Río de Janeiro espera a 1,5 millones de personas para el concierto de Madonna

El próximo sábado 4 de mayo, Río de Janeiro se prepara para recibir en Copacabana a una multitud estimada de 1,5 millones de personas para el concierto de la icónica cantante estadounidense Madonna.

Las autoridades a nivel municipal, estatal y federal han presentado un plan de acción que sigue el modelo tradicionalmente empleado durante la celebración de Año Nuevo, dice una nota de Agencia Brasil.

De acuerdo con el programa oficial, se espera que Madonna salga al escenario a las 21:45 horas para una actuación de dos horas de duración. Sin embargo, la experiencia musical comenzará mucho antes, con sets de DJ programados para iniciar a las 7 de la tarde y extenderse hasta las 2 de la madrugada. Este evento será transmitido en vivo a través de 18 torres ubicadas alrededor del escenario principal, que estará ubicado frente al emblemático Palacio de Copacabana.

Según Riotur, la empresa municipal de turismo, se han confirmado un total de 170 vuelos adicionales entre el 1 y el 6 de mayo, conectando la ciudad de Río con 27 destinos nacionales. Además, se espera un incremento del 30% en el tráfico de la estación de autobuses Novo Rio durante los días 3 y 4 de mayo.

"Esperamos alcanzar la ocupación total de los hoteles en Copacabana y que la economía de la ciudad obtenga ingresos por R$ 300 millones. Nos esforzaremos al máximo para ofrecer un espectáculo de calidad no solo para los cariocas, sino para todo el mundo", expresó Patrick Corrêa, responsable de Riotur.

Además de la audiencia en tierra, las autoridades portuarias informaron que 226 embarcaciones estarán fondeadas a 200 metros del paseo marítimo.
Seguridad

La Policía Militar desplegará 3.200 agentes únicamente en Copacabana y reforzará las patrullas en los alrededores del evento.

Además de las cámaras de reconocimiento facial ya operativas en el lugar, se instalarán 12 cámaras adicionales, así como dos drones equipados con tecnología avanzada. El dispositivo de seguridad también contará con dieciocho puntos de registro a lo largo de la avenida Atlântica, equipados con detectores de metales. Se prohibirán los objetos punzantes y las botellas de vidrio en el paseo marítimo.