban las vigilias de la noche sobre su rebao () el ngel les dijo: No temis; porque he aqu os doy nuevas de gran gozo, que ser para todo el pueblo: que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es Cristo el Seor (Lucas 2:7-11). Siendo que los pastores cuidaban de su rebao de noche a la intemperie, no pudo ser diciembre, mes que hace un fro terrible en Israel.

Ms all que esa fecha no sea la de su nacimiento, cabe preguntarse si la Navidad debera servir para festejar el cumpleaos de Jess, o ms bien, para recordar la razn del por qu vino a nacer el Hijo de Dios en la tierra.
Creo que la verdadera Navidad debera servir para recordar el cruento sacrificio de Jess y su misin salvfica, porque la Biblia nos revela que siendo que Ud. y yo pecadores, Jesucristo fue predestinado desde antes de la fundacin del mundo para quitar nuestro pecado con el derramamiento de su sangre (1 Pedro 1:19-20). El Hijo de Dios se hizo hombre, vivi como hombre -siendo hombre no pec- y como el cordero de Dios sin mancha y sin contaminacin, ofrend su vida en la cruz para que nosotros seamos salvos de la condenacin -de la ira venidera- pero tambin, para darnos vida y drnosla en abundancia en esta tierra (Juan 10:10).
La Navidad es un tiempo cuando la gente evoca al nio-Dios, como si Jess hubiera hecho uso de ese recurso. La Biblia dice lo contrario: siendo en forma de Dios, no estim el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse, sino que se despoj a s mismo, tomando forma de siervo, hecho semejante a los hombres;  y estando en la condicin de hombre, se humill a s mismo, hacindose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz (Filipenses 2: 6-8).
Otra cosa importante que debera recordarse en Navidad -contrastante con la romntica imagen de un nio limpio, sonriente, vestido con lujos y hasta joyas- es que Jess, pese a ser el Hijo de Dios y Dios mismo (Romanos 9:5), no naci en un palacio, no fue hijo de personas importantes y tampoco detent riqueza material.

Recordar adems, que lo ms importante de cualquier cosa, como dijo Salomn, no es cmo empieza sino como termina esa cosa. El nacimiento de Jess fue el inicio de una vida ejemplar que al cabo de 33 aos, dio el fruto esperado. l vino a cumplir la voluntad de su Padre, a morir en la cruz, por Ud. y por m, para que heredemos la vida eterna y para que vivamos abundantemente en esta tierra, en lo espiritual, fsico y material. Para eso vino el Hijo de Dios.

Cmo no recordar en esta Navidad la profeca del desgarrador Dios mo, Dios mo, por qu me has desamparado? ()  Me ha cercado cuadrilla de malignos; horadaron mis manos y mis pies  () Repartieron entre s mis vestidos, y sobre mi ropa echaron suertes? (Salmos 22). Fue cientos de aos antes. Cmo no recordar otra profeca centenaria?: fue desfigurado de los hombres su parecer, y su hermosura ms que la de los hijos de los hombres (Isaas 52:14)

La verdadera Navidad debera recordarnos -ms que el cumpleaos- la pasin, muerte y resurreccin de Jess, a quien le invito recibir como su Seor y Salvador.

(*) Anciano del Centro Cristiano Evanglico Casa de Oracin