Lara ordena investigación para dar con los autores de las muertes en Cotapachi

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El vicepresidente de Bolivia, Edmand Lara, expresó este lunes su profundo pésame por las dos muertes ocurridas durante un operativo de desbloqueo en la localidad de Cotapachi, municipio de Colcapirhua, en Cochabamba. 

Lara ordenó una investigación exhaustiva y anunció acciones legales para identificar y sancionar de manera ejemplar a los responsables de estos decesos.

Las muertes se produjeron la mañana del 8 de diciembre de 2025, cuando efectivos de la Policía intervinieron un bloqueo que los pobladores de Cotapachi mantenían desde hacía 12 días en el ingreso al botadero de Colcapirhua, debido a un conflicto limítrofe. Según los reportes médicos y del Defensor del Pueblo, dos hombres, identificados como Mario Padilla (39 años) y Sinforiano Carrillo (47 años), fallecieron a causa de proyectiles de arma de fuego.

El operativo policial, que se realizó en cumplimiento de una acción popular, resultó además en varios heridos, incluyendo dos efectivos de la UTOP con policontusiones. Los enfrentamientos escalaron cuando los manifestantes supuestamente usaron petardos y dinamita, y la policía respondió con agentes químicos y, presuntamente, armas de fuego, un hecho que la institución se comprometió a esclarecer con transparencia.

Lara manifestó su preocupación por el hecho de que, en menos de una semana, se hayan registrado dos episodios de violencia, mencionando la "represión" a personas con discapacidad cerca de la plaza Murillo y ahora el deceso de dos bolivianos en Cochabamba.

"Sin duda esto preocupa y, como Vicepresidente, he ordenado un informe exhaustivo para dar con los responsables. Los responsables deben asumir la responsabilidad y la consecuencia de sus actos. Bolivia no puede vivir con hechos de violencia", dijo Lara a través de un video difundido en sus redes sociales.

En un mensaje dirigido a las familias de los fallecidos, expresó su solidaridad y aseguró: "No duden que nosotros haremos todo lo que la ley nos permite para dar con los autores y los responsables y para que sean sancionados de manera ejemplar".

Como respuesta a estos trágicos eventos, dirigentes locales anunciaron un paro indefinido desde el martes en Quillacollo, exigiendo justicia por los comunarios fallecidos.