- América
- 2020-11-08
Loading
[Estamos en WhatsApp. Empieza a seguirnos ahora]
El Diario.- A pesar del optimismo de las autoridades de hidrocarburos del país, la decisión de Brasil de retirar a Petrobras de la comercialización de gas y reducir los volúmenes, deja a Bolivia sin mercado asegurado y ahora dependerá de los privados. El especialista en el tema, Humberto Vacaflor, dice que el vecino país no quiere el energético. “Carlos Miranda Pacheco, exministro de hidrocarburos y expresidente de YPFB, hizo de adivino en una columna de opinión en junio pasado: anunció que se acababa la venta de gas natural a Brasil”, recordó Vacaflor en su columna publicado en blog. La opinión surge por la información que viene del vecino país, en la que indican que Petrobras firmó un acuerdo para abrir el mercado del gas natural en Brasil, con el órgano antimonipolio, que permitirá la venta de gran parte de sus activos en el transporte y la distribución de gas en el país hasta 2021. Petrobras suscribió el acuerdo con el Consejo Administrativo de Defensa Económica (CADE) para poner así fin a una investigación por supuestas prácticas anticompetitivas en el mercado de gas, según un comunicado enviado al mercado. Con base en el documento, la compañía se comprometió a deshacerse del control del gasoducto Bolivia-Brasil. También deberá vender el 10 % de la participación que todavía posee en NTS (New Transportadora do Sudeste) y en TAG (Gas Associated Transportadora). SUSPENSIÓN Pero no solo la venta de todas sus acciones, sino también se compromete a reducir las compras de gas en 10 millones de metros cúbicos día (MMmcd), que significa casi a cero la demanda del país vecino. “Esta orden dispone que se suspenda la compra de 10 MMmcd, que es exactamente el volumen que Brasil estaba comprando, después de haber llegado a los máximos volúmenes. Esto se veía venir pero nadie había pensado que podía llegar ahora, en este año, antes de las elecciones”, reflexiona Vacaflor. Es decir, que dentro de poco Bolivia quedaría como único propietario del gasoducto que costó unos 350 millones de dólares dentro del territorio boliviano, y que se financió con un préstamo de Petrobras a YPFB. El contrato, recordaba Miranda, comenzó a ejecutarse el 11 de julio de 1999, cuando el gasoducto sirvió para llevar los primeros volúmenes de gas boliviano, que debía ser por 7 MMmcd. INTERPRETACIÓN Las autoridades nacionales ya se pronunciaron sobre la baja nominación que realiza Brasil. Vacaflor señala que la interpretación del ministro de Economía es muy diferente. Dice que Brasil y Argentina, ahora que tienen gobiernos neoliberales, han hecho tan mal las cosas que consumen cada vez menos gas boliviano, porque sus economías están en crisis, aunque ambos países dicen haber descubierto enormes reservas de gas que hacen innecesario comprarlo de Bolivia. Con los años, el volumen fue aumentando hasta llegar a los 31 millones MMmcd que se aplicó de manera religiosa, incluso reventando cabalgaduras, durante los años del alto precio, señaló. “Así se agotó San Alberto, porque había que enviar todo el gas posible, hasta que el campo comenzó a agotarse y, según los expertos, se inundó, con lo que pasó a mejor vida el mayor campo de gas encontrado jamás en Bolivia, en 1991”, sostuvo. MERCADOS En su momento, un especialista del sector de hidrocarburos opinó que los mercados de Paraguay y Uruguay, inclusive Perú, no se comparan con el de Brasil, por lo que no reemplazará en volúmenes ni en ingresos. Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) anunció que trabaja para operar en países de Perú, Paraguay, y ahora en Brasil, ya que mostró interés en participar en la licitación internacional para comprar sus acciones de Petrobras. Sin embargo, a pesar del acuerdo energético alcanzado entre Perú y Bolivia, para que YPFB provea gas al sur peruano, el presidente de la Sociedad Peruana de Hidrocarburos, Felipe Cantuarias, cuestionó el mismo. “No tiene sentido importar gas de Bolivia en lugar de promover la inversión en exploración”, apuntó y señaló que se generan más interrogantes sobre el mismo, que beneficios para el país. Cantuarias consideró que es necesario promover una mayor exploración de gas natural en el país, antes que importar el combustible desde Bolivia, según refleja el medio peruano gestión.pe. Potenciar al Perú No tiene ningún sentido. Si el Perú no tuviera potencial de exploración de gas, perfecto. Si Perú no tuviera reservas de gas, perfecto. Perú no es así. ¿Por qué no promovemos la inversión y exploración en el Perú, que genera regalías, que genera canon, que genera empleo y que nos permite ahorrar 5,000 millones de dólares en combustible, y que nos permitiría además tener un costo de acceso a la energía más barato?. Creo que el acuerdo de Bolivia genera más interrogantes que beneficios”, enfatizó durante su participación en La Hora del Gas, el presidente de la Sociedad Peruana de Hidrocarburos, Felipe Cantuarias. Cantuarias también puso en debate la política de masificación de gas natural en el país. Señaló que la pronta licitación del proyecto siete regiones debería poner en debate sobre la mesa la viabilidad de la política de uso el gas en el Perú, pues en dicha concesión resultaría costoso adquirir dicho combustible para las industrias producto del modelo de subsidio cruzado. POTENCIAR AL PERÚ No tiene ningún sentido. Si el Perú no tuviera potencial de exploración de gas, perfecto. Si Perú no tuviera reservas de gas, perfecto. Perú no es así. ¿Por qué no promovemos la inversión y exploración en el Perú, que genera regalías, que genera canon, que genera empleo y que nos permite ahorrar 5,000 millones de dólares en combustible, y que nos permitiría además tener un costo de acceso a la energía más barato?. Creo que el acuerdo de Bolivia genera más interrogantes que beneficios”, enfatizó durante su participación en La Hora del Gas, el presidente de la Sociedad Peruana de Hidrocarburos, Felipe Cantuarias. Cantuarias también puso en debate la política de masificación de gas natural en el país. Señaló que la pronta licitación del proyecto siete regiones debería poner en debate sobre la mesa la viabilidad de la política de uso el gas en el Perú, pues en dicha concesión resultaría costoso adquirir dicho combustible para las industrias producto del modelo de subsidio cruzado. Respecto de la importación de GLP proveniente de Bolivia, Cantuarias señaló que el balón de GLP no llega en precio competitivo en el sur del país por un problema en el Fondo de Inclusión Social Energético (FISE), el cual no llega a quienes deberían recibirlo por ser entregado en los recibos de luz en zonas donde no hay electricidad. “Si queremos que el GLP llegue de manera competitiva a la zona sur del país, tenemos que hacer que el FISE funcione con el programa Juntos y se entregue con el plan energético”, indicó.